LA CLAVE
Es lamentable que una nueva generación de dirigentes del MPP, o del MLN como gustan llamarse en ocasiones especiales para vestirse de un manto insurreccional, siga festejando todos los años la llamada “Toma de Pando”. Se trata de un episodio patético de la historia nacional, no solo porque fue un fiasco desde el punto de vista “militar” para los tupamaros, sino porque allí murió gente inocente. Y que se dio, no hay que olvidarlo, en tiempos de un gobierno plenamente democrático.