La odisea por conseguir un remedio y evitar la pérdida grave de la visión

Salud. Violeta tiene queratitis por acanthamoeba | El medicamento que la cura no está en Uruguay | Para importarlo hay que presentar un formulario al MSP

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Todo comenzó con el ardor en un ojo, que Violeta no sabía por- qué era. Después le diagnosticaron queratitis por acanthamboeba, que puede causar la pérdida grave de la visión. Le dijeron que era curable, pero el medicamento no está en Uruguay.

"En diciembre empecé con un ardor en la vista. Consulté a un oftalmólogo que me dijo que era un problema de sequedad. Continúe poniéndome lágrimas artificiales, pero el ojo se iba poniendo cada vez peor, se me fue cerrando. Entonces fui a una oftalmóloga que fue la que me dijo que podía ser acanthamobea. Me mandó hacer una biopsia, que dio resultados positivos a esa enfermedad", contó Violeta Suárez, de 62 años. En el momento del diagnóstico su ojo "ya estaba muy mal, la palabra de ella (la oftalmóloga) fue que mi ojo estaba grave".

La acanthamoeba es un protozoario (parásito) "que en oftalmología lo vemos en pacientes que tienen infecciones en la córnea", informó Paola Pacheco, oftalmóloga del Servicio de Córnea del Hospital de Ojos y del Casmu, e integrante de la Asociación Uruguaya de Oftalmólogos. Algunos de los síntomas son: ojos rojos, dolor, encandilamiento, molestia de la luz y, "cuando progresa la enfermedad, afecta la córnea (una capa transparente anterior del ojo) y provoca un deterioro en la visión del paciente, que puede ser grave", afirmó la oftalmóloga. Incluso, en algunos casos, se puede llegar a precisar injertos de córnea.

Se da principalmente en usuarios de lentes de contacto que los utilizan con condiciones de higiene que no son las indicadas (ver "Cómo limpiar y desinfectar los lentes de contacto"). "Por lo general son pacientes que se bañan con los lentes de contacto puestos en piscinas y jacuzzis y ese germen es muy ubicuo (está en todas partes). Puede estar en pacientes que lavan los lentes de contacto o el estuche con agua de la canilla", explicó Pacheco.

Violeta usaba lentes de contacto. Tuvo que dejarlos cuando comenzó con la enfermedad. Asegura que tenía "el producto para la higiene de la lentilla, pero me dijeron que tenía una raspadurita en el ojo, entonces al tener contacto la acanthamoeba con la lastimadura se instaló en el ojo".

TRATAMIENTO. El 12 de enero pasado Violeta supo que tenía acanthamoeba, que "era curable pero que en el país no está la medicación adecuada".

El diagnóstico de la patología "a veces no es fácil, pero lo más difícil es el tratamiento", aseguró la oftalmóloga, quien explicó que "es un tratamiento fungicida (para matar hongos) con muchos medicamentos: por un lado un tratamiento antiséptico: bactericida y fungicida. En Uruguay tenemos disponibles los fungicidas: ketoconazol, itraconazol y voriconazol. También se puede usar un antibiótico tópico que se llama oftabiótico, el otro es un antiséptico clorhexidina", pero el Brolene, el más importante porque ha demostrado mayor efectividad para curar la enfermedad, no está en Uruguay.

El Brolene se puede conseguir en Australia, Inglaterra y España, contó Violeta. A ella se lo trajo su hijo que vive en la madre patria, si no, no sabe qué hubiera hecho.

La oftalmóloga del Hospital de Ojos indicó que la importación del medicamento se puede conseguir presentando una carta al Ministerio de Salud "con un diagnóstico confirmatorio, que tiene que ser una biopsia o una microscopía especular. La importación no demora tanto. Mientras, al paciente se le administra el resto de los medicamentos". (Ver "El trámite").

