Publicidad

El dólar tuvo la mayor caída mensual en 3 años, pega en la competitividad y el gobierno intervino

Compartir esta noticia
Un hombre mira la cotización del dólar en una pizarra de una casa de cambio en Uruguay. Foto: Marcelo Bonjour
MARCELO BONJOUR

MERCADOS

El dólar no paraba de caer, lo que puso en alerta a los exportadores que reclamaron la intervención del BCU. Ayer la autoridad monetaria compró dólares (con lo que le puso un “piso” a la caída).

Este contenido es exclusivo para nuestros suscriptores.

El dólar tuvo en agosto la mayor caída mensual en tres años, se desvalorizó en prácticamente todas las jornadas y prendió alertas en los exportadores. El billete verde no encontraba un “piso”, lo que llevó a que el gobierno volviera a intervenir en el mercado cambiario tras casi seis meses sin hacerlo.

¿Qué pasó? El billete verde tuvo una tendencia a la baja durante casi todo el mes. Por un lado influyó un factor externo, como la perspectiva de que la Reserva Federal (Fed) estadounidense esperará un poco más antes de tomar la decisión de subir las tasas de interés. La tasa de interés de la Fed marca “el precio” del dinero, ya que es quien inyecta o quita dólares del mercado estadounidense.

“Para que el dólar se fortalezca, podría ser necesaria una subida de tasas de interés por parte de la Fed. La última vez que la entidad monetaria subió las tasas de interés fue en 2018 y en el mercado se estima que se produciría un nuevo incremento en 2023”, evaluó José Pedro Giraz, director para América Latina de Skilling, una firma escandinava de fondos de inversión.

Al factor externo, se le sumó uno local, lo que a su vez explica que el comportamiento de la moneda estadounidense en Uruguay se separara de su mercado de referencia: Brasil

Este factor fue la decisión del Banco Central (BCU) de aumentar la tasa de política monetaria (que marca “el precio” del dinero, en este caso el peso uruguayo) de 4,5% a 5%. Eso sumado a la perspectiva de futuras subas en la tasa, lleva a inversores a tener la expectativa de que los retornos que obtendrán por los activos en pesos serán mayores todavía y que les conviene cambiar parte de su portafolio de dólares a pesos. Eso lleva a ventas de la divisa estadounidense y su consiguiente baja. Parte de esto ya se observó en la última semana, cuando los títulos que emite el BCU se colocaron a mayores tasas a las que venían haciéndolo.

Entonces, el dólar interbancario bajó en agosto un 2,84% “punta a punta” (al comparar el valor de ayer con el de fin de julio), el quinto mes en el año en que retrocede y la mayor caída mensual desde julio de 2018 (había descendido 2,9%).

De los 21 días en los cuales hubo cotización, el billete verde retrocedió en 15 y aumentó solo en seis.

El mayor ascenso diario se dio el 19 de agosto cuando subió 0,18% y el descenso más importante fue el 23 de agosto cuando bajó 0,6% (fue la mayor caída diaria desde fines de julio de 2020). El máximo valor alcanzado por la divisa se dio el 6 de agosto cuando cotizó en $ 43,703 y el mínimo fue el 30 con un valor de $ 42,434 (mínimo desde el 3 de febrero).

En agosto, la moneda estadounidense prácticamente borró lo que venía subiendo en el año y ahora el alza en 2021 es de 0,29%.

Cotización del dólar "punta a punta" en agosto. Foto: El País
Cotización del dólar "punta a punta" en agosto. Foto: El País

El promedio mensual del dólar se ubicó en $ 43,222, lo que implica una caída respecto al promedio de julio de 1,40%.

Esta situación de la divisa puso en alerta a los exportadores. El lunes, la asesora económica de la Unión de Exportadores (UEU), María Laura Rodríguez dijo a El País que la gremial mantuvo una reunión con las autoridades del BCU para “expresarle la preocupación por la baja” del dólar que “ya lleva varios días y no se revierte esa tendencia”.

Ayer la moneda estadounidense cortó una racha de cinco caídas consecutivas, al subir mínimamente 0,07% y negociarse en promedio a $ 42,464. Esa suba fue posible tras la esperado (por los exportadores) intervención del BCU en el mercado de cambios. La autoridad monetaria compró US$ 31,2 millones, tras casi seis meses sin intervenir (a principios de marzo había vendido dólares en el mercado de futuros y forwards). La última compra de divisas por parte del BCU había sido el 30 de abril de 2020, cuando adquirió US$ 6,3 millones.

Eso generó que ayer fuera el día de mayor operativa en el mes: 139 transacciones por un monto de US$ 71,9 millones. En todo el mes se negociaron en las pantallas de la Bolsa Electrónica de Valores US$ 485,9 millones en 1.041 transacciones.

Al público, en las pizarras del Banco República (BROU), el dólar bajó $ 1,20 en el mes “punta a punta”. El promedio pizarra en agosto a la compra fue de $ 42,02 y a la venta de $ 44,42. Ayer la cotización al público subió 10 centésimos respecto al lunes y cerró en $ 41,30 a la compra y $ 43,70 a la venta.

En Brasil, el principal mercado de referencia cambiaria, el billete verde subió 0,42% en agosto y finalizó en 5,1433 reales. Si la suba no fue mayor, fue porque ayer el dólar bajó 1% frente al lunes. En el año, la divisa cae 1,03% en Brasil.

Hombre contando billetes de dólares. Foto: Archivo
Hombre contando billetes de dólares. Foto: Archivo

En Argentina, el dólar oficial subió un 0,03% ayer y finalizó en 97,74 pesos argentinos. En agosto el aumento fue de 1,09% y en el año sube 16,15%.

Competitividad.

Previo a la fuerte caída de agosto, el mayor debilitamiento del dólar en Uruguay (frente a otros mercados) y la aceleración de la inflación en julio, empezó a pegarle a la competitividad de los productos uruguayos.

El tipo de cambio real (que es una medida de competitividad, aunque no la única) bajó 0,11% en julio frente al mes, según los datos publicados ayer por el BCU. Esta pérdida de competitividad es la segunda en lo que va de 2021 (en enero disminuyó 1,99%), y se da luego de que en los cinco meses previos se dieran mejoras.

La caída en la competitividad de julio respecto a junio, que conlleva un aumento de los precios de los bienes uruguayos medidos en dólares en relación con la de sus principales socios comerciales, se explica por una pérdida de competitividad frente a los socios extrarregionales, dado que respecto países de la región se dio una mejora en el indicador.

Ante los socios comerciales de fuera de la región, el tipo de cambio real bajó 0,32% en julio frente a junio. Es el segundo mes consecutivo de caída.

Frente a Argentina y Brasil la competitividad mejoró 0,18% en julio frente a junio (con una suba ante Argentina de 2,06% y una baja ante Brasil de 1,68%).

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad