BUENOS AIRES | EFE
Argentina se clasificó anoche para el Mundial de Alemania 2006 con una victoria de oro frente a Brasil (3-1), que obtuvo por su contundencia en la primera parte y por la falta de precisión y puntería de los norteños en la segunda.
Dos goles de Crespo y uno de Riquelme dieron a los argentinos el pasaje al Mundial en un encuentro de alto voltaje, en el que el delantero del Milán italiano fue la figura y Ronaldinho sólo apareció en contadas ocasiones. Roberto Carlos anotó de tiro libre el tanto de Brasil.
El domino argentino durante los primeros 20 minutos fue absoluto y a partir de ese momento los brasileños recuperaron la pelota mientras que los locales dieron muestras de haber sentido el esfuerzo y se retrasaron en el campo.
Brasil puso una pizca de aceite a su engranaje creativo en la segunda parte, Kaká entró en contacto con el balón con mayor frecuencia y Argentina, apurada por las circunstancias, dio poco juego a Riquelme y perdió consistencia.
En un cuarto de hora los brasileños llegaron cinco veces con peligro a los dominios de Abbondanzieri, sin que el equipo local pudiera mantener el balón en su poder. Los argentinos se retrasaron en exceso y salieron a cortar el juego en los límites de su área, frente a un rival revitalizado.
La lógica indicaba que Brasil iba a descontar de un momento a otro su desventaja en el marcador y a los 71 lo logró con un tiro libre de Roberto Carlos. Adriano estrelló un tiro en un poste a los 83 minutos y dio por tierra cualquier reacción norteña.