NATALIA ROBA
El 1° de febrero una mujer asumirá la presidencia de la Suprema Corte de Justicia. Será la primera en ocupar el cargo en 22 años, la segunda que lo hace en tiempos de democracia, y la tercera en la historia del país.
Hoy el 51% del total de los magistrados son mujeres que se concentran sobre todo en los juzgados de paz y de familia. Algunas, a cargo de sedes penales y también de otras materias, han cobrado notoriedad en los últimos años.
La ministra Sara Bossio, quien ingresó al Poder Judicial en 1965, será la tercera mujer al frente de la Corte en la historia nacional. En 1987 Jacinta Balbela ocupó ese cargo, y antes, en la dictadura, estuvo Sara Font de Genta.
En la última década, como muestra de lo que ocurrió también en la matrícula universitaria en general, y de la Facultad de Derecho en particular, las mujeres han copado los estrados judiciales.
Sin embargo, en materia de cifras apenas sobrepasan la mitad de los cargos de jueces. Y la mayoría de ellas ocupan puestos de rango inferior. A medida que se asciende en la escala jerárquica los porcentajes de mujeres juezas disminuyen, según expresó Anabella Damasco, presidente de la Asociación de Magistrados.
De acuerdo con la lista de autoridades del Poder Judicial, hay un total de 450 jueces en todo el país, y de ellos 231 (51%) son mujeres.
Damasco explicó que para una mujer hacer la carrera judicial, que implica recorrer diferentes destinos en el interior para terminar en Montevideo, es más difícil que para un hombre. "Por ese motivo hay una gran cantidad de juezas divorciadas", explicó, y afirmó que difícilmente un marido deje su empleo para irse a vivir al interior, "salvo que tengan una profesión acorde".
Por otra parte, dijo que hay muy pocos jueces casados entre sí. Pero, además, señaló que los que forman una familia muchas veces les ocurre que uno tiene un destino en Melo y otro en Carmelo, lo que también genera dificultades.
Sin embargo, para Balbela esa situación no puede afectar la carrera de las mujeres.
Damasco explicó también que actualmente se está ingresando a la magistratura a edades mayores. El Centro de Estudios Judiciales (CEJU) que capacita a abogados que aspiran a ser jueces, amplió el llamado a las personas de hasta 45 años.
El CEJU también es muestra de la creciente presencia de mujeres en la Justicia. En los últimos diez años el número de abogadas que ingresa es mayor al número de colegas hombres.
Eduardo Lombardi, ministro del Tribunal en lo Contencioso Administrativo y ex director del CEJU, dijo a El País que la presencia de la mujer corresponde con el aumento del sexo femenino en la Facultad de Derecho, como ocurre en muchas otras profesiones.
Lombardi cree que en la próxima década el porcentaje de mujeres juezas será aún mayor y que continuará creciendo gradualmente hasta copar los órganos jerárquicos, como la Corte o el TCA.
De todos modos, dijo que en 2007 el Poder Judicial estará representado por la mujer, ya que en la Corte estará Bossio, en el CEJU la directora es la ministra del tribunal civil Selva Klett, la Asociación de Magistrados es presidida por Damasco, y en otros órganos jerárquicos del Poder Judicial también lideran.
Bossio ingresó a la corporación en mayo de 2006 luego de que el ministro Pablo Troise se jubiló. Desde la época de Balbela una mujer no ocupaba ese cargo. Al igual que entonces, es la única entre los cinco ministros. Lo mismo ocurre en el Tribunal de lo Contencioso Administrativo. La jueza Martha Batistella es la única mujer que integra el TCA, organismos que presidió en 2004.
En los tribunales de apelaciones, que sólo existen en Montevideo, de 45 jueces, 19 (42%) son mujeres. Hay siete tribunales civiles, dos de familia, tres de trabajo y tres penales, integrados cada uno por tres jueces.
En Montevideo hay un total de 140 jueces entre los letrados, los de paz y conciliación y 89 (64%) son mujeres. En los juzgados donde hay mayor presencia femenina es en los de familia (21 en 28) y en los de Paz (29 en 38). En los juzgados penales hay sólo cinco en 21 jueces. En el interior hay 260 magistrados, de los cuales 141 (60%) son mujeres. La proporción se mantiene también si se tiene en cuenta los porcentajes de mujeres que son jueces letrados (de mayor categoría que los de paz): son 51 en 84 cargos, también el 60%.
Los departamentos en los cuales en proporción hay más juezas son Maldonado (87,5%), Flores (66%), Canelones (63%), Paysandú (61%), Tacuarembó (61,5%) y Salto (60%).
Lombardi dice que apuesta a la mujer. "Muchas han dado un perfil muy bueno. Las hay muy buenas técnicamente como hay jueces muy malos, y también mujeres muy malas profesionalmente".
Mujeres en lista de ascenso
La lista de jueces propuestos por la Suprema Corte de Justicia para que puedan ascender, está integrada por nueve mujeres de 20 jueces de Montevideo y 16 mujeres en 20 jueces del interior. Es decir que entre los 40 jueces elegidos por la Suprema Corte como los de mejor calificación, el 62,5% son mujeres.
Las mujeres elegidas en Montevideo son: Anabella Damasco (de cuatro jueces penales), Dora Szafir (de entre siete jueces civiles), Nanci Corrales y Julia Odella (de entre cuatro magistrados de laboral), Lilián Vendan, María del Carmen Díaz y Myriam Méndez (las tres únicas de familia elegidas) y las juezas Teresita Rodríguez Mascardi de concural y María Ester Gradín, quien actualmente cumple funciones en la Unidad de Fortalecimiento del Poder Judicial. Las 16 juezas del interior elegidas son: Alicia Álvarez, Sylvia De Camilli, Graciela Eustachio, Lina Fernández, María Raquel Gini, Martha Gómez, Olga Guarino, Marta Lechini, Teresita Macció, Alicia More, Mariana Mota, Mónica Pereira, Graciela Pereyra, Sonia Piaggio, Marta Salaberry y Gloria Seguessa.
Según el Eduardo Lombardi, director del Centro de Estudios Judiciales, hay materias como la penal en que las mujeres "se ven más exigidas".
Perfil
Presidenta de la SCJ
Nombre: Sara Bossio Raig.
Otros datos: Fue juez de Paz de Soriano y desde 1991 integró tribunales de apelaciones en lo civil.
El próximo 1° de febrero Sara Bossio Raig asumirá la presidencia rotativa de la Suprema Corte de Justicia, en sustitución del ministro Daniel Gutiérrez que ejerció el cargo en el último año. Bossio será la tercera mujer en presidir la Suprema Corte, organismo al que ingresó en mayo de 2006 por el retiro del ministro Pablo Troise.
Al igual que el resto de sus colegas desde 1998, Bossi accedió a la Suprema Corte por ser la ministra más antigua de un tribunal de apelaciones.
La futura presidenta comenzó su carrera en 1965 como jueza de Paz de Soriano. Cuando juró como ministra de la Suprema Corte en mayo de 2006, dijo ante la Asamblea General en el Parlamento: "La asunción es la culminación de mi larguísima carrera en el Poder Judicial. Yo tengo más de cuarenta años como magistrado y he hecho toda mi carrera paso por paso".
Cuatro juezas que alcanzaron notoriedad
Cobró notoriedad a partir del caso Cangrejo Rojo, por el cual fueron procesados en marzo de 2000 por un delito de estafa Eladio y Ricardo Moll. Fue trasladada a una sede laboral luego de una dura disputa de competencia que tuvo con el juez Pablo Eguren por el caso Peirano.
Ana Lima
Renunció al Poder Judicial en diciembre de 2002 luego de que se le comunicó el traslado a una sede laboral. Había estado nueve años al frente de un juzgado penal. Actuó en el caso del vasco Jesús María Lariz Iriondo, acusado de pertenecer a la ETA.
Estela Jubette
A cargo de uno de los dos juzgados de lo Contencioso Administrativo, fue una de las primeras juezas que intervino en casos vinculados a la violación de los derechos humanos. Actuó en el caso de la desaparición de la maestra y militante del PVP, Elena Quinteros.
Fanny Canessa
Cobró notoriedad en sus años de jueza penal en Maldonado. Intervino en el caso del ex dictador Juan María Bordaberry, y tras archivarlo por entender que era cosa juzgada, recayó sobre ella una investigación que tramita la Suprema Corte de Justicia.