JOSÉ MASTANDREA
Llegaron refuerzos de todo tipo y color. Los grandes cargaron baterías para pelear con todo su potencial los dos frentes: el Campeonato Uruguayo y la Copa Libertadores de América.
Defensas, mediocampistas y atacantes estuvieron en el tapete durante el período de pases.
El objetivo es el mismo: ganar todo lo que haya de aquí hasta el final de la temporada.
Primero pegó Nacional. Con la llegada de Juan Ramón Carrasco, se empezó a armar a gusto y antojo del entrenador.
No extrañó que "JR" apuntara a los jugadores de River Plate. Los conoce y ellos conocían como nadie su sistema de juego. Combo perfecto. Pero no sólo llegaron los refuerzos de River. Se sumaron otros, y en zonas donde ya había figuras.
Tabaré Viudez sacudió el ambiente. No sólo porque se decía que llegaba a jugar por Peñarol, sino porque Nacional lo tenía escondido, como uno de los "tapados" que traería en el período de pases. Después llegaron hombres como Jonathan Charquero, Bruno Fornaroli y Nicolás Vigneri.
¿Y el "Morro" García? ¿Y Horacio Peralta? ¿Y el "Canguro" Richard Porta? Todos nombres que ya estaban y que peleaban por un lugar en el equipo. Pero... refuerzos son los refuerzos, hasta el debut, claro.
Ahí empezó a lucirse Peralta (28). Justo él que no era tenido en cuenta y hasta pudo emigrar. Se puso el equipo al hombro y Nacional funcionó cuando él manejó la pelota. Mientras fue un punta más o cuando pasó a hacer la función de enlace, Peralta fue la figura tricolor en el partido frente a Wanderers por la primera fecha del Torneo Clausura. "¿Refuerzos a mí?", debe haber dicho íntimamente, y con su clase, demostró que va a ser muy difícil sacarlo.
En Peñarol pasó algo similar. Llegó Diego Aguirre y con él hubo listas de altas y bajas.
Se apuntó a reforzar la defensa, fundamentalmente, el flanco izquierdo. Así fue como llegó Tony Peralta (una de las primeras incorporaciones) y también se sumó Walter López (aún en duda porque sigue con contrato en Rumania). Dos laterales izquierdos con proyección y velocidad. Darío Rodríguez (36) caminaba por la cuerda floja. Era, hasta no hace mucho, uno de los futbolistas con cartel de prescindible, sin embargo, el polifuncional no bajó los brazos y siguió entrenando como el primer día.
Hoy, es una de las figuras con las que cuenta el equipo de Diego Aguirre. No sólo por lo que demostró en los partidos del verano sino por lo que jugó en la primera fecha frente a Miramar Misiones. Fue el único en el conjunto aurinegro que arrancó dos ovaciones desde la tribuna partidaria. Con su entrega, su juego, y sus subidas por el lateral, no sólo se afianzó en la titularidad sino que ya nadie se acuerda que los primeros refuerzos que llegaron eran laterales zurdos para suplantarlo.
"¿Refuerzos?... no me hagan reír", debe haber sentido en su fuero más íntimo. Fue de las figuras de Peñarol.
Los grandes se armaron hasta los dientes. Pero terminaron salvando la plata, los mismos de siempre. ¿Y los refuerzos? Bien, gracias...
Las cifras
9 altas tuvo Nacional: J. Viera, F. Córdoba, Marques, Carlao, A. Silva, Viudez, Vigneri, Fornaroli, Charquero.
90 minutos jugó Facundo Píriz en el debut ante Wanderers y fue de las mejores figuras de Nacional.
12 altas tuvo Peñarol: Carini, Peralta, Freitas, Torres, Mier, Aguiar, J. M. Olivera, Valdez, J. Urretaviscaya, M. Guevgeozian, Cepellini, F. Rodríguez.
7 fue el puntaje más alto en el equipo aurinegro. Darío Rodríguez fue el más destacado.