Profesionales universitarios

Ante la situación actual la Caja de Profesionales Universitarios decidió que las pasividades de julio 2025 se abonarán fraccionadas. Un 75% se hará en julio y el 25% restante el 7 de agosto. Es gravísimo para quienes cuentan con este recurso como único medio de vida.

La institución es un ente paraestatal cuyo Directorio está integrado por representantes de los profesionales (5) y por dos profesionales representantes del gobierno nacional. Los errores de gestión, si los hay, fueron compartidos entre la representación profesional y el Estado. El actual sistema de aportación determinado por fictos por categorías a las que se va ascendiendo, con mayor costo, a medida que pasan los años, desestimula la afiliación paga, especialmente en personas jóvenes para las que la pasividad es cosa lejana. Y, en las categorías altas, estimula al retiro a los 60 años, para quienes la pasividad les implica un ahorro de gastos y un ingreso de retiro. De los 194.236 profesionales existentes, no aportan quienes son solo dependientes del Estado o de la actividad privada, aportando a otras cajas; ni quienes declaran no ejercicio que son 109.758 (hay muchos casos de apariencias engañosas que encubren tarea profesional).

El Frente Amplio, hoy gobierno nacional, nunca compareció constructivamente a ninguna convocatoria para encarar la seguridad social realizadas desde gobiernos de otra orientación. Por el contrario supo actuar para la tribuna, rebajando la edad de aportación de 35 a 30 años, y facilitando al infinito la prueba de servicios con testigos, alimentando la industria de nuevas jubilaciones, lo que agravó severamente las cuentas del Banco de Previsión Social y de la asistencia del Estado. Y, en un plebiscito en las últimas elecciones nacionales, el partido comunista, quería poner en la Constitución “soluciones”, que hubiesen quebrado definitivamente a la economía del país. Ese partido hoy tiene la titularidad del Ministerio de Trabajo…

El actual Ministerio de Economía por su parte, dice que lo único que cabe es poner más impuestos a jubilados y profesionales activos, apagando el incendio con nafta, en un sistema que se ha dicho es perverso.

Como ha sostenido la asociación de Profesionales Independientes en Defensa de la Caja Profesional, los timbres equivalen al aporte patronal en esta actividad laboral. Han perdido su valor durante los últimos 20 años, por ser mal calculados y haber aumentado menos que las pasividades en ese lapso (estimándose han perdido un 24% de valor). Y, además, en beneficio de los actores privados se han dispuesto exoneraciones que deben terminar.

Destaca además que: 1.- los profesionales han destinado 535 millones de dólares al BPS a través del impuesto recaudatorio del IASS; 2.- a diferencia de otras cajas paraestatales la Caja Profesional y el BPS no recibió nunca dinero del Estado; 3.- muchos profesionales dependientes que aportan al BPS nunca recibirán la totalidad de sus aportes por los topes jubilatorios vigentes, siendo procedente y justo que el IASS que grava los ingresos de los trabajadores profesionales se destine a proteger a la Caja Profesional; 4.- deben adoptarse modificaciones en la gestión administrativa de la institución.

La rigidez dogmática que hoy se oye predicar, demonizando a los profesionales es inconducente. Y, mala para la sociedad.