El embargo de la DGI al Grupo Casal por U$S 25,1 millones dejó a los clubes de fútbol con los pelos de punta. Es que buena parte de las instituciones dependen del dinero del empresario para subsistir.

Las instituciones que vendieron jugadores al empresario y todavía están por recibir cuotas de los montos de las transferencias, podrían verse seriamente afectadas. Uno de los casos más recientes es el del goleador Richard Porta, por quien River Plate tiene un importante saldo a percibir por su transferencia al Siena de Italia. Si las sumas que Casal tiene que abonar por los créditos que le concedieron los clubes van al Banco República, varias instituciones temen que no puedan mantenerse en competencia.

La AUF también podría verse afectada, en forma indirecta. Aunque el embargo de la DGI no abarcó a la empresa Tenfield, ésta podría no adelantar más dinero a la AUF porque uno de sus accionistas (Casal) necesita liquidez.

Tenfield paga tres cuotas por año -una cada cuatro meses- a la AUF por el contrato mediante el cual la empresa tiene adquiridos los derechos televisivos y de imagen del fútbol uruguayo hasta 2014.

En ese marco, Tenfield le ha adelantado a la AUF uno de esos pagos por U$S 1,4 millones. "No es ningún secreto", dijo a El País el neutral Ovidio Cabal, integrante del Ejecutivo de la AUF. Sobre la posibilidad de que Tenfield -en definitiva, Casal- se tome un respiro en los pagos por los derechos televisivos del fútbol uruguayo, admitió: "Sí, claro, se lo puede tomar, tiene derecho, porque no tiene por qué adelantarnos los pagos".

El neutral convino, además, que si sucede eso, y transcurren cuatro meses sin que Tenfield pague su cuota, porque ya la ha adelantado, para la AUF "es un problema, porque con esos recursos nosotros les estamos pagando a los clubes el seguro de los salarios mínimos de los jugadores, que fue algo que consiguió la Mutual, y que se dejaría de pagar".

Fernando Sobral, presidente de Defensor Sporting, dijo a El País que el "primer impacto" del embargo al Grupo Casal es que parte de los U$S 25,1 millones iba a ser repartido entre los clubes.

"Entonces, si al fútbol le sacan equis millones de dólares, lo va a sufrir todo el mundo. En mayor o menor medida, a la corta o a la larga, todos los clubes lo van a sufrir. Nos va a pegar a todos", sostuvo Sobral.

El presidente violeta agregó que los demás contratistas "van a poner las barbas en remojo", y que si en los dos próximos períodos de pases los clubes no logran colocar a ningún jugador en el exterior, "esto no funciona más". Sobral sostuvo que Defensor Sporting "no le debe ninguna plata a Casal", pero dijo que no quería "entrar en detalles" si el empresario mantiene deudas con su club.

Por su parte, Juan José Tudurí, presidente de River Plate, reconoció que para el club darsenero la situación "puede ser grave, sin ninguna duda". Tudurí dijo que los clubes se sostienen con los aportes de Tenfield y la transferencia de jugadores. "Yo no voy a hablar de la plata que nos debe Casal, porque me parece que es un tema privativo entre Casal y nosotros, pero sí digo que, sin duda, es un tema complicado para el fútbol", agregó.

Juan Pedro Damiani, coordinador institucional de Peñarol, fue más cauto, ya que considera que los aurinegros no se verán afectados por el embargo de la DGI al Grupo Casal. Damiani explicó que Peñarol no tuvo que pagar por las incorporaciones de Fabián Estoyanoff y Ruben Olivera para el Torneo Clausura -cuyos pases fueron concretados a través del Grupo Casal- porque ambos futbolistas llegaron en calidad de préstamo. Peñarol sólo debe hacerse cargo de sus sueldos.

Ricardo Alarcón, presidente de Nacional, dijo que el embargo al Grupo Casal "es un tema que está en la Justicia" y que no correspondía hacer comentarios. "Este es un tema de mucha delicadeza, ante el cual solo corresponde tener prudencia", agregó Alarcón.

Danubio, en tanto, debe ser el club con el cual el Grupo Casal tiene más deudas pendientes por transferencias de sus jugadores: unos U$S 2,5 millones.

Arturo Del Campo, presidente de Danubio, dijo que ante la situación planteada por el embargo al Grupo Casal, se solicitará una entrevista a la DGI. "Estamos todos los clubes en lo mismo, esto nos agarró medio de improviso", dijo Del Campo.

"El tema es ver cómo nos ordenamos en la medida que todavía hay un dinero muy importante a cobrar del Grupo Casal, que compró un paquete de jugadores. Es lo único que nos preocupa, porque lógicamente tenemos que reordenar nuestras cuentas sin ese dinero, pese a que Casal siempre fue muy buen pagador y esperamos que lo siga siendo. Nosotros pensamos que esto no tiene por qué interferir en los pagos que Casal hace", agregó el presidente de Danubio.

Del Campos dijo que si bien su club "no va a dejar de funcionar", el embargo al Grupo Casal puede trae complicaciones. "A lo sumo dejaremos en stand by las obras" del proyecto del complejo deportivo de Danubio en la ruta 101.

"Pero, repito, en el peor de los escenarios, para Danubio esto no significará una debacle desde el punto de vista económico", aclaró Del Campo.

U$S25.000.000 Es el monto del embargo dispuesto por la DGI sobre el Grupo Casal. Abarca a diversas sociedades anónimas y a ocho personas.