El canciller brasileño Celso Amorín se reunirá con dirigentes europeos al final de la semana que viene en Europa con el propósito de aproximar posiciones en el marco de la Ronda de Doha de negociaciones comerciales que impulsa la Organización Mundial de Comercio (OMC).
La sugerencia fue hecha por la jefa del gobierno alemán, Angela Merckel, durante una conversación telefónica sostenida este lunes con el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva. "La canciller Merckel dijo que considera muy positiva la disposición brasileña de llevar adelante las negociaciones y afirmó que no se opone a una negociación en el más alto nivel propuesta por Lula da Silva", según reveló el vocero presidencial Marcelo Baumbach, según consignó AFP.
Lula le había propuesto a Merckel "una reunión política en nivel de jefes de estado" como una vía para sacar a las negociaciones del estancamiento, luego de constatar que "la buena voluntad de ambas partes no se tradujo en resultados concretos porque los números de las propuestas no correspondieron a la realidad".
De acuerdo con lo manifestado por Merckel, "todas las oportunidades de entendimiento deben ser aprovechadas y la continuidad de las conversaciones en otros niveles mejoraría las posibilidades de obtención de buenos resultados", relató el vocero brasileño.
La jefa del gobierno alemán le propuso a Lula un encuentro entre Amorim y los negociadores europeos, lo que fue aceptada de inmediato. En el encuentro, en alguna ciudad europea aún no determinada, participarán Amorim, los negociadores europeos, representantes de Portugal (que ejerce la presidencia de la UE) y también de Alemania.
Se busca que los norteamericanos reduzcan el subsidio que le otorgan a sus agricultores. En los últimos 3 años, dieron U$S 15.000 millones en subsidios. "Estamos pidiendo que den sólo U$S 12.000 millones, pero ellos quieren aumentar a U$S 17.000 millones", dijo el vocero de Lula.