El presidente Jorge Batlle expresó ayer que su mayor preocupación a la hora de entregar el gobierno es poder dar conti- nuidad al proceso de integrar "del todo" al Uruguay en "todo el mundo".
En declaraciones a la prensa realizadas en el Edificio Libertad a propósito de su gestión de gobierno, el presidente sostuvo que "los gobernantes siempre tienen dos sentimientos: uno de ellos es que le faltan muchas cosas por hacer pero es lógico, natural y humano, y en segundo lugar los gobernantes hacen una evaluación global de la cosa. Y a juicio del gobernante, la preocupación fundamental que tiene uno es que el país pueda integrarse al mundo", explicó.
Sostuvo que "la crisis que en el Uruguay fue bastante extensa determinó que se generara en todos nosotros —en todos los sectores políticos y sociales— la idea de que había un pasado al que teníamos que volver".
Explicó que ello "nos transformó en buena medida, con un sentimiento positivo, en un país muy conservador. Un país que estaba siempre mirando el pasado. Un país al que le preocupaba mucho más mirar Amsterdam, Colombes, el campeonato del 30 y el Mundial de Maracaná que ver cómo había que hacer para jugar al fútbol más o menos parecido a lo que juegan todos los países del mundo".
El presidente Batlle sostuvo que "para mí ese es el problema más grave que tiene el Uruguay. Y ese es a mi juicio lo que todo gobernante siente cuando termina su período, cree que no ha podido meter al Uruguay del todo en el mundo. En algunas cosas creo que lo hemos hecho pero en las cosas esenciales todavía le falta mucho camino por recorrer", afirmó el presidente.