Estrellas negras con un entrañable espectáculo

GUSTAVO TRINIDAD

Fue la mejor jornada que se vivió hasta el sábado pasado en el Teatro de Verano. Dos excelentes producciones murgueras se sumaron al primer gran espectáculo de comparsas que subió a escena en lo que va del concurso.

El espectáculo que ofreció Estrellas Negras es sencillo en el mejor sentido del término y a la vez entrañable.

La comparsa se inspira en ella misma y representa lo que es el ajetreo horas antes de que el grupo salga en las Llamadas. Así los textos de Elbio Olivera, Eduardo Da Luz y Javier Da Luz, presentan a personajes como el veterano que se las sabe todas y no hay que discutirle, la joven que desfilará por primera vez y recibe el traje como una herencia, el componente de la cuerda de tambores que lucha para abandonar la droga, un cuarteto de borrachos que sólo pide "cinco p`al tinto", el trabajo solitario y silencioso del vestuarista, que también es un homenaje al artista José de Lima.

Desde la presentación, con un inteligente juego de luces que llevan las bailarinas y que también figuran luciérnagas en la noche, la puesta en escena aporta elementos imaginativos que van acorde con el espíritu del texto. La orquesta, cumpliendo con las composiciones de Eduardo Da Luz, tuvo un desempeño notable donde destacaron los vientos y se paseó por un variado abanico de ritmos. Las coreografías de Anabella Consoni se plantean el desafío de transmitir el hormigueo de personas y el caos que suponen un apronte para las Llamadas y salen bien paradas. Consoni domina el espacio para que no se transforme en un caos real. Lo de Julio César González, "Gonzalito", que ganó varios premios como escobero, ya es un arte mayor. González realiza una verdadera danza donde además del virtuosismo y el vértigo, aflora el sentimiento.

la soñada. El ritmo de la murga del Borro es sencillamente arrollador. Aunque la murga pudo haber cantado muy arriba en la presentación y algún remate pasó demasiado lejos de los micrófonos, los arreglos musicales de Rafael Antognazza -que también realizó la puesta en escena-, son excelentes. Antognazza despliega una energía impresionante sobre la escena y se la transmite a todo el grupo. El tema elegido gira entorno a la búsqueda desesperada del éxito. Parar ello la murga pide consejos al mismísimo éxito personificado por Carlos "Bananita" González, de muy buena actuación. Si bien la risa no aparece en los primeros minutos, hasta que llega el salpicón, el ritmo electrizante mantiene prendada a la platea. El cuplé del puente toca el tema de las papeleras y no faltó la ridiculización de algunas costumbres argentinas. Por el pasa también el Rey de España como mediador. "Una especie de Mr. Músculo con coronita". Los textos de Heber "Tiburón" Martínez y Fernando Esteche aportan la sustancia para redondear un muy buen espectáculo.

la bohemia. La murga mantuvo una constante y fluida comunicación con la platea. Se trata de una murga de niños donde llega el dinosaurio Barney y realiza el juego del "haz lo que yo digo pero no lo que yo hago" Así se critican los piquetes de Gualeguaychú y algunas posturas del Mercosur.

Salvo algunas flojedades del texto, redondearon un buen espectáculo.

Con la lluvia de ayer llegó la primera suspensión de lo que iba a ser la séptima etapa del Concurso Oficial en el Teatro de Verano. Quedaron sin subir a escena la murga La Soberana, la comparsa C1080 y la murga La Margarita.

Estos grupos ahora actuarán al final de la primera rueda. Si hoy no llueve la etapa se mantendrá según el calendario previsto para la octava jornada.