Con doblete de Nico Ordoqui, Peñarol le ganó a Nacional y se consagró heptacampeón uruguayo de fútbol sala

Redacción El País
Una semana atrás, Peñarol había tenido la oportunidad de consagrarse como campeón de la temporada, pero Nacional se quedó con la final del playoff, forzó una nueva definición y el título del Campeonato Uruguayo de Fútbol Sala de AUF para el Mirasol, su séptimo al hilo, tuvo que esperar hasta este fin de semana.

No había mañana para el tricolor en la final del mata a mata: si perdía, el auriengro, que se quedó con el clasificatorio, sería el campeón. Aún con algunas bajas en el plantel los dirigidos por Aníbal Roba se aprovecharon de los errores de su rival y el Bolso, con un gran inicio del encuentro, se quedó con la semifinal de la temporada por 7-6 estirando la definición.

Este domingo, una semana más tarde, quien tuvo un gran inicio del partido fue el Carbonero, que llegó con la sangre en el ojo por haber perdido el primer encuentro, y se notó. La final se volvió a disputar en el mismo lugar: el Polideportivo de Las Piedras.

La semana pasada había sido Nacional y esta vez fue Peñarol que sacó una ventaja que los tricolores nunca pudieron igualar. En el aurinegro no estuvo Lucas Paroldo y en el tricolor no jugó Lucas Pollero, ambos expulsados en el duelo anterior.

Los dirigidos por Diego D'Alessandro propusieron una presión alta que dio sus frutos. Al minuto de juego Nicolás Orodqui anotó el primero y, luego de tres vueltas del reloj, el capitán de Peñarol estiró la ventaja de penal.

Los aurinegros tuvieron ocasiones suficientes para concretar el tercero y eso motivó un minuto de tiempo del elenco tricolor para reordenarse. A pesar de eso, Franco Duque finalmente anotó el tercero de Peñarol cuando corrían 13 minutos, en una buena jugada colectiva, y solo quedó resto para el descuento antes del descanso con el tanto de Alexis Otonelli, que cambió penal por gol.

Nacional, que había terminado siendo superior en la primera mitad, pudo ponerse a tiro con un nuevo descuento, el de Facundo Abad, incuso antes de llegar a la mitad del complemento. Gran contra del equipo tricolor que parecía tener más aire de cara al final del partido.

A falta de prácticamente cuatro minutos para alcanzar el tiempo regular, el arquero-jugador de Nacional era figura mientras que Peñarol se dedicaba a defenderse. Lo hizo bien y el partido terminó 3-2 en favor del aurinegro que ganó su séptimo título al hilo en la categoría. Una supremacía absoluta.

Nacional arrancó algo dormido y lo pagó muy caro. Peñarol, con la sangre en el ojo por lo ocurrido en la final del playoff, donde quizás arriesgó demasiado, volvió a ser el de siempre y con un inicio muy bueno sacó ventaja y supo sufrir sobre el final para coronarse una vez más.

A diferencia de otras temporadas, hay algo que festejaron los dos. Ambos equipos jugarán la próxima Copa Libertadores de futsal porque el aurinegro, último campeón, le abrió un cupo más a Uruguay y este será ocupado por los tricolores por haber alcanzado la definición.

Foto: AUF