Notable incremento de novillos jóvenes en faena frigorífica

CONSULTORA SERAGRO

Semana a semana, los operadores y analistas del complejo cárnico vienen destacando la importancia del volumen de la faena vacuna. Los registros que se han difundido muestran un incremento constante en el número de animales procesados por la industria frigorífica, al punto que en lo que va del año se está superando en más de un 20% los ya cuantiosos volúmenes de faena del mismo período del año pasado. Está claro que, además de las conocidas capacidades de la cadena cárnica, hay factores coyunturales que están incidiendo en este resultado, como fue la breve pero dura sequía que sufrió el país durante el mes de enero pasado, la que empezó a superarse a partir de las lluvias de la semana pasada. La estrechez en la disponibilidad de forraje y agua para los ganados inducía a un aumento circunstancial de la oferta, impulso que ya se interrumpió.

Pero si bien es importante el volumen total, no es menos relevante el dato que refiere a la composición de la faena, y que expresa cabalmente el nivel de eficiencia general del sistema, como es la extracción de los novillos por edad.

Hacia fines del año pasado, hicimos referencia a la excelente performance que se había logrado en esta materia, ya que el número de novillos de dentición incompleta faenado había sido altísimo, tanto en términos absolutos como relativos, ya que representó un 57% en el total de la categoría, en un año que se habían batido todos los récords de faena de novillos. Nunca antes se habían alcanzado esos porcentajes, lo que sugiere que están ocurriendo cambios trascendentes en los sistemas de producción.

Para llevar a un grado de terminación adecuado a los novillos jóvenes hay que arrancar de terneros bien criados, tener pasturas sembradas y un manejo afinado de los animales a lo largo de toda su vida, así que lograr tan elevada proporción de los mismos en la faena, indica que hay un cambio relevante en el funcionamiento de la ganadería, que está retomando, mejorados, índices de eficiencia que se interrumpieron hace como 5 años.

Pero hay datos aún más sorprendentes. El 57% de novillos jóvenes del año pasado es el promedio simple de una realidad muy diversa, ya en el que el primer semestre ese porcentaje no llegaba al 48%, mientras que en el segundo semestre ese porcentaje se acercó al impactante 66% del total. En el pasado mes de enero la tendencia se repite, y los novillos de dentición incompleta suman un 63% del total, mientras que en enero del 2004 apenas superaban el 50%, de una faena mucho menor.

Puede pensarse que la extracción de los novillos de boca llena se rige por factores estacionales, ya que la mayor parte de las invernadas tradicionales de animales añosos se realizan en campos naturales, y esas gorduras se completan en el otoño avanzado, con lo que se equilibrarían en parte estos porcentajes.

Seguramente haya algo de esto, ya se verá, pero debe señalarse que todo el crecimiento registrado en el número de novillos faenados proviene de los animales jóvenes, marcando una tendencia definida de modernización de gran importancia.

Fueron finalmente 50.597 los novillos faenados en la semana comprendida entre el 30 de enero y el 5 de febrero, según rectificó ayer el Instituto Nacional de Carnes. Ayer El País publicó que dicha cifra había alcanzado las 51.774 cabezas, tomando como fuente a la Asociación de Consignatarios de Ganado. Una corrección de INAC determinó que finalmente fueran 4.737 los animales procesados por Frigorífico Tacuarembó y no 5.554, tal como se había establecido, por lo que no fue la primera planta en el ránking de faena de la semana, sino el tercero, detrás de PUL S.A. y Carrasco. De cualquier forma, la cantidad total de 50.957 finalmente registrada fue inédita.