CAMBIO 

El presidente Luis Lacalle Pou informó en Twitter que Pablo Bartol no continuará al frente del Ministerio de Desarrollo Social. En su lugar asumirá el diputado Martín Lema el próximo lunes. 

En un comunicado difundido a esta hora en la página de Presidencia de la República se agradece la gestión del ministro saliente: 

“Asumiendo los desafíos que el país enfrenta a raíz de la pandemia, la gestión de este ministerio se encamina hacia un nuevo abordaje integral, derivado de las consecuencias sanitarias, laborales, sociales y educativas, que demandarán una impronta de fuerte articulación política y territorial”, dice el comunicado. 

“Con esta decisión el Gobierno Nacional pretende que este ministerio se constituya en una referencia de dicha articulación y por ello ha entendido necesario realizar un giro en su conducción, con el objetivo de abordar un nuevo objetivo político”, agrega. 

“Pablo Bartol ha sido una pieza clave en el proceso de transformación técnica del ministerio y gracias a ello, hoy se está en las mejores condiciones para conformar un nuevo proceso que atienda la demanda social del Uruguay pos pandemia. Este gobierno está decidido a realizar su mayor desafío político a través de un abordaje social, integrando políticas articuladas entre los organismos del Estado y los gobiernos departamentales, para lograr una solución efectiva y perdurable que resuelva los problemas de la población más vulnerable”, concluye el texto. 

Por su parte, el Lema también agradeció al presidente la designación en Twitter y dijo que la gestión de Bartol  ha sido “una inspiración”.

El “tridente” que el presidente Luis Lacalle Pou eligió para comandar el Mides no funcionó. La relación entre Pablo Bartol, el subsecretario Armando Castaingdebat, y Nicolas Martinelli, que ocupó la dirección general de secretaria no era buena.

El presidente Lacalle Pou movió las fichas a comienzos de año y decidió llevarse a Martinelli como su asesor personal directo para la Torre Ejecutiva. El programa de Bartol para el Mides era a largo plazo, y su intención tenía mirada de largo plazo. No estaba en sus planes dejar el ministerio y así lo confirmó a El País en la última entrevista que concedió este año, cuando comentó que este año comenzaba “la mejor parte” de su gestión donde se comenzarían a ver implementado los programas ideados en 2020.

Incluso en la entrevista El País le preguntó a Bartol si en algún momento se había planteado dejar el Mides.

“¿Lo llevó a decir: “esto no es para mí”?”, fue la pregunta en referencia a las dificultades con que se había encontrado. “No. Pero sí he pensado que esto es mucho más difícil que lo que se ve desde afuera”, respondiò Bartol en la entrevista publicada el 25 de enero. A tal punto no estaba en su cabeza dejar la secretaría de Estado que en las últimas semanas cerró un acuerdo para comenzar a construir su oficina en el corazón de Casavalle; una idea –o promesa– anunciada en campaña. “Si soy ministro mi oficina va a estar en Casavalle. Si quieren hablar con el ministro de Desarrollo Social tienen que ir Casavalle, porque el ministro trabaja directamente con la gente”, repitió en la campaña de 2019.

Su idea se postergó por la pandemia, pero en los últimos días comenzaron a diseñar los planos para la construcción de las oficinas. Sin embargo, el presidente Lacalle Pou analizó el avance de los trabajos en el Mides y entendió que la gestión necesitaba más peso político. Que el tiempo de su mandato requiere ajustes en el equipo. Y que si bien Bartol había trazado un buen camino era tiempo de un político. A la hora de elegir la opción era uno de sus hombres de mayor confianza y lealtad: Martin Lema.

Pablo Bartol es el segundo ministro que cambia en el gobierno de Luis Lacalle Pou. Anteriormente, Ernesto Talvi había renunciado a la Cancillería y en su lugar asumió Francisco Bustillo.  Según publicó El País, cuando Lacalle lo llamó para ofrecerle el cargo de ministro de Desarrollo Social  le había dicho: “Ayudás a miles, podes llegar a ayudar a millones”. Pablo Bartol fundó en 1997 el centro educativo Los Pinos, en Casavalle. Dirigió 21 años esa institución de gestión privada donde pasan cada día más de 300 niños y adolescentes.