El columnista Francisco Faig con esa versación que le caracteriza y pluma punzante y diáfana, el domingo pasado se refirió sin nombrarlos a distinguidos adherentes del FA que muestran una versión más moderada en sus opiniones, sin perjuicio de lo cual están coadyuvando a que el FA sea una alternativa seria de triunfo en noviembre próximo.

Tengo como sensaciones encontradas: refiere a que en general creo en la buena fe de la gente, sea del pelo político que sea, o en cualquier ámbito de la vida, y por otro lado soy consciente que esos técnicos del FA que Faig no nombra, están ayudando a que el Partido Comunista y los socialistas de Civila puedan llegar a ser gobierno.

Una aclaración a priori: el Frente Amplio estuvo 15 años en el gobierno y aquí hubo capitalismo, hubo propiedad privada, no se socializaron los medios de producción y todos los rubros que le quieran adherir a una pretendida doctrina marxista leninista. No pasó nada de eso. Y convencido estoy, así gane la ingeniera Cosse, apoyada por el PCU, que nada de eso pasará, porque bien saben empezando por el citado partido, que esa doctrina ha fallado en el mundo entero, dato no relato, y que lo único posible sería una democracia de tono liberal, donde tal vez la diferencia estribe en mayor o menor intervención del Estado.

Ahora, ahora; y pongamos nombre propio a las cosas. El Ec. Gabriel Oddone, a quien podríamos tildar de socialdemócrata, ha dicho públicamente que apoya a Yamandú Orsi y que a esta altura de su vida donde tuvo que terminar de trabajar por edad en un conocido bufete de plaza, no estaría en condiciones de negarse si se le ofreciera el cargo de ministro de Economía.

No podemos negar bajo ningún aspecto la versación del citado Oddone en el tema que nos compete. Erudito, estudioso, ha escrito decenas y decenas de ensayos, libros, orador de fuste y agrego yo, porque lo conozco, un buen tipo. Mi matiz con Faig es precisamente ese. Yo creo en la buena fe de Oddone y él realmente quiere hacer un aporte a su país, pese a que en su partido hay gente que está en las antípodas de su pensamiento. Eso luce contradictorio, absolutamente.

Tartufo según la Real Academia significa persona hipócrita y falsa, sin perjuicio de ser el personaje de Molière, en su calidad de impostor.

Ahí viene mi disenso con Faig; el Ec. Oddone no es ni hipócrita ni falso. Me consta. No tengo duda que él cree con buena fe que el proyecto político del FA es lo mejor para nuestro país y no hay ulterioridades o subterfugios al respecto. Y mucho menos hace eso para poder acceder eventualmente al cargo de ministro de Economía en la eventualidad que gane Yamandú Orsi la interna y se lo ofrezcan. Oddone está por encima de eso.

Claro... surgen contradicciones. Oddone abomina del plebiscito por la seguridad social donde se incorporarían tres artículos en la Constitución, cuando el programa del FA dice que hay que ir contra “el ahorro individual lucrativo”, verbigracia, las AFAP, y el citado Oddone consciente de ello, igual apoya a dicha colectividad política. Por un lado, tácitamente está de acuerdo porque así lo dice el programa y por otro se ha despachado in extenso contra el plebiscito que patrocina el Pit-Cnt. Como dijera el presidente Mujica... “como te digo una cosa...”.

Se me podrá tildar de lírico o iluso, es más lo hacen, pero a priori doy un voto de confianza.

Extrapolo lo de Oddone y también poniendo nombres propios, vamos al Ec. Pablo Ferreri, otrora viceministro de Danilo Astori, director de la DGI y actualmente, asesor de Carolina Cosse. Ya lo era cuando Intendenta e infiero que sigue así.

Llama la atención y se lo he dicho a Ferreri, que él que está en las antípodas del pensamiento comunista o del socialismo de Civila, esté ocupando dicho lugar. La política tiene cosas que a veces cuesta entender. Tampoco la precandidata es comunista y su apoyo viene de dicho partido.

Pero aquí también, no hesito en manifestar que Ferreri tiene buena fe y además, hombría de bien. Por lo mismo, porque lo traté y lo trato, sin perjuicio de leer decenas de artículos de su autoría. Y que igual que Oddone no está detrás de un eventual Ministerio de Economía en caso de que ganara la elección la ingeniera Cosse.

Va la misma crítica que a Oddone; está en contra del plebiscito por la incorporación de artículos a la Constitución, ignorando el programa del FA. También contradictorio.

Es muy difícil para mí disentir en algún aspecto con alguien tan centrado y erudito como Francisco Faig, quien también se expresa con su honestidad intelectual acostumbrada y teniendo todo el derecho a pensar de esa manera.

Pero al conocer a Oddone y Ferreri no quedaría en paz con mi conciencia si no aporto lo que pienso de ambos. Tal vez y reitero, me gane el lirismo. No lo puedo saber. Sé que escribo de acuerdo a mis convicciones.