Pacheco dio una buena señal

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SILVIA PÉREZ

Mientras todo el mundo piensa en los regalos navideños y en el momento de alzar la copa, los aurinegros no descansan. El técnico Gregorio Pérez y los directivos trabajan arduamente procurando armar el Peñarol del 2007.

Luego de la reunión llevada a cabo el jueves por la noche en el Hotel Sheraton entre el entrenador y los integrantes de la Comisión de Fútbol, se han tirado las primeras líneas para armar un gran equipo.

Si bien hay varios jugadores en carpeta, la prioridad para los aurinegros es la vuelta de Antonio Pacheco. "Es un gran jugador y un ídolo para la institución", dijo Gregorio dejando en claro la importancia del "Tony".

Sin embargo, la posibilidad de que el delantero volviera al equipo parecía muy poco probable. La mala relación entre el Grupo Casal, quien representa al futbolista, y Peñarol, parecía un impedimento difícil de salvar. Pero la voluntad del jugador ha pasado a jugar un papel preponderante en el tema. "Quiero volver a Peñarol", le dijo Pacheco a Gregorio y su intención puede abrir las puertas para su retorno a filas aurinegras.

VOLANTE. Otra de las intenciones del técnico mirasol es conseguir un acompañante para Egidio Arévalo Ríos en la mitad de la cancha. Y el nombre que cada vez cobra más fuerza es el del palermitano Julio Mozzo.

Cabe recordar que cuando se concretó la llegada de Arévalo, la prioridad de Gregorio era justamente la incorporación de Mozzo. La preferencia del entrenador se basaba en el parecido de Mozzo con Pouso, a quien Pérez intentó retener a toda costa.

Y los nombres de Mozzo y Pouso vuelven a entrecruzarse, porque la llegada del palermitano estaría supeditada al probable retorno de Pouso desde Inglaterra, donde su pasaje por el Charlton no fue lo que él esperaba.

Sin embargo, da la impresión que son más las posibilidades de Mozzo, sobre todo por razones económicas. Seguramente, las aspiraciones de Pouso no serán pocas, acostumbrado a los euros del primer mundo, y en ese sentido, los aurinegros ya tendrán que hacer un gran esfuerzo para incorporar a Pacheco.

De todas formas, para solucionar el tema de Mozzo hay que esperar que regrese al país Pablo Bentancur, lo que seguramente sucederá en la presente jornada. De cualquier manera, seguramente el tema se dilatará hasta el martes debido al feriado navideño.

ZAGUERO. Con respecto a la posible incorporación del actual zaguero de Independiente, Guillermo Rodríguez, si bien es cierto que a Gregorio Pérez le interesa y tiró su nombre sobre la mesa la otra noche en el Hotel Sheraton, su llegada no sería tan fácil.

Según aclaró Mario Barilko del Grupo Bentancur, el ex defensa de Danubio tiene contrato con los rojos de Avellaneda hasta mitad del 2007. Por si fuera poco, Rodríguez también es pretendido por un equipo de México, donde ya tuvo un pasaje por el Atlas. Todo lo antedicho haría muy poco probable su llegada al equipo aurinegro.

CASTILLO. Finalmente, y luego de las explosivas declaraciones realizadas por su representante Humberto Schiavonne, ayer se solucionó la situación de Castillo y continuará defendiendo a los aurinegros. Se cumple así el deseo de todos, tanto Gregorio Pérez como del propio arquero, que quería quedarse en la institución.

LATERAL. Si bien se han manejado los nombres de varios laterales, el único en quien realmente están interesados los aurinegros es Gonzalo Lemes, el inteligente lateral derecho de Central Español.

Por último, otro de los nombres que estuvieron arriba de la mesa es el del delantero de Cerrito, Juan Manuel Ortiz. Su nombre ya fue manejado en anteriores oportunidades, concretamente cuando Luis Garisto estaba al frente del equipo, y el presidente aurinegro ve su llegada con buenos ojos.

Ortiz es representado por Walter Audifred y aún tiene contrato con el equipo del Cerrito de la Victoria. Por otra parte, también hay un interés por el delantero desde México, concretamente del San Luis de Potosí.

Paolo: El técnico habló con Montero hace unos días para saludarlo por las fiestas, pero en esa oportunidad no trataron el tema de su continuidad en el club. Ayer Gregorio volvió a llamarlo pero no lo encontró y le dejó un mensaje.

Capria: Gregorio lo llamó y le dijo que quería seguir contando con él, pero la última palabra la tiene el jugador. Con respecto a su alto salario, ningún directivo le mencionó nada sobre el tema al entrenador.

Olveira: El entrenador mantuvo una conversación telefónica con el defensa. Aunque por su situación familiar Olveira preferiría retornar a Colombia, aún no ha recibido ninguna oferta como para hacerlo. Si finalmente no la recibe seguirá en Peñarol.

Cardoso: en la víspera Gregorio intentó comunicarse con el delantero que está en Rocha, pero no lo ubicó. Al igual que en otros casos, su continuidad depende de sí mismo.

Para el arquero Adrián Berbia el de ayer no fue un día más. Por la mañana se casó por civil con Fernanda, su pareja de hace años y por la tarde firmó contrato con Peñarol. Por si fuera poco, esta noche se casará por iglesia.

Su último equipo fue el O`Higgins de Chile, pero rescindió su contrato y en los pasados cinco meses no jugó en ningún club. Hace unos días lo llamó Gregorio Pérez para preguntarle cuál era su situación y si le gustaría volver al club al que defendió hasta el 2003. "Fue todo muy rápido. En dos o tres días se arregló la situación. Estoy loco de la vida", confesó Berbia, quien está en buen estado físico porque estuvo entrenando en Juventud de Las Piedras. "Cuando volví de Chile no estaba habilitado para jugar, por eso estuve entrenando con Juventud. Le estoy muy agradecido a Julio Ribas y a todo su cuerpo técnico porque me trataron como a uno más del grupo. Hasta hacía fútbol y todo", contó.

Aunque no se fue bien de Peñarol, Berbia no vive su vuelta como una revancha. "El tiempo que estuve en Peñarol me sentí siempre muy bien y muy cómodo, luego me tocó irme pero fue por otros temas. En ese momento me representaba el Grupo Casal y como las cosas estaban mal entre ellos y Peñarol yo quedé en el medio, pero esto no es una revancha para mí. Estoy muy feliz de volver al club", explicó el arquero.

Berbia es consciente que deberá pelear un puesto con Juan Castillo, pero no es un tema que le quite el sueño. "Vamos a pelear sanamente, como se debe. Lo conozco de haberlo enfrentado algunas oportunidades y por algunos amigos en común, pero no he tenido casi contacto directo con él. De todas formas, tengo las mejores referencias", finalizó Berbia.