LA CLAVE
El gobierno informó que, como parte del plan de ampliación de horarios pedagógicos, se podría contratar a ONG, asociaciones civiles y clubes. Algo para apoyar a los recursos estatales en ese imprescindible aumento de horas. La respuesta de los gremios y la dirigencia opositora es previsible. Indignación y denuncias de que se “privatizaría” la educación. Es llamativo, pero en los gobiernos previos se expandió como nunca la presencia de las ONG en todo el Estado. Y nadie reclamó. ¿No es raro?