Ex quarterback McNair muere de un balazo

El ex quarterback de la NFL Steve McNair, quien llevó a los Titans hasta el Súper Bowl del 2000, apareció muerto ayer con un balazo en la cabeza en un condominio del centro de Nashville, dijo la policía local.

El vocero policial Don Aaron confirmó que la policía acudió a una vivienda tras un llamado y encontró allí muerto a McNair, de 36 años, y a una mujer. Ambos habían sido baleados, pero Aaron dijo que las autoridades aún no saben qué sucedió

``No tengo ninguna respuesta para ustedes respecto a lo que pasó y quién es responsable´´, dijo.

Aaron dijo que la policía ha identificado a la mujer en forma preliminar pero no divulgó su nombre, aunque confirmó que no era la mujer de McNair, Mechelle.

No se había detenido a ningún sospechoso, agregó.

``Hay personas que estaban cerca del condominio hoy, visitantes, que fueron llevados a la estación central para ser interrogados, sólo para ver qué saben, qué pueden haber visto´´, dijo el vocero.

Aaron dijo que la policía fue a la escena del crimen tras recibir una llamada que reportó que había personas heridas en el condominio.

McNair jugó 13 temporadas en la NFL y condujo a los Titans en el Súper Bowl del 2000, cuando estuvieron a una yarda de empatar para llevar al partido a tiempo extra. Había sido la tercera selección del draft y también jugó en los Ravens de Baltimore antes de retirarse, tras la temporada del 2007.

``Fue uno de los mejores jugadores que hayan jugado para nuestra organización y uno de los jugadores más amados por nuestros simpatizantes´´, dijo el dueño de los Titans, Bud Adams, en un comunicado. ``Jugó con una garra y un liderazgo indiscutibles y nos llevó a lugares a los que nunca habíamos llegado, incluyendo nuestro único Súper Bowl´´, agregó el breve comunicado.

Cuando los Oilers de Houston se mudaron de Texas a Tenesí hace más de una década, el equipo necesitaba un rostro para vender la NFL en un lugar en que el fútbol americano universitario era el principal deporte desde hacía muchos años.

Ese rostro fue el de McNair.

El talentoso y poco convencional quarterback le dio al equipo la base para comenzar su reconstrucción. También ayudó a convertir a los rebautizados Titans en uno de los ganadores más constantes de la Conferencia Americana, un equipo construido más sobre su dureza que sobre sus estadísticas.

El juego temerario de McNair lo convirtió en un icono de una comunidad donde muchos de los habitantes se conocen.

Esta es una razón por la que su muerte fue más perturbador para sus ex compañeros.

``Es como que no se lo puede creer, como que alguien estuviera haciéndonos una broma cruel´´, dijo el ex receptor Kevin Dyson. ``Es tan irreal´´. (AP)