Tras muerte de adolescente, SCJ ordena a jueces a realizar seguimiento a los menores bajo el amparo del INAU

Redacción El País
El pasado viernes 19, la Suprema Corte de Justicia (SCJ) resolvió que los jueces deberán hacer seguimiento a los niños, niñas y adolescentes que queden bajo el amparo del Instituto del Niño y Adolescente (INAU).

La aprobación de este reglamento de contralor se da semanas después conocerse que el primer fallecimiento materno del año fue el de una adolescente de 16 años que estaba bajo el amparo de un hogar del INAU en Rivera, lo que derivó en una investigación interna.

La menor ingresó al hogar en julio de 2023 y desde entonces tuvo 17 salidas no autorizadas en las que, se presume, fue víctima de explotación sexual.

Teniendo en cuenta que el tribunal que dispone la internación en el INAU es responsable de vigilar el caso de cada niño, la SCJ consideró "oportuno regular y supervisar la efectivación de dicho deber, que en definitiva redunda en una garantía del cumplimiento de los elementales derechos de niños, niñas y adolescentes consagrados en la normativa nacional y compromisos internacionales asumidos por el Estado", según indica la resolución a la que accedió El País.

Este reglamento de contralor señala que el registro de los menores deberá llevar, por lo menos, la siguiente información: nombre del niño, niña y/o adolescente, documento de identidad, centro de internación, identificación única de expediente y el nombre de la defensa. Además, estos datos deberán ser actualizados al menos una vez por mes para dar seguimiento al lugar en el que se encuentran los menores.

También se ordena que los jueces visiten a los menores en los centros una vez cada noventa días para "valorar el estado general del centro y particular del niño, niña o adolescente bajo jurisdicción". Estas instancias podrán ser entrevistas o "intercambios informales". Para esto, los juzgados van a elaborar un calendario de visitas que será notificado a INAU y a la defensa de los menores, pero el reglamento añade que los magistrados podrán visitarlos sin previo aviso "en caso de que las circunstancias lo ameriten".

"En caso de constatarse, en ocasión de la visita o denunciarse ante la sede una salida no acordada o ausencia de un niño, niña o adolescente, el magistrado actuante, además de dictar las medidas del caso, deberá cerciorarse inmediatamente que la Fiscalía competente tenga noticia fehaciente de ello, así como su defensa", añade el documento.