Fernando Lugo sigue internado en Brasil

SAN PABLO | El presidente de Paraguay Fernando Lugo, internado de urgencia el sábado en San Pablo por una trombosis, evoluciona "positivamente", señaló su médico personal Alfredo Boccia.

"Estamos satisfechos y aliviados. La situación del Presidente es un problema que puede ocurrir en tratamientos oncológicos con catéteres, y que se está resolviendo positivamente, y sobre todo no es ningún cuadro infeccioso, como temíamos desde el comienzo", informó Boccia, citado en el sitio web oficial de la Presidencia paraguaya.

En el mismo hospital donde fue internado, Lugo recibe desde hace un mes y medio un tratamiento de quimioterapia contra el cáncer linfático que padece. No hacía una semana que había dejado Brasil para regresar a Asunción, después de la tercera sesión a la que se ha sometido hasta ahora.

"Después de la realización de exámenes, fue diagnosticada la presencia de trombosis en la vena cava superior. No será necesaria intervención quirúrgica", indicó el hospital en un comunicado. El mandatario se encuentra en una sala de terapia intensiva.

Lugo sufrió el jueves una molestia en los dientes y una odontóloga le aplicó anestesia para su tratamiento, pero el Presidente tiene las defensas bajas por la quimioterapia que viene recibiendo, por lo que la situación se complicó y derivó en la trombosis.

"El estudio reveló una gran disminución del tamaño del trombo", informó Boccia, que calificó la situación del mandatario como "mucho más tranquila", aunque reveló que todavía hay restos del trombo e informó que Lugo tiene colocado un catéter desde la parte alta del pecho hasta la parte baja.

El mandatario "está totalmente lúcido, sin ninguna molestia, incluso sin ese rubor facial que había tenido en Asunción los días previos", explicó el médico, que comentó que el Presidente estaba siguiendo las elecciones brasileñas a través de la televisión.

Según Boccia, si la evolución del tratamiento de la trombosis continúa favorable, Lugo podría regresar el martes o el miércoles a Paraguay. AFP Y ANSA