Alarmas en casa: un sistema que disuade pero no impide los robos

LIONEL GARCIA

En Uruguay hay alrededor de 40 mil fincas de sistemas de alarma con monitoreo. Así lo dijo a El País Roberto Stolovas, gerente general de ADT y presidente de la Cámara Uruguaya de Empresas de Seguridad Electrónica, entidad que engloba a una decena de firmas del ramo que cubren "aproximadamente el 80% del mercado".

De acuerdo con el especialista, el sistema más utilizado por los usuarios es el que incluye monitoreo y respuesta móvil. Los equipos de alarma y sensores PIR (Passive Infra Ray, por la sigla en inglés) tienen un costo de unos 300 dólares, de acuerdo a la cantidad de habitaciones de la vivienda y a los requerimientos del usuario.

El aviso —conexión por línea telefónica, radio o los dos— y respuesta móvil tienen un precio, dependiendo de la empresa contratada, que ronda los 50 dólares mensuales.

"Es que un equipo de alarma solo, no sirve para nada", señaló Stolovas.

Una alarma avisa la posibilidad de un hurto o siniestro. Sin embargo, comerciantes y expertos señalan que la principal función de éstas es disuadir a los delincuentes de cometer un delito. Varios factores juegan para esto. Por un lado, no se trata de sistemas infalibles. Por el otro, el personal de seguridad de las empresas no puede ingresar al domicilio sino tiene previa autorización del propietario. Eso sigue siendo tarea específica de policías o bomberos.

ALARMIZAR. Según un relevamiento realizado por El País, el producto favorito a la hora de "alarmizar" la casa es un sistema de sensores de movimientos y temperatura —también llamados volumétricos— colocados en el interior del hogar y con conexión a una central de respuesta inmediata. De acuerdo con Sansonetti, estos representan la casi totalidad del mercado en domicilios.

La efectividad de estos sistemas depende mucho del material que se utilice. La procedencia de los sensores PIR hace que su precio oscile entre 25 y 60 dólares cada uno. "Su costo es directamente proporcional a la calidad", dijo a El País Agustín Posse, presidente de la Federación Uruguaya de Empresas de Seguridad, integrada por también una decena de empresas que trabajan con alarmas o personal "hombre". "Un buen equipo brinda una seguridad del 99%. Ahora, si usted compra por su cuenta dos PIR y pide una conexión simple... que tenga buena suerte".

Lo ideal es que se conecte un sensor por habitación de la casa, variable que incide a la hora de estimar el costo total de una instalación.

En los últimos tiempos aumentaron los pedidos de alarmas perimetrales exteriores, cuyos sensores se instalan en fondos y jardines. En estos casos, el movimiento de plantas y animales genera un efecto no deseado. "Con los sensores instalados en el exterior de la casa, el 95% de las llamadas que recibimos (unos 15 mil disparos mensuales) son falsa alarma", dijo el director de la empresa Sats Adolfo Pérez Pastori.

TRUCOS. Conforme avanza la tecnología, paralelamente lo hace la pericia de los asaltantes. La tarea de "campo" de estos últimos va desde cronometrar el tiempo de respuesta móvil de cada empresa hasta buscar formas de eludir la detección de los sensores, que tienen un ángulo de acción de 110 grados.

"En el caso de alarmas volumétricas, los delincuentes suelen emplear elementos como cartón, frazadas o espuma-plast para ‘tapar’ la emisión de calor de sus cuerpos", indicó Pérez Pastori de Sats. "No es imposible neutralizar un buen equipo", reconoció por su parte Posse, añadiendo que "nuevamente hay que enfatizar en la relación precio-calidad".

Para Sansonetti, en cambio, no es fácil violar un sensor volumétrico. "Quien se esté moviendo, más allá que esté tapado por algo, está cambiando la radiación de fondo, que es otro elemento que detecta".

Stolovas va aún más allá: "una cosa son las películas de ciencia ficción y todo eso de las cajas de cartón o las frazadas, y otra muy distinta es la realidad".

Según él, los PIR detectan calor y los distintos materiales a través de la emanación de rayos infrarrojos. "Si el detector es bueno, siempre lo va a detectar".

