Redacción El País
El consumo online cada vez va tomando más impulso entre los usuarios uruguayos. En este marco, la Cámara de la Economía Digital del Uruguay divulgó un informe (elaborado por la consultora Factum) al que accedió El País, el cual tiene como objetivo central dimensionar el uso de internet y el consumo digital realizado por los uruguayos en la actualidad y cómo ha venido evolucionando.
El relevamiento responde las siguientes preguntas: ¿Qué actitud toma el uruguayo frente a las compras online? ¿cómo ha sido su experiencia en lo que refiere a consumo digital y qué tipo de instrumentos utiliza regularmente para moverse a través de este mundo?
Uso y acceso a Internet
En lo que refiere a los dispositivos y el acceso a Internet, el informe realizado por la consultora Factum señala que nueve de cada diez personas declaran algún tipo de actividad ligada al consumo digital, ya sea por una compra determinada o por una búsqueda en la web.
En este caso, se destaca el uso de los smartphones (84%), las laptops (17%), PC (10%) y las tablets (5%). Por otro lado, un 10% no buscó información de productos ni de servicios a través de la red. A este grupo lo integran, básicamente, la población de mayor edad, la clase baja y quienes viven en el interior del país.
En tanto, ocho de cada diez uruguayos usa su smartphone para conectarse a Internet cuando busca o compra productos y servicios, mientras que tan solo uno de cada diez uruguayos se muestra reacios al e-commerce.
En relación a las diferencias entre segmentos de la población, el informe de la CEDU indica que no se aprecian diferencias significativas en el uso de smartphones entre la población uruguaya, mientras que la utilización de laptops se destaca entre el público joven en Montevideo, sobre todo entre las clases sociales media y alta. Mientras tanto, el uso de la PC resalta entre los hombres jóvenes, sobre todo en las clases sociales media, media-alta y alta.
Con respecto a la calidad de acceso a Internet, se resalta que siete de cada diez personas consultadas por Factum consideran que la calidad de conexión "siempre es buena", percepción que sigue siendo ampliamente mayoritaria pese al mínimo, pero gradual descenso en los últimos años, ya que en 2023 el 74% de las personas consideraba siempre buena la calidad de conexión, aunque fue bajando un poco en 2024 (73%) y 2025 (72%).
En este apartado, la opinión de que la calidad de la conexión es “siempre buena” se incrementa a partir de los 45 años de edad en adelante. A su vez, también aumenta a medida que asciende la clase social.
Por otro lado, el mayor uso de Internet se concentra en Whatsapp (93%), mientras que en segundo lugar aparecen las Redes Sociales (80%), seguido de la compra de productos y servicios que no estén relacionados al delivery (69%).
En este caso, siete de cada diez usuarios activos de e-commerce utilizan Internet para comprar productos y servicios, mientras que tres de cada diez usuarios lo hace para apps de delivery/pedido. En tanto, solo dos de cada diez usuarios utiliza la web para consultar plataformas de transporte.
Vale destacar que también se aprecia un leve, pero sistemático crecimiento en la magnitud de los consumidores únicos, ya que en 2025 llegaron a su máximo registro histórico (67%). En este caso, los consumidores únicos corresponden aproximadamente a 1.810.000 uruguayos de 18 años y más de edad.
Cuando el uso de Internet se da para compras, se destaca el fuerte incremento en la adquisición de productos/sevicios (pasó de 55% en 2024 a 69% en 2025), al mismo tiempo que descendieron los pedidos de deliverys (pasó de 35% en 2024 a 33% en 2025) así como el uso de apps de transporte (pasó de 27% en 2024 a 25% en 2025). Aquí la compra de productos/servicios se destaca entre quienes tienen entre 18 y hasta 44 años. Por otro lado, a medida que asciende la clase social, se van destacando los usuarios que contratan deliverys, así como apps de transporte. En ambos casos, hay una mayor afinidad entre los residentes de Montevideo en el uso de la entrega a domicilio delivery y de las plataformas de transporte.