En Argentina también es difícil conseguir el Brolene por eso los oftalmólogos utilizan "desinfectantes catiónicos que pueden matar a la acanthamoeba: Clorhexidina y Polihexametilenbiguanida y además mezclan antifúngicos y un antibiótico", indicó Pacheco. Si bien esos medicamentos son efectivos no lo son tanto como el Brolene.

Antes, un laboratorio traía ese remedio a Uruguay, pero como no tiene población suficiente para venderlo discontinuó la importación. Violeta contó que sólo en donde ella se atiende hay otros dos pacientes con la enfermedad, entonces no entiende cómo puede ser que sean pocos casos.

En Uruguay no existen estadísticas de esta patología. Uno de los últimos datos es de 2004. En ese momento, en Uruguay había entre 2 y 3 casos por año de queratitis por acanthamoeba, con tendencia en aumento, según una publicación de la Organización Panamericana de la Salud, el Ministerio de Salud Pública y el Instituto de Higiene de la Facultad de Medicina.

A OSCURAS. Mientras esperaba la medicación, Violeta tuvo que estar a oscuras. "Tenía mucho dolor, tanto que no podía apoyar la cabeza en la almohada, ni en la reposera, donde pasé prácticamente dos meses sentada y poniéndome cada hora las gotitas". El 24 de febrero le dieron una medicación para el dolor -los analgésicos comunes no le hacían efecto- y "el 26 de febrero recién pude tocar mi almohada", aseguró.

Violeta dijo que el Brolene que le trajo su hijo ahora ya se le termina y no sabe cómo seguir: "Si me dicen que en el Ministerio, mediante una carta, me dejan pasarlo por la Aduana yo la hago porque es mi vista. Porque después de esto no sé cómo puedo llegar a quedar".

Medicamento: El hijo de Violeta le trajo el Brolene de España, pero ya casi no le queda.

Casos: Aseguran que son pocos, pero Violeta dice que sólo donde ella se atiende son tres.

CÓMO LIMPIAR Y DESINFECTAR LOS LENTES DE CONTACTO

La mayoría de los pacientes con queratitis por acanthamoeba son usuarios de lentes de contacto, que no les realizan una buena higiene durante su uso. Los lentes de contacto se lavan con líquidos o soluciones multipropósito. Hay varias marcas. En las cajas de esos productos indican paso a paso cómo limpiar los lentes para evitar infecciones.

Para limpiar, desinfectar y remover proteínas diariamente de los lentes de contacto hay que colocar tres gotas de solución multipropósito en la superficie de ambos lados del lente y frotar suavemente.

El segundo paso es enjuagar cada lado del lente con la solución.

Colocar los lentes de contacto limpios en el estuche y llenarlo con la solución. Deben estar inmersos en este líquido durante al menos 4 horas. La solución del estuche debe cambiarse a diario.

Antes de manipular los lentes el usuario debe lavarse, enjuagarse y secarse las manos.

No utilizar agua corriente, agua embotellada o saliva con los lentes o con el estuche.

Para que no haya contaminación del lente hay que evitar el contacto de la punta del frasco de la solución con cualquier superficie.

Además de los lentes de contacto hay que limpiar y desinfectar los estuches con una solución multipropósito después de cada uso y dejarlo secar. Se debe reemplazar el estuche para lentes cada tres meses.

EL TRÁMITE

Primer paso:

Para que el MSP importe el medicamento Brolene para tratar la queratitis por acanthamoeba hay que llenar un formulario que está en la web del Ministerio: www.msp.gub.uy.

Segundo paso:

En esa web ingresar a "Habilitaciones de productos de salud". Luego en "Sicofármacos, estupefacientes y otros". Después en "Requisitos trámites del sector sicofármacos, estupefacientes y otros". Y el último link es: "Constancia para medicamentos no registrados en plaza "Uso compasivo". Allí está el formulario.

Tercer paso.

Ese documento debe presentarse junto con una carta del médico en el Departamento de Medicamentos del MSP o por fax al 402 80 32/33. Luego de 5 días, el MSP decide si aprueba o no la importación.

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