MARÍTIMAS
Se trata del “Mirabella 5”, considerado el yate a vela más grande del mundo de un mástil. Vale US$ 50 millones.
Se trata de una obra de arte que puede observarse con deleite e envidia. El megayate “M5” -antes “Mirabella 5- fue un capricho del dueño de la empresa Avis Rent a Car, Joseph Vittoria, quien le encargó a su esposa que dirigiera todos los detalles de los interiores del barco. La esposa de Vittoria no quería interiores clásicos y sí mucha innovación.
Vittoria encargó el plano del yate al conocido arquitecto naval, Ron Holland, padre de desde hace 40 años de diseños de veleros y de embarcaciones a motor pioneros. Por ejemplo, Holland diseñó para la exclusiva marca irlandesa de veleros Swan considerados los “Rolls Royce de los mares”.
Vittoria quería transformar al “M-5” en la estrella de su negocio de alquiler de veleros de lujo junto con el Mirabella y el Mirabella III. El objetivo de Vittoria apuntaba a los millonarios: planeaba alquilar el superyate a 300.000 euros por semana.
Tras acordar con Ron Holland, Vittoria contrató al astillero inglés Vosper Thornycroft que, a partir del diseño de Holland, comenzó a armar un rompecabezas que hasta poseía partes eleboradas con tecnología aeroespacial, según informó la Revista “Nauta 360” en su página web.
La construcción del supervelero costó US$ 45 millones. El “Mirabella 5” tenía 78 metros de eslora (largo), 16,7 metros de manga (ancho) y como poseía orza abatible, su calado (profundidad) oscila entre 10 a 18 metros. El tamaño de las velas es gigantesco. Cubren siete canchas de tenis y casi una de fútbol. Su mástil, el más alto del mundo, mide casi 90 metros de altura. Aguanta los 3.000 kilos de peso de las velas y tensiones superiores a 3.600 kilos. Para evitar la escora (inclinación), el velero ajusta en forma automática su velamen.

El “Rey de los Veleros”, como lo bautizó la prensa especializada, fue botado en 2004. Poco después Vittoria lo vendió al magnate petrolero texano, Rodney Lewis, quien inició su negocio en 1980 tras comprar un pozo petrolero con su padre -un piloto de la Fuerza Aérea de Estados Unidos- en US$ 13.000. Hoy es millonario.
Lewis contrató a otras empresas para realizar una refacción del “Mirabella 5” que pasó a llamarse “M5”. Los “arreglos” costaron otros US$ 5 millones.
Proveniente de Brasil, el “M5” atracó el 27 de marzo frente a la Isla Gorriti (Punta del Este). Allí estuvo fondeado 10 días. El miércoles 6 arribó al Puerto de Montevideo. La empresa J.R. Williams agenció al barco combustibles y provisiones. Al caer la tarde de ese miércoles, el velero zarpó rumbo a Punta Arenas (Chile). Es que su propietario cuando observa en el mapa un destino que le interesa, se sube a uno de sus jets y se dirige hacia el lugar y luego pasa una estancia a bordo del megayate.
Lujo
En si garaje ubicado en las dependencias inferiores y en la popa (parte de atrás), el megayate puede alojar un automóvil, motos de aguas, kayaks e incluso tres pequeñas versiones por control remoto del propio velero. También otros juguetes como dos minisubmarinos eléctricos biplaza. La intención del dueño es que sus invitados disfruten.
Aumentó un 15,4% movimiento de contenedores en este trimestre
Comparando el trimestre enero-marzo del 2021 , con una operación en el Puerto de Montevideo de 134.367 contenedores, con el trimestre enero/marzo del 2022, con un movimiento de 155.062 cajas, se registra un crecimiento del 15,4 % en la actividad.
Los buenos números de este año del principal puerto de Uruguay se deben a varias razones: un incremento de la exportaciones e importaciones y al regreso al país de carga paraguaya, dijo el presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Juan Curbelo. “Esa carga volvió al Puerto de Montevideo debido a decisiones adoptadas dentro de ANP que dieron resultados”, dijo Curbelo en alusión a que se mejoró la competitividad y la eficiencia de la terminal.
Cámara de armadores rechaza dichos de Andrade y pide una reunión
La Cámara de Industrias Pesqueras del Uruguay (Cipu) expresa su rechazo absoluto a las declaraciones del senador comunista, Oscar Andrade, respecto a la existencia de “trabajo esclavo” en la flota pesquera nacional. “Convocamos al senador a retractarse o a realizar las denuncias formales que es su obligación hacer. No dude el Senador de que en caso de existir pruebas de tan grave denuncia, las empresas del sector acompañarán las investigaciones necesarias para que la autoridad correspondiente actúe en consecuencia”, dice la cámara. Y agrega: “En nuestra visión, la situación denunciada es posible desmentirla tajantemente y denunciar lo opuesto: una verdadera dictadura sindical”.