Con respecto la utilización de Internet para el entretenimiento, descendió el uso genérico de las redes sociales (pasó de 81% en 2024 a 80% en 2025), mientras que se mantiene el uso para videos, TV, streaming y música (69% en 2024 y 2025). En tanto, el uso de videojuegos en línea pasó de 23% en 2024 a 22% en 2025. Vale destacar que en el uso de las redes sociales y de los videos, tv y streaming, se presentan diferencias significativas según la edad, aumentando su uso a medida que la misma desciende.
El informe también destaca el uso de Internet para gestiones. En esta ocasión, se incrementa considerablemente la educación online (pasó de 36% en 2024 a 48% en 2025) y en los servicios de salud (pasó de 26% en 2024 a 35% en 2025). Por el contrario, han bajado los trámites/pagos por transacciones (pasó de 62% en 2024 a 58% en 2025).
La educación a distancia aumenta su uso a medida que asciende la clase social, así como a medida que desciende la edad. En tanto, los servicios de salud registran un mayor uso entre las mujeres, así como en las clases alta y media-alta. Asimismo, los trámites/pagos por transacciones también presentan la característica de una mayor utilización a medida que se incrementa la clase social.
Otro punto es el uso de Internet para la comunicación. Ha bajado el uso de Whatsapp (pasó de 96% en 2024 a 93% en 2025) y se mantiene la lectura de noticias (68% en 2024 y 2025). Por el contrario, sí ha aumentado fuertemente el teletrabajo (pasó de 16% en 2024 a 24% en 2025).
En este apartado, el uso de Whatsapp no presenta diferencias relevantes entre los diferentes segmentos de la población. En cambio, la lectura de noticias sí muestr mayor influencia en la clase social, ya que a medida que la misma aumenta, también se incrementa la lectura de noticias a través de la web. En tanto, el teletrabajo presenta el mismo perfil según clase social, y a su vez se ve influenciado por la edad, ya que su uso aumenta a medida que la edad baja.
Frecuencia
Quienes compraron a través de Internet varias veces en el último año presentan un mayor peso entre los usuarios de entre 18 y 44 años de edad, a medida que también se incrementa de acuerdo a la clase social. También se destaca el descenso de las personas que nunca han comprado nada por esta vía (pasó de 32% en 2024 a 30% en 2025), quienes presentan un perfil concentrado en el tramo de mayor edad, así como de menor clase social.
Canales de compra y medios de pago
Si bien la mayoría de las compras web se hacen en Uruguay, también hay una gran incidencia de operaciones con el exterior. Los canales más relevantes son los marketplaces de Uruguay (79%), siendo el principal canal de compra. A este le siguen las tiendas online de Uruguay (43%) y los marketplaces del exterior (43%).
Luego, aparecen los sitios que venden de entradas a espectáculos y restaurantes de Uruguay (36%), seguidos por: sitios de hoteles, pasajes y alojamientos de Uruguay (25%), sitios de hoteles, pasajes y alojamientos en el exterior (23%), redes sociales (21%) y las tiendas online del exterior (20%).
En cuanto a los diferenciales entre segmentos de la población, la compra a través de marketplaces de Uruguay no presenta diferencias relevantes entre los distintos segmentos. En el caso de los del exterior, así como las tiendas online de Uruguay, se destaca una mayor incidencia de uso a medida que aumenta la clase social. Con respecto a las entradas de espectáculos y restaurantes, también presentan el mismo perfil según clase social, pero a su vez resaltan la cantidad de compras desde Montevideo.
En relación a los medios de pago para la compra online, se destacan los pagos en línea a través de tarjetas de débito (58%) y por las de crédito (57%). A estos métodos de pago le siguen las transferencias bancarias (41%), el pago por tarjeta de débito de manera presencial (36%), el mismo método a través de la tarjeta de crédito (26%) y luego las redes de cobranza (24%).
En esta ocasión, la compra online con tarjeta de débito presenta una mayor afinidad a medida que baja la edad, y sobre todo en la capital. En tanto, las compras mediante tarjeta de crédito es más habitual a medida que aumenta la edad y también a medida que sube la clase social. Las transferencias bancarias, en este caso, registran una mayor afinidad entre las mujeres, sobre todo las de clase alta y clase media-alta.