Publicidad

¿Cuáles fueron las críticas que hicieron los afectados por el incendio histórico a los forestales?

Compartir esta noticia
Incendio. Foto: Intendencia de Paysandú.

PREOCUPACIÓN POR LAS PERDIDAS QUE SE DIERON

Tras esto muchos productores rurales se preguntan: cómo hacer ahora para alimentar e hidratar a los animales, y al mismo tiempo pagar la renta a las empresas propietarias de varios terrenos.

Lo que hay es tierra quemada, desazón, incertidumbre, ansiedad. Miedo ya no, porque el mayor incendioforestal de la historia está controlado y en vías de extinción, pero todo lo anterior sí porque los productores están recién comenzando la evaluación de los daños producidos en 37.000 hectáreas en los alrededores de las cuatro localidades entre Paysandú y Río Negro que sufrieron la cercanía del fuego.

La mayoría de las hectáreas incineradas son predios forestados, pero hay muchas tierras dentro del área que son arrendadas tanto a ganaderos como a apicultores, cuyo impacto es variado y cubre una gama que va de daños graves -destrucción del 90% del área- a solo un susto grande.

Pero en cualquier caso hay un problema que, sobre todo entre los ganaderos, se repite: cómo hacer ahora para alimentar e hidratar a los animales, y al mismo tiempo pagar la renta a las empresas forestales, propietarias de varios de los terrenos.

“Tengo esperanza de que ellos me ayuden congelando el contrato o corriendo la cuota, para poder pagar el fardo del ganado, porque las dos cosas a la vez no puedo hacer”, dijo Juan Antonio Rodríguez, un productor que le arrienda 1.750 hectáreas a la finlandesa UPM, por la zona de Pandule, Paysandú, a El País. Y explicó que al problema de la comida para el ganado se suma también el alambrado destruido, cuya reparación cuesta “la venta de muchos animales”.

Lo que según Rodríguez contestó UPM es que “la demanda es tan grande” que no será posible “cubrir todas los necesidades”, e incluso pidieron “colaboración a los pastoreadores” para que aporten mano de obra en las tareas de reparación. Por su parte, el gerente de comunicaciones de UPM, Matías Martínez, destacó que la empresa puso a disposición “desde el primer día todos los recursos propios, más de 170 personas”, y de “empresas proveedoras de servicios, además de los del Consorcio forestal de la Sociedad de Productores Forestales”.

En otros casos, la situación es caótica, porque se ha tenido que ir en busca del ganado desperdigado por doquier. “Tenemos que pensar qué hacer con los animales que están sin comer hace tres días”, dijo en ese sentido Ana Laura Araújo, directiva de la Federación Rural.

Reunión con tensión.

El salón de Mevir de Piedras Coloradas, uno de los poblados que estuvo cercado por el fuego y que pasó momentos de alta preocupación esta semana, fue escenario de una reunión entre autoridades del gobierno -los ministros Adrián Peña (Ambiente) y Fernando Mattos (Ganadería), entre otros-, vecinos, productores y representantes de las multinacionales dedicadas a la forestación, que por momentos se volvió “tensa”. O, al decir del intendente sanducero Nicolás Olivera, para quien se escucharon reclamos atendibles, “picante”.

Las críticas, tanto de vecinos como de productores, se dirigieron sobre todo a las firmas de la industria celulósica porque, a su entender, no hay en las zonas forestadas una infraestructura adecuada como para prevenir un incendio así o combatirlo con más eficiencia. “Los montes están muy encima de los pueblos”, dijo Olivera, en relación al límite normativo de 500 metros entre las plantaciones y el lugar poblado más próximo. “Pero también (cuestionaron) que no haya cortafuegos, que los campos no estuvieran limpios o que no hubiera lugares con agua para abastecer los helicópteros”. “A partir de ahora -siguió-, es evidente que algunas cosas va a haber que cambiar, porque esto no puede volver a pasar”.

Para Nelson Ledesma, presidente de la Asociación de Productores Forestales, debe destacarse que los predios cumplían “con todas las reglamentaciones y autorizaciones” ministeriales, y que la magnitud del incendio se debió al viento, factor que generó que las llamas “cruzaran las rutas”.

Como sea, Olivera valoró que los forestales “dieran la cara”. “Les dijimos que sigan ganando mucha plata, pero que ahora tal vez tengan que ganar un poco menos”, concluyó el intendente.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Río NegroPaysandúincendio

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad