Las dudas sobre la continuidad del proyecto Cipriani; no vino a Uruguay a firmar contrato y adujo tener COVID-19

CASINO DE SAN RAFAEL

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El showroom del San Rafael está cerrado desde hace casi un año. Las obras que se anunciaron con toda pompa no tienen fecha de inicio. Los cinco Dj de renombre contratados para las fiestas promocionales del emprendimiento en 2020, postergadas por la pandemia para el verano de 2021, fueron canceladas.

En tanto, el día que se vencía el plazo para firmar el contrato de concesión para la explotación del nuevo casino del San Rafael, el empresario Giuseppe Cipriani no se presentó ante el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).

El inversor está en cuarentena en Dubái por haber sido diagnosticado con COVID-19. Pero tampoco mandó a ninguno de sus 17 apoderados para que ponga la rúbrica.

Justo ayer los carteles del predio donde se construiría el nuevo casino y un emprendimiento inmobiliario fueron despintados. Aunque horas después, sorpresivamente, se volvieron a pintar con el logo de la empresa.

Las dudas sobre el futuro del emprendimiento privado están instaladas en todo Punta del Este, producto de las sucesivas postergaciones, cambios al proyecto y por la falta de señales concretas para el comienzo de la edificación.

Incluso en la Intendencia de Maldonado -desde donde el intendente Enrique Antía fue uno de los principales impulsores de la obra- mantienen cautela sobre qué es lo que puede constituirse en el predio donde ya se demolió el histórico Hotel San Rafael.

Sin embargo, del entorno al empresario Cipriani informaron a El País que la intención de concretar la dilatada obra se mantiene “firme y en pie”, y que lo que se espera es tener las bases sólidas para que el modelo de negocios pueda llevarse adelante.

Desde el Ministerio de Economía comentaron a El País que la empresa Fosara S.A. solicitó una prórroga para la firma del contrato con el Poder Ejecutivo para la concesión de la explotación privada del casino en Maldonado. Acreditaron la imposibilidad de su director, Cipriani, de llegar al país por su estado de salud tras haber contraído la cepa Ómicron, la que viene empeorando la situación en cuanto al COVID-19 en varios países del mundo.

El gobierno entendió el planteo y decidió dar la prórroga, en acuerdo con la empresa, para suscribir el contrato el 14 de enero de 2022 a las 12 horas.

Si bien a tres años de presentado el proyecto para el nuevo Hotel San Rafael - Casino de Cipriani no se han dado señales contundentes en cuanto a la seguridad de la inversión, el empresario italiano confía en que el proyecto se concrete. Es por eso que en las distintas etapas (armado del proyecto, compra del predio, demolición del viejo edificio, entre otras) ha invertido unos US$ 50 millones.

De todos modos, el empresario trabaja en ajustar el plan de negocios para hacer rentable la inversión, ya que entiende que el gobierno ha cambiado las reglas de juego al autorizar -sin licitación- el juego online a la Banca de Quinielas.

Este punto, según él, afectó al proyecto, así como también a los otros actores del rubro, por lo que solicitaron al Poder Ejecutivo dar marcha atrás.

Pero aunque esto cambie, no habrá seguridad total, ya que quienes manejan el proyecto sostienen que hay aún más variantes que manejar, como ser nada menos que la búsqueda de inversores que también quieran poner dinero.

Más allá de todo esto, el empresario italiano espera poder firmar el contrato en la nueva fecha establecida por el Ministerio de Economía, e iniciará las obras el año próximo, “si todo anda correctamente”.

Dicho todo esto, la expectativa en Punta del Este es alta, las dudas son aún mayores, y la confianza del empresario italiano es “fuerte”, comentaron a El País. Pero para la colocación del primer ladrillo, preparar la mezcla para la edificación, y ver a las primeras cuadrillas de obreros trabajando en el viejo predio del Hotel San Rafael, aún parece faltar bastante tiempo. Y sigue sin haber certezas de que esto finalmente suceda.