RECLAMO

Más de 100 ómnibus y camionetas de turismo se movilizaron ayer hacia el Palacio Legislativo y la Presidencia de la República. Más tarde estuvieron en la sede de Audavi con representantes de las agencias de viajes y de los hostels de Montevideo. Mañana, a las 10:30, se reunirán con el ministro de Turismo, Germán Cardoso.

“Estamos totalmente de acuerdo con las medidas del gobierno de cerrar las fronteras, pero precisamos asistencia, solos no podemos salir, por eso estamos solicitando que el Poder Ejecutivo decrete la emergencia turística. Si se puede decretar la emergencia agraria cuando hay sequía, ahora se puede decretar la emergencia turística”, señaló Alvaro Gugliotta, presidente de la Unión de Transporte Turístico del Uruguay (UTTU).

Gugliotta dijo a El País que son 816 las empresas afectadas por el cierre de fronteras a causa de la pandemia y unas 1.500 familias impactadas directamente. “Hay ómnibus que no podemos sacar a la calle porque no tienen seguro, porque no lo podemos pagar hasta que esto se reactive. Tenemos 50 millones de dólares en unidades que están guardadas en garajes, es algo muy loco”, indicó.

“El turismo interno del que habla el Poder Ejecutivo no aplica en nuestro caso, porque es para las personas que salen con sus familias en sus autos. Nuestro turismo interno es con las personas de la tercera edad, a las que llevamos a las termas, al interior a un encuentro de coro. Y esa gente, al menos hasta el año que viene, no va a salir. Para nosotros el turismo interno no existe. Necesitamos que se decrete la emergencia turística ya”, insistió Gugliotta.

El presidente de la UTTU aclaró que las cámaras de Turismo y Transporte no los representan. Y consultado sobre qué beneficios representaría para el sector una declaración de emergencia, señaló: “La postergación de pagos en los bancos, el no pago de impuestos, el no pago a los entes estatales. Precisamos eso, porque están cerrando nuestras empresas”.