CAMPAÑA ELECTORAL
El presidente anunció que la vacuna contra el COVID-19 estará en semanas. El candidato demócrata lo responsabilizó por las miles de muertes durante la pandemia.
Donald Trump y Joe Biden protagonizaron anoche el último debate antes de las elecciones del 3 de noviembre. Este estuvo lejos del caos del primero el 29 de septiembre, y se acercó más al tono de los debates tradicionales de los presidenciables estadounidenses. De todos modos, hubo acusaciones duras; por ejemplo, el presidente republicano dijo que su rival demócrata es un “corrupto”, y éste lo responsabilizó de las muertes por la pandemia del COVID-19.
Mucho se jugaban Trump y Biden en el debate de anoche en Nashville, Tennessee. Unos 47 millones de estadounidenses se han sumado a una ola sin precedentes de votaciones anticipadas, y según los sondeos la mayoría que no lo hizo ya tomó una decisión. Biden lidera por 7,9 puntos en las encuestas a nivel nacional, y por 4,1% en los estados clave, según el promedio de RealClearPolitics.
El primer bloque del debate estuvo dedicado a la pandemia del coronavirus. Trump insistió en que habrá una vacuna contra el COVID-19 “en cuestión de semanas”.
“Creo que (habrá una vacuna) dentro de semanas, y será distribuida muy rápido”, indicó Trump, quien interpelado por la moderadora sobre cuál será la farmacéutica que lo conseguirá, dijo “Johnson&Johnson lo está haciendo muy bien, Moderna lo está haciendo muy bien, Pfizer lo está haciendo muy bien”.
Biden, por su lado, atacó con fuerza a Trump por su gestión de la crisis del coronavirus y dijo que alguien “responsable” por tantas muertes (222.220 en Estados Unidos) no puede seguir en el poder.
“Cualquiera que sea responsable de tantas muertes no debería seguir siendo presidente de Estados Unidos”, afirmó Biden y advirtió que se viene un invierno “oscuro” en el país con más muertos en el mundo por el virus, en términos absolutos.
“Estamos a punto de entrar en un invierno oscuro, y él no tiene un plan claro” para combatir el COVID-19.
“(Trump) dice que la gente está aprendiendo a vivir con esto. ¡Increíble! Estamos muriendo con esto”, dijo Biden.
Trump acusó a su rival de querer “cerrar el país”. “No nos podemos encerrar en un sótano como lo hizo Joe”, en relación a los pocos actos de campaña electoral que realizó Biden.
También se enfrentaron en torno a las denuncias sobre la injerencia de Irán y Rusia en las elecciones de Estados Unidos.
Biden dijo que si gana las elecciones, Irán, Rusia y China “pagarán el precio” de haber interferido en los comicios. “Rusia ha estado involucrada, China ha estado involucrada con cierto grado y ahora nos enteramos de que Irán está involucrado, pagarán un precio si soy elegido”, dijo Biden.
Trump replicó que nadie ha sido más duro con Rusia que él. El presidente acusó al candidato demócrata de haber recibido 3,5 millones de dólares de Rusia. “Joe consiguió 3,5 millones de dólares de Rusia y vinieron de (Vladímir) Putin porque fue muy amigable con el exalcalde de Moscú, Usted obtuvo 3,5 millones de dólares”, dijo Trump a Biden.
El candidato demócrata respondió que nunca recibió “ni un centavo” de un país extranjero. “Nunca he recibido ni un centavo del extranjero en toda mi vida”, indicó Biden frente a las acusaciones que Trump repite desde hace semanas de que hubo irregularidades en los negocios de Hunter Biden en Ucrania, cuando su padre era vicepresidente (2009-2017) de Barack Obama.
Biden aseguró que los negocios de su hijo en Ucrania fueron “éticos”. “El tipo que se metió en problemas en Ucrania fue este (Trump), que intentó sobornar al Gobierno ucraniano para que dijera algo negativo sobre mí, lo que no hicieron”, dijo Biden. El demócrata acusó a Trump de no haber publicado ninguna declaración fiscal, le recordó que tuvo cuentas bancarias en China, y le preguntó: “¿Qué está escondiendo?”.
