Llegó la lluvia, pero ¿fue suficiente para aliviar el déficit hídrico?

Las lluvias, tan esperadas por el sector agrícola ganadero, comenzaron a caer en la tarde de este viernes en algunas zonas del país, pero ¿son suficientes para paliar el déficit hídrico que se vive en los 19 departamentos? El País habló con los meteorólogos y docentes Mario Bidegain y José Serra, quienes dieron su visión sobre el tema.

Los acumulados de lluvia que se pueden medir hasta el momento son los que refleja el boletín pluviométrico del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), que reporta lo sucedido hasta las 7.00 de la mañana cada día. Por esto, lo que ocurrió este sábado luego de esa hora no tiene registro.

Ese informe muestra que el mayor acumulado de precipitación se dio en Fray Bentos, Río Negro, con 52mm. Le siguió Salto, con 51,2mm y la localidad sanducera de Chapicuy, con 46mm. Otras localidades de Salto recibieron entre 40 y 45 milímetros de precipitación; Achar, en Tacuarembó, tuvo 35 y en Los Arrayanes (Río Negro) y El Cerro (Colonia) cayeron 33 mm.

La conclusión de los expertos es que, si bien las lluvias hasta el momento no son suficientes para solucionar los daños que ha generado la situación de déficit hídrico —que ya lleva tres años—, sí dan un respiro. Todo el país está afectado, pero el centro del territorio: Durazno, Florida, Flores y Soriano son los más castigados, explicó Bidegain.

"La lluvia esperada, climáticamente, es de entre 100 y 120 milímetros por mes, dependiendo de la región del país", indicó, y ante la pregunta de si esa cantidad sería suficiente ahora para recuperar los suelos y las pasturas, respondió que "sería de gran ayuda, pero el efecto de la sequía no solo se soluciona con lluvia". Es necesario que los suelos se irriguen, y las pasturas y plantaciones tienen su ciclo y pueden demorar hasta 15 días en recuperar su máximo potencial, aclaró.

El meteorólogo señaló que serían necesarios más de 100 milímetros para que fuera una solución de fondo, y explicó qué otros puntos hay que tomar en cuenta: el tipo de suelo y el período de tiempo en el que se produzca esa precipitación.

Ricardo Figueredo

Atendiendo al tipo de suelo, Bidegain afirmó que algunos tienen "poca capacidad para retener agua" y, con poco, pueden recuperarse más. "Pero en el sur del país, con suelos más profundos, se precisan más de 100 mm para poder completar lo necesario", sostuvo.

Por otra parte, resaltó la importancia de que las precipitaciones sean bien distribuidas, no solo en el espacio, sino en el tiempo. "120 mm en una hora tampoco sirve, porque produce inundaciones, el suelo y la vegetación no capturan esa lluvia y gran parte escurre o corre superficialmente hacia cañadas y arroyos y no entra en el ciclo de crecimiento", afirmó.

Serra, en tanto, valoró como "bastante positivo" lo que llovió hasta la mañana de este sábado, a pesar de que en "algunas regiones ha sido muy escaso".

Los dos meteorólogos pronosticaron nuevas precipitaciones para el final de la semana próxima y, según dijeron, se espera que ocurran en la zona este del país, donde el episodio de lluvias de este viernes y sábado no tuvo mayores efectos. "Por el 27 o 28 de enero se espera otro evento de lluvia, que se prevé importante, y no finalizará la sequía, pero sería una ayuda, un paliativo", apuntó Bidegain.

Serrá remarcó que hoy persiste la inestabilidad en el norte y noreste del país, por lo que algunas lluvias podrían llegar a esa zona, que está necesitada y no ha recibido precipitación. Y al igual que su colega, sostuvo que el pronóstico para los últimos días de la próxima semana es alentador. "Sobre fin de la semana que viene se prevén precipitaciones más significativas aún, otro frente frío, pero más activo, que puede dar lugar a tormentas y lluvias", sostuvo.

"Vendría bien, porque sería un gran alivio para el agro. Principalmente (ese episodio de lluvias) se dará para suroeste y alcanzará a sureste y noreste, donde casi no llovió. A mí entender, va a tener mayor volumen en los departamentos en los que no se dio ahora", puntualizó Serra.