Antel está implementando técnicamente un sistema prepago de telefonía fija que permite a los clientes controlar el gasto en llamadas, según confirmó a El País la presidenta de la empresa, María Simón.
El objetivo del servicio, que será lanzado en las próximas semanas y comunicado junto con las facturas telefónicas, es brindar un nuevo beneficio y generar una "solución para el problema de la morosidad", según explicó Simón, "por los gastos que se producen fuera de la capacidad de pago de las personas".
Mediante el sistema, los usuarios podrán pagar una cuota mensual con derecho a cierto crédito de minutos para llamadas y tendrán la posibilidad de comprar tarjetas inteligentes para agregar minutos al saldo del mes.
Actualmente Antel cuenta con 1.004.000 líneas fijas de teléfonos en uso pero no ofrece la posibilidad de limitar el consumo telefónico como forma de control del gasto.
A pesar de esto, según Simón, Antel tiene 150.000 clientes que "solo pagan la cuota fija, es decir, pagan por tener teléfono, utilizan hasta 50 cómputos y se cuidan muy bien de no excederlos". Asimismo agregó que existen "400.000 clientes que pagan menos de $ 500 por mes", o sea, que más allá de pagar la cuota fija, "se cuidan mucho en lo que gastan".
En plaza sí existen aparatos electrónicos que permiten realizar el corte de la llamada a los tres minutos o el bloqueo de la salida de los teléfonos que comienzan con cero.
En los últimos meses se registraron frecuentes reclamos de parte de usuarios por llamadas supuestamente no realizadas, que mediante este sistema podrán controlarse. Antel no ha logrado establecer con claridad los motivos por los que aparecen esas anomalías.