juan andres ferreira
Dos coloridas carrozas aguardan en el galpón municipal la llegada del Carnaval. Una de ellas presenta largas lenguas de fuego envolviendo sus costados; la otra, con un diseño que recuerda a un tablero de ajedrez, luce un gigantesco antifaz y una corona de proporciones semejantes elevándose desde el centro. Ambas carrozas, hechas de cartulina y cartón, no miden más de cuarenta centímetros.
Basándose en estas maquetas, un equipo de siete egresados de la Escuela Nacional de Bellas Artes —entre ellos, dos docentes—, construye las carrozas que darán color a la noche del 20 de enero en 18 de Julio.
Junto a ellas, se volcarán unas 70 agrupaciones, entre murgas, comparsas y parodistas. Estarán Falta y Resto, Contrafarsa y La Bohemia, Los Jacquet’s, Momo Sapiens, Nazarenos, Antifaces, entre los parodistas, las comparsas Yambo Kenia, Sarabanda y Serenata Africana, entre muchos otros. Mientras tanto, gente en obra.
CARROS DE FUEGO. El grupo a cargo de las carrozas que conducirá a las reinas, comandado por Pablo da Silva, agrega tonos y líneas, día a día, desde la mañana hasta las primeras horas de la noche, en el galpón de la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) ubicado sobre avenida Gonzalo Ramírez, pegado al Cementerio Norte. En esta sucursal del templo de Momo, la festividad se prepara en madera y lienzo, con papel de diarios y pintura. Los miembros del equipo, a la sombra o expuestos a los rayos del sol, dan forma a los dos carros alegóricos que recorrerán la noche de Carnaval.
Una de las carrozas, la de las lenguas de fuego, es la reservada para Reina de las Llamadas. La otra, de piso ajedrezado, la que será ocupada por las Reinas del Carnaval del desfile inaugural.
"Desde el principio trabajamos con la idea de diferenciar a cada carro", comenta Da Silva, que lleva nueve días en la tarea, la cual le insume entre diez y doce horas por jornada.
CONCEPTOS. El piso cuadriculado, en blanco y negro, es una representación de un espacio de salón, explica Da Silva. "El carro está compuesto de figuras y elementos vinculados a la arquitectura clásica", agrega. Detrás suyo, la carroza recibe retoques de pintura sobre el lienzo, mientras otro compañero recubre de papel y goma un tacho elegido para convertirse en tamboril. Una vez completado el trabajo, el tamboril se unirá a uno de los extremos de la media luna que reposa en el centro de la escenografía. El concepto, explica Da Silva, ilustra "la relación amorosa de la luna con el tambor".
En este espacio, escudos y lanzas, tambores que funcionan como escudos de una cultura (la africana en este caso), se integran al lienzo pintado con colores blanco y negro, en alusión a las cebras, al cuero de los animales.
Además de la figura de Momo, sintetizada en la corona y el antifaz, el universo del carnaval y de la cultura afro alcanza su culminación con la presencia del fuego, "elemento que se repite como armonizador del conjunto".
Los carros estarán listos, en lo posible, hoy mismo. Pero el trabajo no habrá terminado si no hasta su llegada a la Plaza Independencia, tras el saludo al séquito de Momo, entre los que se encontrarán, entre murgas, comparsas y parodistas, los infaltables, y en algunos casos temidos, cabezudos.
CABEZAS HUECAS. Michael Massa estaba junto a su abuela viendo el desfile de carnaval. Sentía por los cabezudos un terror tan intenso como difícil de explicar, como el que algunas personas sienten por las arañas o los monstruos que se esconden en los roperos. Cuando vio a un cabezudo acercarse al sector donde él se encontraba, cerró los ojos y simuló dormir. Tras unos segundos, al abrirlos, descubrió al cabezudo de pie, inclinado hacia él, a escasos centímetros de su nariz. Entonces soltó un alarido. Eso fue hace unos años. Cuando todavía no había cumplido los 10. Ahora tiene 34. Y se encarga de darle vida a los gestos de los cabezudos encerrados en el Galpón 1 de la IMM en el Prado.
Algo así como samplers de viejas versiones, los nuevos cabezudos son menos, y también en cierto modo son más: este año presentan una paleta de colores más alta y más amplia que en otras versiones de la fiesta de Momo. "Antes algunos parecían fantasmas en vez de Cabezudos", comenta Massa, quien junto a otros dos compañeros del Taller de actos y festejos de la IMM se encarga de revitalizar los rostros y los gestos de estos tradicionales disfraces, cabezas huecas de mimbre y papel que todavía dejan a algún niño asustado.
El hijo de la noche, fuera del Olimpo
Nada puede surgir de la nada. Tiene que haber un origen para las cosas.
En la mitología griega, ese principio está representado en Caos (o Khaos), divinidad primitiva, atmósfera esencial de la desprendieron los demás dioses que más tarde poblaron el Monte Olimpo.
Entre los varios descendientes de Caos se encuentra Nyx (o Nix), la Noche, de la que surgieron, entre muchas, figuras como Hipnos (el Sueño), Hemera (el Día), Apate (el Engaño) y Tánatos (la Muerte). Y como Nyx no era de perder el tiempo, también fue capaz de engendrar hijos e hijas por sí misma. De allí surgió Momo, el Sarcasmo.
Caracterizado como payaso, Momo encarna al bromista inteligente, un tanto ácido, al chistoso de la clase (ese al que la maestra termina echando o enviándolo a la oficina del director), al bufón crítico e ingenioso. Podría decirse, una especie de notero de "Caiga quién caiga" de la mitología griega. En estos rasgos se vislumbra también cierta locura. De ahí la representación de Momo de una forma grotesca, dueño de una sonrisa delirante y hasta posiblemente peligrosa.
El mito de este dios griego se trasladó a la Antigua Roma, donde se celebró su espíritu bromista, el mismo por el que según se dice, fue expulsado del Olimpo, puesto que por medio de sus chistes dejaba en evidencia las debilidades y los errores de los demás dioses. Para hacerse una idea, el hombre fue capaz de reírse de las sandalias de la mismísima Afrodita.
Fechas
18 de enero
Ese día se eligirán las Reinas del Carnaval y Llamadas en el Velódromo Municipal. Además habrá espectáculos musicales y visuales para animar la noche. Son 18 las aspirantes a las coronas, tanto del Carnaval como de las Llamadas.
20 de enero
Desfile inaugural del Carnaval 2005 por la avenida 18 de Julio, desde plaza Independencia hasta la calle Carlos Roxlo. Como es tradicional, la apertura del desfile se dará con la presencia del Marqués de las Cabriolas y las Reinas de Carnaval y Llamadas, con sus respectivos séquitos. Entre la multitud figurarán 10 cabezudos. De este modo se inicia el Carnaval más largo del mundo.
26 de enero
Comienza el concurso oficial de agrupaciones carnavalescas en el Teatro de Verano. Cada noche concursarán cuatro conjuntos, hasta completar los 48 inscriptos. La mitad pasarán a la siguiente ronda.
4 de febrero
Desfile de Llamadas. Desde las calles Carlos Gardel y Zelmar Michelini, siguiendo por Isla de Flores hasta la calle Gaboto. Habrá 44 comparsas, con más de 100 integrantes cada una.