Las grandes empresas de Estados Unidos guardan silencio sobre el aborto

Manifestantes por el derecho al aborto marchan por el centro de Chicago, Estados Unidos. Foto: AFP.

INTERNACIONALES

Hasta el momento, solo un puñado de corporaciones se han posicionado a favor y algunas han anunciado medidas para apoyar a las trabajadoras.

La mayoría de las grandes empresas estadounidenses han optado por guardar silencio sobre el aborto, después de que el pasado lunes se filtrara un borrador del Tribunal Supremo que, de salir adelante, supondría la ilegalización del aborto a nivel federal y dejaría su regulación a los estados, muchos de los cuales están legislando para prohibirlo.

Hasta el momento, solo un puñado de corporaciones se han posicionado a favor y algunas, como Amazon o Citigroup, han anunciado medidas para apoyar a las trabajadoras que quieran abortar en estados en los que se han aprobado leyes restrictivas con el derecho al aborto.

Un total de 23 estados de tendencia conservadora han legislado contra el aborto, obligando a las mujeres que quieran interrumpir su embarazo a viajar a otros, lo que pone en aprieto a las personas más pobres que no pueden permitirse los gastos del desplazamiento y la intervención médica.

Una larga lista de grandes corporaciones como Wallmart -la mayor cadena de supermercados del país-, las principales entidades financieras, las aerolíneas, empresas de entretenimiento como Walt Disney o gigantes tecnológicos como Microsoft han evitado tomar partido o dar su opinión.

Tradicionalmente, las empresas estadounidenses evitan pronunciarse políticamente para no suscitar el eventual rechazo de parte de sus clientes o posibles represalias políticas.

Una tendencia que, sin embargo, cambió significativamente durante las protestas antirracistas que estallaron en el país en mayo de 2020, tras la muerte del ciudadano negro George Floyd a manos de un policía blanco y que empujó al mundo empresarial a expresar su rechazo al racismo.

Activistas por el derecho al aborto sostienen carteles durante una manifestación. Foto: AFP.
Activistas por el derecho al aborto sostienen carteles durante una manifestación. Foto: AFP.

Recientemente, Walt Disney se vio inmerso en una polémica en Florida por la ley conocida como “Don’t say gay” (No digas gay), que prohíbe tratar cuestiones sobre orientación sexual y género en centros escolares hasta tercer grado. Antes de la aprobación de esa ley, los creadores de Mickey Mouse o el pato Donald no se pronunciaron, pero la criticaron una vez que fue aprobada, lo que llevó al Congreso de ese estado conservador a tomar represalias y aprobar una ley para reducir la autonomía que la icónica marca de entretenimiento gozaba en Florida.

Opinión pública.

Según una encuesta del centro Pew Researchs, un 61% de los estadounidenses considera que el aborto tiene que ser legal en todas o en la mayoría de las circunstancias, mientras que un 37 % es de la opinión contraria, que debería ser ilegal en todos o casi todos los casos.

Una división que parece estar detrás de las reservas de los comités directivos empresariales de tomar una postura a favor o en contra de lo que pueda decidir el Tribunal Supremo.

Manifestantes por el derecho al aborto marchan por el centro de Chicago, Estados Unidos. Foto: AFP.
Manifestantes por el derecho al aborto marchan por el centro de Chicago, Estados Unidos. Foto: AFP.

El pronunciamiento definitivo de la Corte Suprema no se espera hasta el próximo junio.

Aunque dada la clara mayoría de jueces conservadores en este órgano (seis), frente a los progresistas (tres), políticos y activistas favorables a la interrupción del embarazo temen que su decisión favorezca al que se denomina “campo pro vida”. Desde concentraciones en las principales ciudades del país, hasta denuncias de políticos demócratas con el presidente Joe Biden a la cabeza, la repulsa a una eventual prohibición de esta área ha sido clara.

Empresas hasta ahora.

En 2021, coincidiendo con una ley en Texas que prohíbe el aborto después de las seis semanas de gestación, más de 50 empresas estadounidenses, entre ellas el servicio de reseñas por Internet Yelp, el fabricante de ropa Patagonia o la aplicación de transporte Lyft, firmaron una declaración oponiéndose a la nueva legislación.

Lyft, Uber o Levi Strauss, entre otras, han ido más allá y han introducido medidas de apoyo a las trabajadoras que necesiten un aborto como parte de su plan de ampliación de cobertura médica.

En reacción a la decisión de los legisladores texanos de diciembre, la empresa de servicios de computación Salesforce ofreció reubicar a sus empleadas de Texas en sedes en otros estados. Por su parte, Amazon fue la última empresa en sumarse a estas medidas hasta ahora y anunció que cubrirá los costos de viaje de sus trabajadoras en Estados Unidos.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar