Diecisiete permisarios de los locales del Parque Rodó crearon una sociedad anónima —Leranur S.A.— para presentar un proyecto de remodelación de la zona y de esa forma impedir que participaran grandes empresas extranjeras del plan de recuperación del parque que tenía previsto la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM).
Según los concesionarios la idea fue avalada por el director de la Región Oeste, Jaime Igorra, pero con la crisis económica la propuesta no prosperó.
Sin embargo, el proyecto no contó con el apoyo de todas las autoridades de la comuna. Ayer en la Junta Departamental, el director del departamento de Acondicionamiento Urbano, Alberto Rosselli, sostuvo que nunca aprobó la iniciativa y expresó que las concesiones del Parque Rodó se deben otorgar por medio de licitaciones "claras".
"Si los concesionarios crearon una sociedad anónima es un problema de ellos. Para nosotros es una sociedad más. Nosotros negociamos directamente con cada uno de ellos", comentó.
Las autoridades aclararon que la IMM nunca aceptó la propuesta de los empresarios de declarar el proyecto de interés municipal.
Por su parte, los ediles del Partido Nacional y del Partido Colorado criticaron el procedimiento. Para los integrantes de la Junta Departamental la comuna "pierde" dinero con los subarriendos que se autorizaron en el Parque Rodó y no aceptan la sociedad anónima.
RENOVADORES. El representante del bar Don Trigo, Gerardo Trigo, relató que en una primera instancia los concesionarios formaron un grupo de trabajo para participar de la "transformación" que quería realizar la Intendencia en la zona del Parque Rodó. La iniciativa estaba basada en una "gran licitación" que tendría como eje central el Forte Di Makale.
El empresario sostuvo que, ante la posibilidad de que se presentaran inversiones de empresas como Beto Carrero y Disney, los concesionarios decidieron armar un proyecto "global" para presentar a la comuna y solicitar que lo declararan de interés municipal. Relató que, en las reuniones que se realizaron entre los empresarios, se debieron "limar asperezas" con los viejos concesionarios que no querían cambiar el lugar.
"Nosotros sabíamos que si se licitaba y ganaba Beto Carrero íbamos todos para afuera", comentó.
Para Trigo, la mejor forma de reestructurar el parque, era que los mismos permisarios fueran la "fuerza viva" que "movilizara" la licitación.
"Todos estamos jugando un mismo partido, y cada cual defiende su chacra, pero tiene que ser un trabajo común. Estamos apostando a una propuesta común, donde todos tenemos que darnos un poco la mano", agregó el presidente de la sociedad anónima.
Para el empresario, el local gastronómico que representa y W.Lounge son las "caras visibles" del Parque Rodó y por eso reciben "todas las críticas". "La gente nos ve como los grandes renovadores, como quienes habíamos reconquistado el parque urbano, el paseo de todos los montevideanos", comentó.
Explicó que se instaló en esa zona porque tramitó el traspaso con el antiguo concesionario de la cervecería Zu Zu.
Para eso la empresa invirtió 40 mil dólares y pagó más de 350 mil dólares en una reforma. Don Trigo tiene un contrato precario y revocable.
"Debo decir que nos pasaron cosas interesantes. Cuando llegamos al Parque Rodó no hubo una sola marca, un solo patrocinador que nos apoyara; nadie creyó en ese proyecto. Recién una vez que abrimos y lo explosivo que resultó comenzaron a darnos un poquito la razón", recordó. Trigo dijo que si bien no participa en política una vez tuvo que ingresar al Parlamento para sustituir a un legislador del Encuentro Progresista (EP) porque integra una lista como suplente.
"En realidad siempre me invitan a entrar a sala pero yo no estoy ni cerca de esa actividad. Entré cuando fue el voto de los funcionarios públicos. La verdad es que fue una experiencia enriquecedora, me encantó estar al lado de los que veo en televisión todos los días; pero no es lo mío", afirmó.
RODELU. Para Raúl Denis, uno de los propietarios de la pizzería, la sociedad Anónima que propusieron los demás locales es "engañosa". "Yo les respondí que no iba a funcionar porque la Junta Departamental autoriza personas físicas y no sociedades. Ellos me contestaron que el que no se anotaran iba a quedar afuera. Yo les dije que íbamos a ver", comentó.
