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Kristina Puzyreva, una joven influencer ruso-canadiense que comparte fotos de viajes, moda y su rutina en Instagram, fue acusada por la justicia canadiense de participar en un plan en el que envió millones de dólares en productos electrónicos desde Estados Unidos a Rusia para su uso en misiles y drones.

“Kristina Puzyreva y sus coacusados supuestamente compraron y enviaron millones de dólares en productos electrónicos de origen estadounidense para apoyar al Kremlin en sus continuos ataques contra Ucrania. Su conspiración de lavado de dinero estaba directamente relacionada con 298 envíos de tecnología restringida al campo de batalla ruso, valorados en US$ 7 millones”, dijo Erin Keegan, agente especial a cargo de la investigación, en un comunicado de prensa del Departamento de Justicia.

Puzyreva, que vive en Montreal, se enfrenta ahora a 20 años de prisión. Fue acusada junto con su marido Nikolay Goltsev, de 37 años, y Salimdzhon Nasriddinov, de 52. Tanto ella como su marido figuraban en una "lista de asesinatos" ucraniana.

Foto: Kristina Puzyreva/Instagram

Puzyreva supuestamente lavó dinero como parte de un sofisticado plan de evasión de sanciones que involucraba a otras dos empresas. Compraron y enviaron ilegalmente productos electrónicos por valor de millones de dólares, y los componentes y circuitos integrados se descubrieron más tarde en plataformas de armas rusas y equipos de inteligencia de señales en Ucrania, incluidos drones y misiles guiados.

Según los fiscales del caso, Nasriddinov, un ciudadano ruso-tayiko, fue arrestado en Brooklyn con miles de semiconductores y otros aparatos electrónicos en su casa. Goltsev y Puzyreva fueron arrestados en un hotel de Manhattan durante un viaje para visitar a Nasriddinov. Se les incautó alrededor de US$ 20.000.