COLOMBIA

El narco colombiano vivió en el edificio ubicado en el barrio de El Poblado en Medellín. El gobierno decidió derribarlo y construirá un memorial.

Una explosión controlada derribó el edificio Mónaco,antiguo búnker del fallecido narco Pablo Escobar en Medellín y uno de los símbolos del narcoterrorismo que desangró a Colombia por casi una década.

En un evento abierto a 1.600 personas, incluidas víctimas de Escobar, los ocho pisos del Mónaco se vinieron abajo a las 11:53 locales. 

Sobre sus ruinas, se levantará un monumento que recuerde a los caídos por la acción del narco, abatido por la policía en 1993, según la alcaldía de Medellín.

Tres segundos bastaron para destrozar la antigua morada del exjefe del cartel de Medellín. Una nube de polvo se levantó por varios minutos en el cielo, al tiempo que dos camiones de bomberos lanzaban agua para contener su expansión.

Aunque un sector de la sociedad se oponía al derribo, las autoridades lanzaron una campaña para explicar que no se trataba de "borrar la historia", sino de "transformarla". 

La demolición del edificio Mónaco "significa la derrota de la cultura de la ilegalidad (...) Significa que la historia no se va a escribir en función de los victimarios", declaró el presidente colombiano, Iván Duque.

El mandatario realizó una fugaz visita al lugar antes de viajar a Cúcuta, en la frontera con Venezuela, donde se realiza un concierto previo al esperado ingreso de ayuda a ese país por parte de la oposición, pese al bloqueo del gobierno chavista. 

En el lugar donde estaba el fortín del poderoso narco se abrirá a finales de 2019 el Parque Inflexión. Será un espacio de 5.000 metros cuadrados en honor a las víctimas del "narcoterrorismo", como se conoce a la guerra sin tregua de los cárteles contra el Estado en los años 80 y 90. 

Pablo Escobar llegó a ser uno de los hombres más ricos del mundo, según Forbes, tras fundar un imperio del crimen y el narcoterrorismo. Murió a manos de la policía durante un intento de fuga en 1993.

Pese a su caída y la de otros barones de la droga, Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína y Estado

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La última sirena sonó y anunció la implosión del Edificio Mónaco. Tal como lo esperaban, la construcción se derrumbó en tres segundos y dejó una gran nube de polvo ante la mirada de cientos de personas.

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Algunas víctimas de la violencia producto del narcotráfico fueron homenajeadas por el gobierno colombiano con la Medalla de la Valentía.

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En el acto previo a la implosión la alcaldía de Medellín realizó un homenaje a las víctimas del narcoterrorismo. Enrique Parejo, exministro de Justicia de Colombia, recordó un atentado al que sobrevivió.

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El presidente colombiano participará de toda la jornada y llegó al lugar cerca de las 09:30. Minutos después dio un discurso en el que recalcó que ese evento "significa la derrota de la cultura de la ilegalidad y el triunfo de la cultura de la legalidad".

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Mientras los preparativos de la implosión son realizados en los alrededores del edificio Mónaco, en el Club Campestre de Medellín, ubicado a pocas cuadras, se realiza un acto en recuerdo de las víctimas del narcoterrorismo. 

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Varios edificios en zonas aledañas al edificio Mónaco fueron desalojados para seguridad de sus habitantes. Cerca de 1500 personas junto a 150 mascotas fueron sacadas de 640 unidades. El alcance de la evacuación fue  hasta 100 metros a la redonda del edificio.

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La implosión se realizó entre las 10:00 y 12:00 de Colombia, 12:00 y 14:00 de Uruguay. Para ella no se utilizó dinamita sino que se hizo con indugel, un explosivo más seguro.

La implosión duró 3 segundos y generó una nube de polvo que desapareció por completo en aproximadamente 8 minutos. Los dos últimos pisos del edificio no tuvieron explosivos, ya que se demolieron con la fuerza de la caída.