Los actuales concesionarios de la pizzería Rodelú trabajan en ese lugar desde el 7 de diciembre de 1977. Desde esa fecha tienen un contrato precario y revocable. En los meses de invierno pagan un alquiler de cinco mil pesos y en verano, temporada alta, alrededor de 16 mil pesos. "La sociedad no me pareció bien, y cuando vi qué tipo de negocio era, más mal me pareció. Porque ¿qué sacamos si autoriza el municipio una sociedad anónima? Un día que hablé con uno de ellos le pedí que me dijera cómo era, porque yo no lo entendía, y me contestó: ‘Mire, esto es así: se va a esa sociedad anónima, lo cual a ustedes no les va a cambiar nada, van a seguir pagando lo mismo, pero van a tener que pagar un cannon a la sociedad anónima", relató.
Ayer en la Junta Departamental, Rosselli aseguró que la IMM nunca apoyó la creación de la sociedad anónima. "Nosotros queríamos un proceso licitatorio abierto a la participación de la mayor cantidad de gente posible. No estamos de acuerdo con un llamado único para el Parque Rodó", indicó.
Para el jerarca es "saludable" que los concesionarios tengan "interés" en las mejores de la zona pero reiteró que el proceso debe ser "abierto".
Dos proyectos en competencia por el bar Nelson
La Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) recibió dos ofertas para la licitación del parador Nelson ubicado en la zona del Parque Rodó, según dijo ayer el director del Departamento de Desarrollo Económico, Alberto Rosselli.
El jerarca manifestó que en los próximos días la Intendencia designará a los técnicos que evaluarán los proyectos.
El pliego prevé que el plazo de concesión será de diez años a partir de la ocupación efectiva del predio y se prorrogará automáticamente cada dos años hasta sumar diez años más.
La concesión permite la ampliación del edificio hacia el sector posterior, en tanto que sobre la fachada principal y la vereda de la rambla se permitirá una terraza. También se autorizará la construcción de un nuevo nivel sobre la planta baja con una altura máxima para todo el conjunto de siete metros.
El concesionario determinará la conveniencia de desarrollar un único local o varios de menor escala. La nueva definición del espacio licitado, el reordenamiento de los espacios libre inmediatos y el nuevo estacionamiento que se proyecta, requerirán la reubicación de los locales gastronómicos existentes. El traslado, reimplantación y acondicionamiento del espacio abandonado por locales o juegos serán tareas del concesionario. Los locales de venta de churros y otros productos, que se encuentran dentro del área de concesión, deberán ser reubicados como quioscos.
Se creará una zona de estacionamiento para 90 automotores, que constituirá una nueva zona de acceso a la zona y contribuirá a la revitalización de un área deprimida del parque y su entorno. El área de estacionamiento, que será pública y gratuita, contará con estacionamiento vigilado durante el horario de atención al público del local.
El concesionario se hará cargo de las reparación de pavimentos, cordones, escaleras, canteros, jardineras, iluminación y equipamiento del área de influencia. También le corresponderá el mantenimiento y la vigilancia de la zona y la regulación de la publicidad. La IMM fijó como precio base mensual (canon) la cantidad de 100 Unidades Reajustables, cantidad que deberá ser superada por los interesados en sus ofertas.
Licitaciones
PLIEGOS La IMM tiene previsto licitar el parador Artigas y su entorno, y el tercero el Forte Di Makale el resto de los juegos y el espacio comprendido entre Requena y García, la Rambla y la Facultad de Ingeniería. Este mes, la Intendencia presentará los pliegos para la licitación de la cervecería Nelson que prevé que en la calle Requena y García se construya un estacionamiento.
DON TRIGO En el caso del parador Don Trigo ubicado en el Parque Rodó, la Intendencia autorizó la transferencia de un permiso entre particulares con el anterior concesionario y el actual por medio de una resolución que firmó Arana y data del año 2000.
RODELU En el caso de la pizzería Rodelú, el actual concesionario sostiene que tiene el bar desde hace más de 20 años con un permiso precario y revocable. Por lo que el dueño sostiene que no puede hacer ninguna inversión importante en un local que tiene un contrato de ese tipo.
PLAZA MATEO Antes de convertirse en el actual espacio cultural, formó parte de un proyecto que implicaba la instalación de una estación de servicio de la firma ESSO. En esa instancia un grupo cultural denominado Plaza Mateo solicitó la autorización para desarrollar un proyecto para la música uruguaya que más tarde fue declarado de interés nacional.
W. LOUNGE En un principio fue el Yacht, después la Churrasquería y hoy es el conocido local nocturno W. Lounge. Lo cierto es que hasta el 13 de diciembre de 2005 la comuna no tiene poder sobre el lugar, a no ser que los concesionarios quieran subarrendarlo, para lo cual, deberán pedir autorización al municipio. La empresa que paga el cannon de US$ 500 más el 15% es la firma Churrasquería SRL la cual recibe alrededor de US$ 10 mil por el subarriendo que realizó a la empresa W. Lounge.