El presidente Orsi se alineó (¡vaya sorpresa!) con su mentor Lula da Silva, para criticar toda intervención en Venezuela. Hay algo que estos presidentes no quieren asumir: la culpa de que hoy Maduro sea el problema que es para el continente, es suya. Hace al menos una década que Venezuela es una cruenta dictadura de izquierda. Los gobiernos afines han mirado para otro lado, mientras el país se convertía en un estado fallido, algo que no es sostenible. ¿Qué alternativa presentan?