DUNE LAWRENCE, BLOOMBERG
Los consumidores chinos, que enfrentan la mayor inflación en 11 años, padecen por el costo de vida incluso después de la muerte, ya que conseguir un lugar en un cementerio cuesta más que una casa.
Cinco de los principales cementerios de la capital cobran hasta 30.000 yuanes (U$S 4.273) por metro cuadrado por una sepultura estándar, en comparación con un promedio de 20.000 yuanes por metro cuadrado por un apartamento en el centro de la ciudad, informó el diario China Daily.
La escasez de terrenos, la especulación inmobiliaria y la rápida urbanización están haciendo subir los precios de los espacios para sepulturas conforme la población, que cada vez cuenta con más recursos, busca dar a sus muertos una morada más lujosa para el más allá.
El Gobierno emitió en noviembre reglas destinadas a alentar la cremación y evitar el lucro excesivo con los precios de las sepulturas.
En las reglas aprobadas en noviembre se pide a las áreas con una elevada densidad demográfica y escasez de terreno que cremen a los muertos en lugar de sepultarlos. También se prohibe que los residentes urbanos compren espacios en cementerios rurales, así como la construcción de cementerios en tierra cultivable, bosques y parques, además de imponer multas de hasta tres veces las ganancias obtenidas por infringir las reglas.
ATAÚDES. Los costos de los funerales también están subiendo, informó el China Daily. Un ataúd de mármol cuesta unos 3.000 yuanes en la funeraria Baboshan en Pekín, casi lo mismo que el salario mensual promedio en la capital en 2006. Un funeral sencillo en la ciudad de Shenzhen, al sur de China, cuesta al menos 4.000 yuanes, según el mismo medio.
La inflación en China se ha acelerado al ritmo más veloz en 11 años, porque los precios del cerdo casi se duplicaron en el último año y la soja subió 64 por ciento.
Los precios generales de la vivienda en 70 de las ciudades principales subieron 11,3 por ciento en enero frente al año anterior, el mayor incremento desde al menos 2005, cuando comenzaron los registros, según la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma. Los precios subieron 10,9 por ciento en febrero.
Unos 13 millones de personas emigran cada año de las zonas rurales a las ciudades chinas, dijo el mes pasado Qi Ji, viceministro del nuevo Ministerio de Vivienda de China. La perspectiva preocupa.