"Hace tres meses eran los mejores"

| "Hay que tratar de mantener la mística de Defensor esa de equipo duro, difícil", dijo el nuevo entrenador

HORACIO ABADIE

Jorge Da Silva asumió ayer como técnico en Defensor Sporting. Sustituyó en el cargo a Juan Tejera, que estuvo cuatro años al frente del plantel violeta. Tras la notable campaña del Uruguayo Especial —donde llegó a ser finalista— decayó en el Torneo Apertura donde disputó nueve fechas, ganó un partido y sumó cuatro empates y cuatro derrotas. Después del revés sufrido ante Fénix el pasado domingo, Tejera presentó renuncia y llegó el "Polilla", quien dijo que "siempre había soñado dirigir a Defensor".

—¿Volvés a tu casa?

—Si, muy contento. Antes que nada por tener la oportunidad de volver a trabajar, y es lo que uno siempre había soñado, ya que Defensor tiene un significado muy importante para mí porque es el único equipo que jugué aquí en Uruguay y es el equipo en el que me inicié como entrenador. Siempre había soñado dirigir el primero. Además, después de un tiempo de estar inactivo, volver al trabajo y volver al club que me dio tantas cosas, es un momento de mucha alegría.

—¿Se dio todo muy rápido?

—Sí. Me sorprendió la salida y la renuncia de Juan (Tejera), porque si bien no se habían dado algunos resultados, la campaña que hizo en la primer parte de este año y el final del año pasado había sido muy buena, con un plantel que prácticamente lo había conformado él. Realmente me sorprendió, más teniendo en cuenta la política de Defensor. Es muy raro que a un entrenador lo cesen faltando tan poco. Después me enteré que Juan había renunciado y al otro día me estaban llamando a mí. Fue todo muy rápido, no hubo mucho tiempo siquiera para darse cuenta que uno estaba trabajando nuevamente, y ayer ya estábamos al frente del plantel por primera vez.

—Y ya de movida a la cancha, el lunes arreglaste y ayer el primer movimiento.¿Cómo encontraste al grupo?

—Lo vi muy bien. Es un grupo muy joven, con algunos muchachos de trayectoria. Es un plantel que yo conozco muy bien, muchachos que jugaron conmigo, que estaban en la época en que estuve jugando mis últimos años en Defensor. A otros los tuve en selecciones juveniles. Después está el caso de Julio Rodríguez y Alejandro Curbelo, que yo los conocía de la Copa América del 2001 en Colombia que estuvieron trabajando con Víctor Púa, o sea que es un plantel que conozco bastante bien. Los vi bien, con ganas, es un grupo que quizás anímicamente no esté pasando por el mejor momento, y eso se debe quizás a la falta de confianza que tengan en ellos por los últimos resultados que se han dado. Pero lo mejor, lo bueno, es que los noté con ganas. Condiciones técnicas tienen, es un plantel que hace tres meses fue el mejor del campeonato junto a Nacional, y no puede ser que tres meses después, este mismo plantel con estos mismos jugadores, por ahí con la ausencia de uno o dos, tenga un rendimiento que sea tan diferente.

—¿Cuál es el objetivo?

—El objetivo hoy, es clasificar a la Copa Libertadores.

—¿Qué Defensor vamos a ver?

—Lo que yo pretendo es que mis jugadores sean protagonistas. Que la mentalidad esté puesta siempre en el arco de enfrente. Tratar de mantener la mística de Defensor esa de equipo duro, difícil, algo que con Juan (Tejera) lo venían haciendo muy bien, un equipo al que le costaba que le hicieran goles. Sumar eso a la dinámica, que el equipo juegue bien, y que sea protagonista, es lo que voy a buscar de ahora en más.

Las marcas que dejó el "Polilla"

Jorge Orosmán da Silva Echeverrito, nació en Montevideo el 11 de diciembre de 1961. Está próximo a cumplir 44 años, cuando asume la dirección técnica del club que lo tuvo como jugador, y al único que defendió jugando en Uruguay a nivel de primera división, tras un pasaje en divisiones inferiores por Fénix y por Danubio.

"Polilla" fue durante su etapa de futbolista un destacado centrodelantero que jugó en Defensor, en el fútbol argentino fue figura en River Plate y un referente del América de Cali colombiano.

idolo. También brilló en el fútbol europeo. En España, deleitó a los hinchas del Real Valladolid, con el que ganó el premio de "Pichichi" como máximo goleador de la temporada 1983-1984 obteniendo 17 goles en 29 partidos, siendo el primer uruguayo en obtener tan destacado título. A su vez, también defendió al Atlético de Madrid en donde jugó dos temporadas. En la primera temporada se proclamó campeón de la Supercopa de España al derrotar al Barcelona y fue subcampeón de la Recopa de Europa.

Como entrenador, Da Silva se inició en las inferiores de Defensor, dirigió a Liverpool en la temporada 2000, y posteriormente fue técnico alterno de la selección de Uruguay que ganó la clasificación para la Copa del Mundo de Corea y Japón 2002, dirigió la selección sub 20 en el año 2003.

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