Un operativo llevado adelante entre los Ministerios Públicos y las secretarías de Seguridad Pública de Río de Janeiro y Ceará reveló el nivel de crueldad de una facción criminal cearense que se instaló en Rocinha, en la Zona Sur de Río, con apoyo logístico del Comando Vermelho (CV).
Según el Procurador General de la República de Río, Antonio José Campos Moreira, el grupo, afiliado al CV, es responsable de más de mil homicidios en Ceará en los últimos dos años, muchos de ellos cometidos con extrema crueldad.
"Usaban motosierras para desmembrar a sus enemigos e incluso jugaban al fútbol con sus cabezas. Filmaron todo", declaró Campos Moreira durante una entrevista en la Jefatura de la Policía Militar, desde donde se siguió la acción en tiempo real.
Operaban la banda desde una mansión
El objetivo principal de la ofensiva era el liderazgo de la facción, que operaba remotamente desde el interior de una mansión en la zona de Dioneia, en lo alto de Rocinha. La propiedad de lujo, equipada con dos piscinas climatizadas, cascada y zona gourmet. Junto a la casa, los investigadores encontraron una especie de alojamiento para miembros de la facción que llegaron desde el noreste.
"Son objetivos de Ceará. No hay ninguno de Río de Janeiro. Todos ellos están afiliados a la facción Comando Vermelho. Obviamente fue la facción de Río la que los apoyó. Río se ha convertido desde hace algún tiempo en la sede central del crimen. Para aquí vienen varios delincuentes de otros estados y eso se ha intensificado a partir de la pandemia y de la ADPF 635", afirmó Víctor Cesar Carvalho dos Santos, secretario de Seguridad de Río de Janeiro, a RJTV2, de TV Globo.
Operativo en Rocinha
La Secretaría de Estado de Policía Militar empleó 400 efectivos policiales del Batallón de Operaciones Especiales (BOPE) y otras unidades para garantizar la acción, monitoreada por drones y helicópteros que enviaron imágenes al Cuartel General de la PM, en el Centro. Desde allí, además de los fiscales y jefes de los departamentos de seguridad de los dos estados, el gobernador Cláudio Castro acompañó el trabajo policial, hasta el momento en que los delincuentes huyeron hacia el bosque, donde hubo un intercambio de disparos.
La investigación es resultado del trabajo conjunto de los Grupos de Acción Especializada para el Combate al Crimen Organizado (Gaeco) de ambos estados. La acción fue iniciada en la madrugada de este sábado por la Coordinación de Seguridad e Inteligencia del Ministerio Público de Río (CSI/MPRJ), que movilizó cerca de 80 agentes de tropas especializadas, con el objetivo de ejecutar 29 órdenes de prisión y 14 de búsqueda y captura.
"Los criminales en Ceará son muy sanguinarios. Los asesinatos se cometen con extrema crueldad. Esta práctica se está extendiendo a otros estados del noreste. Las imágenes, porque se esfuerzan por mostrarlas en redes sociales, son muy impactantes", dijo el Procurador General.
Después de la llegada de la policía a la comunidad, alrededor de 400 delincuentes huyeron hacia el bosque de Rocinha, según información obtenida por GLOBO. BOPE dijo que estaba monitoreando la región. Al comienzo del operativo, un policía militar recibió un disparo en el cuello. Fue trasladado al Hospital Miguel Couto y se encuentra fuera de peligro.
Durante el operativo fueron incautados cuatro fusiles, dos pistolas, un revólver, un rifle airsoft, municiones y droga, aún en proceso de conteo, según un boletín oficial difundido a primera hora de la tarde. Un hombre con orden de captura pendiente fue detenido.
O Globo/GDA