Campaña sangrienta

Canditado de ultraderecha sufre graves heridas, y lo salvan en una operación de dos horas.

Brasil quedó estremecido ayer cuando el candidato de ultraderecha y líder en las encuestas de intención de voto para las elecciones presidenciales del 7 de octubre, Jair Bolsonaro, de 63 años, fue blanco de un ataque en un mitin de la campaña electoral, que le provocó graves heridas y determinó una intervención de urgencia porque su vida estaba en peligro.

El político fue ingresado en el hospital Santa Casa de Misericordia de Juiz de Fora, en Minas Gerais (sudeste del país) y ahora se encuentra estable, informaron anoche los médicos que lo atendieron.

Las imágenes divulgadas en las redes sociales muestran el momento en que Bolsonaro, que era llevado en andas por sus seguidores y vestía una camiseta con los colores de la selección de Brasil, se retuerce de dolor al ser acuchillado, aunque el autor del ataque no aparece debido a la cantidad de personas que rodea al candidato. Poco después fue retirado del lugar por los propios militantes.

El presunto autor del ataque fue detenido con rapidez, informó a AFP la teniente Sandra Jabour, de la Policía Militar (PM) de Minas.

A su vez, el presidente de la Federación de Agentes de la Policía Federal (PF), Luis Boundens, los agentes de inteligencisa investigan las motivaciones del agresor y si tiene problemas psicológicos. El sospechoso, identificado como Adélio Bispo de Oliveira, al ser detenido, dijo que estaba "cumpliendo una misión divina, una misión de Dios", señaló Boudens.

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El equipo médico que atendió a Bolsonaro afirmó que al ingresar al Hospital Santa Casa de Misoricordia, el político tenía señales de estado de shock y presentaba una hemorragia abundante, debido a que una vena abdominal había sido perforada. Asimismo, tenía perforaciones en el intestino delgado y el intestino grueso, lo que requirió una cirugía de dos horas, de acuerdo con lo que explicó el Dr. Luis Henrique Borsato que realizó la intervención quirúrgica. Las lesiones fueron identificadas y tratadas durante la operación, en la que se le practicó al paciente un colostomía temporaria, que incluye la colocación de una bolsa. En función de esa lesión, el Dr. Borsato dijo que había una contaminación en la cavidad abdominal que es tratada con antibióticos.

"Las heridas que implicaban riesgo para su vida fueron tratadas en la cirugía", ratificó. "El cuadro era grave, porque las heridas eran profundas, pero ahora se encuentra estable".

El Dr. Gláucio Souza, que participó de la operación, manifestó que el cuadro que presentaba Bolsonaro "cuando llegó al hospital era muy grave, con presión muy baja como consecuencia de la pérdida de sangre, pero conseguimos frenar la hemorragia a tiempo".

A su vez, el Dr. Borsato indicó que la recuperación en las primeras horas ha sido satisfactoria, pero evitó pronosticar sobre la participación de Bolsonaro en la campaña electoral. "Es muy subjetivo decir ahora si podrá o no realizar la campaña electoral", manifestó.

Bolsonaro ahora se encuentra en el CTI, que es lo habitual en estos casos debido a la gravedad de las lesiones que sufrió, y deberá permanecer internado por un periodo de entre ocho y diez días.

Un equipo del Hospital Sirio Libanés, de San Pablo, llegó anoche a Juiz de Fora para realizar el traslado del paciente a dicho centro de asistencia. Pero, por el momento, no se sabe cuándo podrá hacerse el traslado, debido a que depende de la evolución que tenga.

El atentado fue repudiado por el presidente Michel Temer y los demás candidatos. "Es intolerable que en un Estado democrático de derecho no haya la posibilidad de una campaña tranquila", dijo Temer.

"Repudio totalmente cualquier acto de violencia y deseo un pronto restablecimiento a Jair Bolsonaro", escribió en Twitter Fernando Haddad, compañero de fórmula del encarcelado expresidente de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva.

El centroizquierdista Ciro Gomes anunció que canceló todas sus actividades del día debido al atentado y le deseó a Bolsonaro "que se recupere, para superar este momento y volver rápidamente al debate nacional".

El centroderechista Geraldo Alckmin exhortó a deponer las actitudes de "odio" y urgió a una "investigación rápida y un castigo ejemplar".

La expresidenta Dilma Rousseff, candidata a un escaño en el Senado para las elecciones de octubre, condenó el atentado, pero alertó que "incentivar el odio crea ese tipo de actitudes".

"Creo que es lamentable", pues "en un país democrático que se respeta no se puede permitir que se acuchille a un candidato ni a nadie", dijo Rousseff.

El ataque puede redefinir la campaña, dijo Thiago Vidal, analista de la consultora Prospectiva. "Si la narrativa favorece a Bolsonaro, la polarización con la izquierda puede darle mayores condiciones de llegar a la segunda vuelta. Pero hay que considerar la posibilidad de que el episodio radicalice aún más la disputa, lo que asustaría a los electores indecisos y los llevaría a buscar candidatos moderados".

Adélio Bispo de Oliveira, de 40 años, es el autor confeso del atentado contra el candidato presidencial ultraderechista, Jair Bolsonaro, a quien apuñaló en el abdomen durante un mitin de la campaña electoral en el municipio de Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais (sudeste), confirmaron fuentes oficiales.

Natural de Montes Claros, situada a unos 700 kilómetros de donde se produjo el ataque, Bispo de Oliveira se encuentra detenido en la sede de la Policía Federal de Juiz de Fora, mientras las autoridades intentan esclarecer el motivo del intento de homicidio.

Según confirmaron a Efe fuentes de la Policía Militarizada, De Oliveira tenía educación superior y parecía "mentalmente pleno y totalmente consciente de aquel acto, que parece que fue premeditado".

"Manifestó inicialmente que no simpatizaba con Bolsonaro, pero con el transcurso de las investigaciones, probablemente, debe pasar más informaciones", señalaron las citadas fuentes.

No obstante, el presidente de la Federación Nacional de los Policías Federales de Brasil, Luis Boudens, informó a Efe que en el momento de su arresto De Oliveira "presentó un aspecto de un problema psicológico, e incluso llegó a decir, según testimonios que presenciaron los hechos, que la tarea era una misión divina, una misión de Dios".

De Oliveira tiene antecedentes penales, debido a que en 2013 se le abrió un expediente por "lesiones corporales" contra otras personas.

Un perfil de Facebook en nombre del autor confeso y cuyas fotos se identifican con la divulgada por la autoridades contiene varias publicaciones contra Bolsonaro, críticas a la Masonería y relatos de supuestas conspiraciones.

El pasado 2 de agosto, compartió un vídeo del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y escribió: "Eso es ser comunista, eso es comunismo, pero para la derecha masónica es un crimen pasivo de fusilamiento".

También indicó haber frecuentado recientemente una escuela de tiro en Florianópolis, ciudad situada en el sureño estado de Santa Catarina.

De acuerdo con lo que informaron medios locales, De Oliveira estuvo afiliado en el izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL) entre 2007 y 2014.

Fuentes de la Policía Militarizada señalaron que de Oliveira llevaba el arma blanca con la que acuchilló al aspirante presidencial "envuelta en una camisa" y se "fue aproximando hasta que tuvo la oportunidad y le alcanzó".

La Policía Federal intenta ahora trazar un perfil psicológico del agresor.

"Se está buscando la motivación, si hay un problema psicológico o si hay una motivación ideológica, todo eso ya está siendo investigado", añadió Boudens.