Trump respondió que tiene muchas cuentas bancarias y que todas están registradas. “Soy un hombre de negocios haciendo negocios”, dijo en medio de una polémica por una revelación del diario The New York Times de que mantuvo tratos comerciales en China y tenía una cuenta en el país.
El presidente dijo que la cuenta estuvo activa entre 2013 y 2015 cuando estaba dedicado a negocios inmobiliarios y también defendió haber “prepagado millones de dólares” en impuestos antes de llegar a la Presidencia.
“Yo ya he prepagado millones de dólares en impuestos”, dijo Trump, al asegurar que fue decisión de sus contables y que apenas fue informado de ello la semana pasada.
En otro pasaje del debate, Trump acusó a Biden de ser un “político corrupto” al insistir que recibió dinero de Rusia, China, Ucrania e Irak.
“Esto es un montón de basura”, respondió Biden sobre las acusaciones de Trump, quien dijo que el demócrata “no es un bebé inocente”.
Biden comparó el intento de acercamiento de Trump al líder norcoreano, Kim Jong-un, con los intentos de apaciguar a la Alemania nazi antes de la Segunda Guerra Mundial. “Teníamos una buena relación con (Adolf) Hitler antes de que invadiera el resto de Europa”, dijo Biden.
En cuando a la política migratoria de Trump, el demócrata dijo que era “criminal” separar a niños migrantes de sus padres, una estrategia que el mandatario usó en 2018 pero tuvo que suspender ante una ola de indignación.
“Esos chicos están solos, sin ningún lugar a donde ir. Eso es criminal”, dijo Biden en relación a la revelación que todavía hay cerca de 545 niños separados de sus padres.
Trump defendió la política de “tolerancia cero” a la migración y afirmó que los niños habían sido llevados a la frontera de Estados Unidos por traficantes y por “mala gente”.
Irán y Rusia salieron ayer jueves al cruce de las acusaciones de la Casa Blanca y negaron estar detrás del envío de correos electrónicos amenazantes a votantes de Estados Unidos y de un intento por interferir en el proceso electoral. Los gobiernos iraní y ruso tildaron de “infundada” la alerta emitida el miércoles por el director de la Inteligencia Nacional de Estados Unidos, John Ratcliffe, según la cual ambos países ya han obtenido información de votantes estadounidenses y están tratando de interferir en los comicios del 3 de noviembre.
“La República Islámica de Irán rechaza las repetidas alegaciones inventadas y engañosas de los funcionarios del régimen estadounidense y reitera que, para Teherán, no importa cuál de los dos candidatos actuales a la Casa Blanca” gane las elecciones, dijo el portavoz de Exteriores del Gobierno iraní, Said Jatibzadeh.
La Casa Blanca acusó particularmente al régimen iraní de haber accedido a datos de votantes estadounidenses y haberlos usado para perjudicar al presidente Donald Trump. “Ya hemos visto a Irán enviar falsos correos electrónicos diseñados para intimidar a votantes, incitar tensiones sociales y perjudicar al presidente Trump”, apuntó.
Por su parte, el portavoz del Gobierno ruso, Dmitri Peskov, aseguró que las acusaciones contra Rusia “están llegando todos los días, todas son absolutamente infundadas, no se basan de nada. Más bien es un tributo a los procesos políticos internos asociados con las próximas elecciones” en Estados Unidos.
Voto anticipado de Trump
El presidente Donald Trump votará anticipadamente mañana sábado en Palm Beach, donde se encuentra su complejo Mar-a-Lago, en Florida. El subsecretario de prensa de la Presidencia, Judd Deere, dijo que Trump tiene la intención de votar en persona cuando esté el sábado en Palm Beach, a donde el año pasado trasladó su residencia legal, que antes tenía en su domicilio en Nueva York.
En Florida, uno de los estados en los que se prevé un duelo más reñido entre Trump y su rival demócrata, Joe Biden, se puede votar anticipadamente desde el pasado lunes para las elecciones del próximo 3 de noviembre. Mientras Trump vota en Palm Beach, su antecesor en el cargo, Barack Obama, estará en Miami haciendo campaña a favor de Biden. Por su parte, el vicepresidente, Mike Pence, tiene previsto votar también anticipadamente y en persona hoy viernes en su estado natal de Indiana. Más de 35 millones de electores han emitido ya su voto adelantado, lo que supone un récord de participación.