No hay unanimidad en este punto. Rafael Fornari es un experto independiente en instalaciones eléctricas con 16 años de experiencia. Si bien indica que en el mercado local se trabaja con buenos elementos técnicos, no existe un sistema infalible. "Un sensor detecta temperaturas, entonces si se hace coincidir la temperatura corporal a la del ambiente, se puede pasar desapercibido".

Tener un sistema de alarma instalado no fue impedimiento para que una conocida empresa de telecomunicaciones fuera asaltada el año pasado. Un gerente de ésta —que no quiso dar su nombre ni revelar el de la firma— dijo que la seguridad brindada "se anula cortando la línea telefónica a la central o, si la conexión es por radio, provocar una simple interferencia". Para él lo ideal sería un "monitoreo constante del soporte de conexión elegido".

NO INGRESAR. La alarma disuade, y llegado el caso —si el usuario tiene servicio de respuesta descentralizada— avisa la existencia de un hecho anormal.

Pero los efectivos de seguridad que lleguen al lugar suelen estudiar la situación y efectuar un recorrido perimetral en base a la información que tengan. A menos que estén expresamente autorizados por el dueño de casa, no puede ingresar a ésta.

"Si el propietario nos deja la llave, entramos. Si no, esto es función de la Policía", dijo a El País Gonzalo Charquero de la empresa Wackenhut.

"Lo que se hace es verificar lo que pasa y comunicarlo al cliente. No podemos tomar acciones represivas", señaló por su parte Pérez Pastori. A lo sumo, añadió, se podrá ingresar al jardín o patio.

Algunas empresas ofrecen un servicio de custodia de llaves. Esto funciona como autorización de hecho a ingresar a la casa y tiene un costo de aproximadamente 200 pesos.

Stolovas señala que con la simple observación, un operador de estas compañíás bien entrenado se puede dar cuenta si la situación es una falsa alarma o no.

"Según como estén funcionando los distintos sensores de una casa, uno puede darse cuenta si hay alguien caminando o no. Si además se sabe que el dueño no está en casa, se da aviso de inmediato a la Policía".

El presidente de la Cámara de Empresas del Ramos afirmó que, si bien no es un método infalible, los sistemas de alarma y sensores son los preferidos a la hora de buscar seguridad.

"Eso se debe a que las rejas suelen ser fáciles de violar y los perros más que guardianes hoy son tomados casi como miembros de la familia. Entonces, el método más fiable y a la larga económico es la alarma". Más allá que su principal función siga siendo la disuasión.

En lo que va del verano, se mantuvo el promedio del 2004 de 138 hurtos y 15 rapiñas diarias en Montevideo, aunque la tendencia durante la temporada es a la ba-ja, indicaron a El País fuentes policiales.

Sin embargo, las fuentes expresaron que, en este momento, la mayoría de los montevideanos están veraneando en el este o en el interior del país y pueden encontrarse con sopresas cuando regresen a sus fincas.

Dentro de los hurtos, la Jefatura de Policía engloba robos de championes, ropas y garrafas hasta desvalijamiento de fincas.

Según las fuentes, con las estadísticas en la mano, las autoridades policiales han delineado durante el 2004 estrategias tendientes a bajar el número de rapiñas y hurtos con el incremento del patrullaje y operativos de "saturación" en las zonas más problemáticas.

Además, la Dirección de Seguridad ha realizado controles fijos y sorpresivos en calles y avenidas para prevenir las rapiñas a taxis.

- Si se va ausentar de la casa por tiempo prolongado, y tiene conectado un sistema de alarmas, se recomienda tomar en cuenta lo siguiente.

Avisar a la empresa de la cual son clientes, familiares y vecinos que no estarán presentes y por cuánto tiempo.

- Bajar totalmente las persianas. La sensibilidad de algunos sensores volumétricos suelen brindar varias falsas alarmas debido a factores tan simples como la trayectoria de los rayos solares que ingresan a la casa.

- Cortar la corriente eléctrica. Para ésto es necesario que el sistema tenga una línea de funcionamiento independiente.

- Para estimar el costo necesario en proporcionar al hogar o comercio un adecuado sistema de seguridad, el director ejecutivo de Proguard, Piero Sansonetti, indicó la existencia de una relación "de 100 a 1" entre el valor del inmueble que se trata de proteger y lo que se invierte en alarmas y sensores.

- Para usuarios de alarmas, estas son más eficaces que los perros, los cuales son neutralizados por ladrones.