TREINTA Y TRES | MARCO RIVERO
Los nueve kilómetros que el héroe del arroyo de Oro caminó en 1929 herido de muerte con su hermana en brazos son ahora una senda que recrea su hazaña desde el viejo rancherío de los Díaz hasta la comisaría.
Los treintaitresinos se repartieron este fin de semana entre festivales de tango, cumbia y tradición.
Una variada propuesta musical y cultural comenzó el viernes en la localidad de El Oro -poblado Mendizábal-. La quinta edición del Festival de la Tradición tendrá como punto alto la inauguración este mediodía de la senda de paso hasta las taperas de la familia Díaz.
Se trata del trayecto recorrido el 8 de mayo de 1929 por Dionisio Díaz, de 9 años, herido de muerte por su abuelo y llevando en brazos a su pequeña hermana Marina.
El movimiento Dionisio Díaz viene realizando esta actividad de rescate de la memoria desde hace varios meses y organizó junto al grupo "El Mangrullo" el festival de la tradición en la localidad.
La festividad comenzó el viernes con actividades hípicas y actuaciones de folcloristas de diferentes puntos del país. A las 9 de la mañana de hoy partirá la comitiva hacia las Taperas de Dionisio para dar comienzo a la inauguración de la Senda de Dionisio, indicó el profesor Omar Mesa Prado, uno de los organizadores del festival.
Está previsto que el recorrido de la senda concluya sobre el mediodía en la vieja comisaría del poblado, adonde llegó el niño héroe.
HERIDO DE MUERTE. "Mayo 10 de 1929: Sr. Jefe de Policía. Llevo a conocimiento de Ud. que a la hora 10 del día de hoy se presentó a esta comisaría el menor de 9 años Dionisio Díaz herido de una puñalada en el vientre, manifestando que el autor era su abuelo, Juan Díaz, quien a su vez había dado muerte a sus hijos, Eduardo y María, esta última, madre del nombrado menor. Solicito presencia inmediata del médico de Policía, debido a la gravedad del menor. Salgo para el lugar del hecho. No tengo más datos". Con esas palabras se expresó el oficial de Policía que trasmitió la novedad de la llegada de Dionisio a la comisaría de la Seccional 2ª.
El niño -herido de muerte- atravesó 7 kilómetros de campos, arroyos y alambrados llevando en sus brazos a su hermana Marina. El año pasado, en una entrevista con "El País" Marina dijo que está "muy orgullosa de haber tenido un hermano como él". Respecto a su abuelo, afirmó: "Lo perdono por lo que hizo. Creo que fue un mal momento".