Agassi confiesa que usó droga durante su carrera

 20091028 600x453

Andre Agassi, uno de los grandes del tenis mundial, admitió en su autobiografía que en 1997, cuando su carrera entraba en declive, consumió la sustancia de efectos estimulantes conocida como "christal" (metanfetamina). En su libro "Open: an autobiography", publicado por capítulos en The Times, describió con franqueza como su asistente lo introdujo en la droga, cuando su juego pasaba por un mal momento y tenía dudas sobre su inminente matrimonio con la actriz Brooke Shields. El ex tenista admitió haber mentido a la ATP "porque mi vida y mi carrera estaban en juego". Agassi dijo sentirse ahora aliviado porque siempre había querido confesar ese hecho oscuro de su pasado.

El ex tenista estadounidense Andre Agassi sorprendió ayer a todo el mundo con polémicas declaraciones. El ganador de ocho Grand Slam, admitió en su autobiografía "Open" haber consumido durante su carrera la droga metanfetamina, conocida como "Chrystal Meth".

El que fuera número uno del tenis mundial, relató que dio positivo en un control antidopaje y que la Asociación de Tenis Profesional (ATP) prefirió tapar lo que hubiera sido un escándalo y el fin de su carrera.

Aunque su libro no saldrá a la venta hasta el 9 de noviembre, el periódico londinense `The Times` tenía previsto publicar una serie sobre las confesiones del tenista. Antes de que eso ocurra, los medios estadounidenses ya se han hecho eco de lo dicho por Agassi.

UN MAL AÑO. Agassi, de 39 años, tomó la droga altamente adictiva, cuyo consumo se penaliza en EEUU con hasta cinco años de cárcel, a principios de 1997. A modo de justificación, confesó que ese año había sido uno de los peores de su vida: había fracasado en varios torneos por encontrarse fuera de forma. El tenista comenzó ese año siendo octavo en el ranking ATP y terminó en la posición 110 del mundo. Su vida afectiva tampoco andaba bien, pues las dudas sobre su inminente boda con la actriz Brooke Shields conseguían quitarle el sueño.

El romance con la bella Brooke no había sido de mucha ayuda para el temperamental tenista. Los constantes conflictos y reconciliaciones estaban siempre presentes en las portadas de las revistas.

LA INVITACIÓN DE SLIM. En el libro, Agassi relata que un asistente, identificado en los textos como "Slim", le indujo a consumir la metanfetamina.

Menciona con detalles, la forma en que el hombre lo inició en el consumo: "¿Quieres conseguir elevar el ánimo? ¿Por qué no pruebas el Gack? Le pregunté qué era el Gack y me contestó que era metanfetaminas de cristal", escribe Agassi.

"¿Por qué lo llaman así? Slim le respondió: Es el sonido que haces cuando estás en el éxtasis de la droga... te hace sentir como Superman, amigo".

"Slim puso un pequeño montón de polvo en la mesa de café, cortó una raya y la aspiró por la nariz. Cortó de nuevo y yo hice lo propio. Luego me fui al sofá y consideré que había cruzado el Rubicón", confiesa Agassi en su autobiografía.

POSITIVO. Agassi recibió una llamada de un médico que trabajaba con la ATP, diciéndole que no había superado una prueba antidopaje. "Me senté en una silla con un bloc de notas y escribí una carta a la ATP. Estaba llena de mentiras. Dije que había bebido por accidente uno de los refrescos de Slim que contenía las drogas. Pedí su comprensión y su indulgencia".

Del relato de Agassi se puede desprender que la ATP, el máximo organismo del tenis masculino, retiró la prueba del positivo y evitó que saliera a la luz pública.

Por su parte, la Asociación negó haber disimulado el resultado positivo del control antidrogas de Agassi. "El programa contra el dopaje en el tenis estipula, y siempre fue así, que la decisión sobre si hay o no violación de las reglas antidopaje debe tomarla un tribunal independiente. La ATP siempre respetó esta regla y nadie de ATP tiene el poder ni los medios para decidir sobre las consecuencias de un caso de dopaje", añade el texto. (AGENCIAS)

Nacido para campeón

Fanático del tenis, el padre de André estaba determinado a hacer todo lo posible para que alguno de sus cuatro hijos fuera un jugador de renombre, al punto que le regaló su primera raqueta cuando éste cumplió dos años. En su niñez, André golpeaba cerca de 3000 pelotas al día, siete días a la semana. Tras una carrera meteórica, el joven se convirtió en uno de los mejores tenistas del mundo. Fue pareja durante años de la actriz Brooke Shields, y después de su separación regresó al mundo del tenis con todas sus energías: afeitó su cabeza y comenzó un riguroso programa de entrenamiento que le permitió recuperar su nivel de juego. Por esas épocas se enamoró perdidamente de la talentosa tenista alemana Steffi Graf, con quien se casó en el 2001. Es padre de dos hijos, Jaden Gil, de siete años, y Jaz Elle de seis. En junio del 2006, luego de 21 años de intensa actividad, anunció su retiro. Su último torneo fue el Us Open.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar