De Montevideo a liderar un proyecto de inteligencia artificial en una tecnológica global en Barcelona

Sol Manini es ingeniera en sistemas por la Universidad ORT y su camino internacional comenzó en 2020, cuando se mudó a España para trabajar en Glovo; hoy es parte de la empresa Leadtech Group

Sol Manini. La uruguaya se mudó a Barcelona en 2020.
Sol Manini. La uruguaya se mudó a Barcelona en 2020.
Foto: Gentileza Sol Manini

A sus 16 años, durante una clase de orientación vocacional en el liceo, Sol Manini escuchó un testimonio que le marcaría su vida. Un joven de 24 años contó que trabajaba en una tecnológica de EE.UU. desarrollando aplicaciones y otras herramientas de software, mientras viajaba por todo el mundo. «Me gustaban mucho las matemáticas, las ciencias, y dije: ‘¡Quiero!’. Siempre tuve esa idea de trabajar desde donde quisiera», recordó.

Hoy, a los 30 años, vive en Barcelona junto a Hannah Redler, su pareja inglesa, y hace un par de semanas ingresó a trabajar en Leadtech Group, una digital production company catalana con presencia global, principalmente en el mercado de EE.UU. Manini fue elegida para desempeñarse como líder de proyectos avanzados vinculados con la aplicación de inteligencia artificial en los productos de la empresa. Según contó la uruguaya desde Barcelona, ciudad a la que arribó hace cinco años, su plan inicial poco a poco se ha ido cumpliendo. «Nunca me gustó en la vida pensar en algo para siempre. Ahora estoy acá, pero hay muchas oportunidades a nivel profesional. Yo voy escuchando a medida que avanzo en la vida, no es que tengo los pies clavados en un lugar. Esta forma de pensar y actuar es lo que me ha abierto pila de puertas», reflexionó.

Crisis es oportunidad

Manini es ingeniera en sistemas por la Universidad ORT y su camino internacional comenzó en 2020, cuando, en busca de una oportunidad laboral en el exterior, fue seleccionada por la empresa de delivery de Barcelona, Glovo. Su preferencia por España no fue casual: en 2016 había hecho un intercambio estudiantil en San Sebastián, en el norte del país. «Ahí me enamoré de la cultura española, la cercanía que había entre nosotros y ellos, la familiaridad», explicó.

A su regreso a Uruguay, terminó la carrera en paralelo a su trabajo y, tras recibirse en 2019, decidió tomarte un tiempo sabático. En enero de 2020 emprendió un viaje por el sudeste asiático que quedó trunco a las dos semanas por la irrupción del covid-19. «Fue un caos el regreso y me había quedado esa necesidad de viajar. Así que, a mi retorno, mientras trabajaba en otra empresa uruguaya, empecé a aplicar a empleos en Europa. Uno de ellos fue en Glovo. En abril me postulé y al mes y medio me contrataron. Trabajé remoto un tiempo y, en julio, cuando abrieron las fronteras, me fui», relató.

Sol Manini. Hoy vive en Barcelona y planea generar "un puente" entre esa ciudad y Uruguay.
Sol Manini. Hoy vive en Barcelona y planea generar "un puente" entre esa ciudad y Uruguay.
Foto: Gentileza Sol Manini

Manini permaneció tres años en la compañía, que luego se vendió a la multinacional Delivery Hero, propietaria también de PedidosYa. Durante ese período, vivió el crecimiento explosivo de la multinacional, lo que representó para ella una oportunidad profesional «muy grande».

En sus inicios, formó parte del equipo que comenzaba a desarrollar la aplicación para iOS porque era un producto en plena expansión. «Estaba creciendo mucho y tenía que asegurar la escalabilidad. Entré a un nuevo equipo con el objetivo de modernizar la aplicación. Fue un proyecto innovador dentro de la empresa, que duró cerca de un año y medio y que después se replicó en distintas partes de la app», detalló.

Esa experiencia marcó un antes y después para la uruguaya, tanto en la empresa como en su carrera.

Desde entonces, comenzó a involucrarse más en la parte de producto y de negocio. «Lo bueno de trabajar en una empresa de producto como Glovo es que justifica todo lo que hace a través de métricas de negocio. Al final, todos los proyectos que llevábamos a cabo tenían un objetivo que medíamos en base a esas métricas. Y eso fue una parte que no había tenido en mi carrera y que me abrió una nueva puerta para desarrollarme».

Sol Manini.

Luego pasó al área de A/B testing, ascendió y dirigió proyectos de modularización, hasta que a fines de 2023, cuando estaba a punto de pasar a ser product manager o líder tecnológico, dejó Glovo. «Se había vendido a Delivery Hero y eso cambió mucho la empresa, y mucha gente se había ido. Entonces, decidí tomarme unos meses sabáticos para ver qué quería hacer y volví a Uruguay», comentó.

Volver a empezar

Se tomó un mes en Argentina, otro en Brasil y uno en Uruguay. Ya en su país, y mientras analizaba qué quería hacer, recibió un llamado que le marcaría el rumbo. «Me contactó un compañero de la facultad con quien había trabajado para empezar una consultoría. Me gustó la idea de trabajar para mí y acepté. Tomamos un par de proyectos en Uruguay y luego volví a España, donde generé una red de contactos y surgieron proyectos bastante grandes. Con el tiempo nos interesó la rama de desarrollo de software sostenible y buenas prácticas, y trabajamos en proyectos de cambio climático y huella de carbono. Hasta que, este año, comenzamos a meternos en IA, y en ese proceso, llegó la actual propuesta», repasó.

Hoy Manini es parte de una empresa que incursiona en lo último en tecnología, algo que le atrae «por el desafío de estar con lo que genera el cambio». Si bien no contempla aún la idea de regresar a Uruguay, y prefiere crecer «donde esté la oportunidad», en su mente tiene un plan concreto: «Me gustaría generar un puente entre Uruguay y Barcelona, o donde sea que esté, porque siento que Uruguay es un hub tecnológico de Latinoamérica y puede existir una sinergia desde ese lado con el lugar donde esté», concluyó.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Glovo

Te puede interesar