Eefectivos de las zonas I (Centro) y II (Pocitos) buscan a dos bandas que, en tres días, efectuaron un raid delictivo contra supermercados, salones y locales de una conocida cadena de farmacias. La Policía le atribuye nueve asaltos en tres días, pero podría haber efectuado otros asaltos.
EDUARDO BARRENECHE
Una tercera banda, que todavía no fue desarticulada, realizó por lo menos cuatro atracos a estaciones de servicio de Punta Gorda y a un supermercado situado en el Buceo hace dos semanas.
Las tres gavillas tienen algo en común: usan cascos para circular en moto y gorras de lana para no ser identificados. Solo uno de los rapiñeros acostumbra robar con la cara descubierta.
Mediante investigaciones y análisis de las filmaciones de asaltos efectuados en supermercados y kioscos, la Policía detectó que una de las bandas circula en un Fiat modelo Palio, de color blanco. Se presume que el auto fue robado.
El viernes 24, esta gavilla efectuó cuatro atracos a supermercados y salones ubicados en las jurisdicciones de la seccionales 4a (Tres Cruces) y 6a (Aguada). Ayer, la misma banda realizó otros dos asaltos a comercios de ese rubro en la zona de Tres Cruces.
En un principio, los investigadores policiales de la Zona I consideraron que debían ubicar a dos bandas. Sin embargo, las descripciones aportadas por las víctimas y las filmaciones coinciden en que se trata de una misma banda ampliada. Es decir, tiene entre cinco y siete integrantes.
En prácticamente todas las rapiñas se observa a un morocho alto, de 1.70 metros de altura. Los policías de la Zona 1 creen que varios integrantes de esta banda son menores. En la noche del viernes 24, la Policía estuvo cerca de detener al Palio blanco luego de efectuar un operativo de saturación en varios barrios céntricos. Sin embargo, los delincuentes escaparon. "Sabíamos donde andaban pero no pudimos ubicarlos", dijo uno de los policías que participó en el operativo.
Pese a que se dedican a robar a supermercados y salones sin importar su tamaño, esta banda efectúa "cierto trabajo de inteligencia" porque eligen aquellos locales que no tienen guardias de seguridad.
En un solo caso se equivocaron. El jueves 23, dos jóvenes con cascos para ocultar sus identidades ingresaron con armas desenfundadas a un mercado de carnes ubicado en Godoy y Alberto Zum Felde, dentro de la jurisdicción de la Zona II. Uno de los rapiñeros redujo a los empleados del lugar mientras su compinche sustrajo el dinero de la caja registradora. Luego fugaron.
Un empleado del comercio, que trabaja como auxiliar, es funcionario policial. Al ver lo sucedido, el agente salió en persecución de los delincuentes produciéndose un intercambio de disparos de armas de fuego. El policía continuó con la persecución. En la intersección de Iguá y Terragona (Malvín Norte), el rapiñero intentó esconderse en una volqueta donde fue detenido. Su cómplice logro escapar.
El policía recuperó el dinero robado al comercio, la moto que usaron para llegar al local y un revólver calibre 38 requerido por hurto.
Personal policial de Área de investigaciones de Zona IV derivó al detenido —de 18 años— al juzgado penal de 9° turno. La jueza titular de esa sede, Blanca Rieiro, dictaminó su procesamiento con prisión por un delito de rapiña y otro de hurto.
Culatazos.
Entre el jueves 23 y ayer, una segunda banda realizó tres rapiñas a locales de una cadena de farmacia.
Dos atracos ocurrieron en la jurisdicción de la Seccional 9° (Parque Batlle) y otro en la zona cubierta por la Seccional 10° (Pocitos). Los investigadores consideran que los integrantes de esta banda son mayores de edad. No son violentos.
Una tercera banda que rapiñó por lo menos cuatro estaciones de servicio en las zonas de Punta Gorda y Carrasco, sí utiliza culatazos y gritos a sus víctimas. "Estoy seguro que varios de ellos son menores o rondan los 18 años", comentó el dueño de una estación de servicio a El País.
El miércoles 22, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi dijo, en rueda de prensa, que la rápida respuesta policial obliga a los delincuentes a utilizar la violencia para achicar los tiempos de los atracos. "Inclusive hay alguno de ellos que controla los tiempos. Se han ido aunque no tengan el dinero" en su poder, agregó Bonomi.
"Las rapiñas no han crecido"
El miércoles 22, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que los casos de rapiñas ingresaron en una meseta. "No suben. Tampoco han descendido demasiado. Algo han bajado", agregó.
Bonomi dejó entrever que ello se debe al patrullaje preventivo efectuado por la Policía de Montevideo en los "puntos calientes" (lugares donde se cometen más delitos). "Los patrullajes se han perfeccionado", dijo.

Cometieron 9 rapiñas en tres días a comercios del Centro y Parque Batlle