Sindicalistas o República

Es conocido. Una persona llamó a un veterinario amigo y dle dice había encontrado un animalito desvalido en la calle. Dudaba a que especie pertenecía. El veterinario le respondió que si tenía cabeza, cuerpo, cuatro patas, era peludito, y ladraba, no dudara que se trataba de un perro.

La actividad dada la pandemia conoce de emprendimientos privados que cerraron para no abrir más. Sin espalda para sostener prácticamente dos años de actividad mermada o nula. Muchos trabajadores -por lo mismo- no han retornado a sus viejos empleos pre-pandemia. En otro aspecto muchos compatriotas han padecido coronavirus y algunos han fallecido. El daño económico y social se atemperó merced al gobierno nacional de coalición que mantuvo la actividad económica bajo la consigna de la libertad responsable sin encierro. Así, la economía del país trás el huracán se viene recuperando. Con proyección de normalización.

La administración presidida por Luis Lacalle Pou, entre otras medidas también hizo una amplia extensión del seguro de paro, en algunos casos parcial y complementario de ingresos menguados por la falta de la continuidad en el trabajo. Y que nadie olvide que el nuevo gobierno recibió del Frente Amplio una economía en crísis, con tendencia a la desocupación consistente superior al 11%. Y, 346 asentamientos en Montevideo, 121 en Canelones y otros 200 más en el resto del país.

Hoy, los datos revelan que el desempleo se ubica en el 7% siendo el registro mensual más bajo de los últimos 4 años, respecto de la gente en edad activa que busca trabajo y no lo encuentra. Datos de esta naturaleza merecen cautela pero lo respetable es advertir la tendencia cuando se viene saliendo de una situación crítica.

Los empleados públicos - con la excepción de una vanguardia inclaudicable en la salud, fuerzas policiales y armadas que no conocieron pausas- pasaron generalizadamente a tareas virtuales, y nadie tuvo merma en sus retribuciones, ni temor a perder el empleo.

Desconociendo la realidad citada hoy se advierte la protesta de agitadores estatales con reclamos, pancartas, cánticos y agresividad desbordante. Ignoran que sus sueldos y beneficios provienen de los recursos que extrae el Estado a la producción y el trabajo de todo el pueblo uruguayo. Inserto en la incertidumbre expresada. Un Estado que vio sus ingresos mermados y vivió una austeridad inevitable.

La Ley de Urgente Consideración (LUC) fue elaborada por equipos técnicos competentes y divulgada ampliamente ante la ciudadanía en el proceso electoral de 2019. Sus soluciones las votaron las mayorías nacionales del movimiento republicano que asumió la dirección del país en marzo de 2020.

El Frente Amplio dominado en exclusividad por agitadores sindicales afiliados al comunismo y los tupamaros, sin tregua puso palos en la rueda en todo los órdenes al gobierno electo. Tanto en el combate al COVID, como respecto del cúmulo de soluciones propuestas por la LUC, sin dar propuestas alternativas a lo que promueven anular plebiscitariamente de esta ley.

Presintiendo el fracaso comicial han contratado a un comunista aburguesado -“publicista” profesional- para organizar una campaña de desinformación y mentiras. Lo de siempre. Son lo que son (“si ladra… es perro”).