Las declaraciones del ex director de Casinos del Estado, Javier Chá, motivaron que el intendente Orsi le aceptara la renuncia de inmediato. Era claro, si se tomaba en serio esas declaraciones, no había otro camino. Pero Orsi señaló que era todo una broma. La pregunta es entonces por qué lo sacó del cargo. Todo el mundo sabe que en el entorno de Orsi, siempre de impostado buen tono, se agrupa un grupo de radicales que piensan igual que Chá. Y su salida busca exorcizar eso más que hacer justicia.