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«Hay delitos informáticos por remates virtuales informales»

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Rematadores

ENFOQUE

Con 18 años de trayectoria, el martillero Pablo Ponce de León es el nuevo presidente de la Asociación Nacional de Rematadores y Corredores Inmobiliarios,

¿En qué temas va a poner acento durante su gestión al frente de la gremial de los rematadores?

Asumí como presidente el pasado 3 de septiembre por un período de dos años, con el objetivo fundamental de acercar a la Asocación Nacional de Rematadores a los profesionales del interior del país. Con la pandemia, se suspendieron encuentros periódicos de intercambio y cursos de capacitación, que ahora se deben ir retomando. Vamos a estrechar el vínculo con los rematadores del interior, sobre todo con los colegas dedicados a los remates rurales. Aspiramos a lograr una mayor presencia territorial hasta con la creación de regionales.

¿Cómo se retomó la dinámica de la actividad con la presencialidad?

Con la pandemia, se declaró una feria judicial extraordinaria que paró practicamente los remates judiciales. Al mejorarlos indicadores sanitarios, desde la segunda quincena de julio 2021 se comenzó a retomar la actividad luego de cerca de tres meses de paralización total en la fijación de remates judiciales. Hoy la actividad presencial, con aforos limitados, se va retomando con un empuje extraordinario. El calendario de la sala de nuestra Asociación para este año está prácticamente completo. Es que hay muchos remates atrasados como consecuencia de la pandemia. Hay una puesta al día, aunque a fin de año siempre se registra un crecimiento del número de remates.

¿Qué ocurrió este último año con los valores de los inmuebles subastados?

Los valores están muy firmes en sintonía con la realidad del mercado inmobiliario. Existe una demanda sostenida. Hay un público muy volcado a la inversión en viviendas.También hay un mercado dinámico para la adquisición de depósitos comerciales e industriales. Las oficinas hoy están algo más deprimidas.

¿Los remates virtuales son una alternativa para el crecimiento del sector?

En el caso de los remates ganaderos, prácticamente no influyó la pandemia en el desarrollo de la actividad. En el año 2001, a raíz de la aparición de la aftosa, los remates ganadores migraron hacia la subasta en pantalla en un ejemplo de reconversión que mantiene hasta hoy su dinámica y valores. En el caso de los remates de vehículos siniestrados o recuperados del Banco de Seguros del Estado, también se utiliza la subasta por pantalla como un complemento de la presencialidad. Hay que destacar la venta de bienes pertenecientes a distintos organismos públicos realizados con la administración de la Asociación es una gran muestra de confianza lograda por parte del Estado.

¿Cuáles son los desafíos de los remates online, que despiertan interés también en el exterior?
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La pandemia aceleró los remates virtuales, con el desarrollo de muchas plataformas. Todo remate —presencial o virtual— debe estar acompasado con la figura del rematador, con su número de matrícula y de RUT. Nuestra actividad se basa en la confianza, la transparencia y las garantías necesarias del acto. En este tiempo, hubo un gran crecimiento de los remates en línea, con la aparición de plataformas sin la presencia de profesionales martilleros, lo cual está prohibido expresamente por la ley N° 15.508.

¿Quién controla la actividad de los remates ?

Quien debe controlar es la Comisión Administradora del Registro Nacional de Rematadores, que está integrada por un representante de la Suprema Corte de Justicia, del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y un representante de la Asociación Nacional de Rematadores. Cualquier subasta siempre debe contar con la participación de un martillero profesional matriculado, que está inscripto en el registro porque cumple una serie de requisitos...

¿Quién debe actuar ante una subasta informal?

El MTSS debería elevar las actuaciones ante una posible comisión de delitos informáticos para que la denuncia siga su curso legal. Ya hay varios casos de delitos informáticos cometidos por la realización de remates virtuales informales, apartados de la ley.

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