Revolución digital al servicio de los recuerdos

En el 2004 se vendieron 63 millones de cámaras en el mundo. El mercado se amplía cada vez más con modelos para todos los usuarios, desde el más amateur hasta el muy sotisficado.

EL MERCURIO | GDA - H. IBARRA SANTANA

Las ventas de cámaras digitales superaron los 63 millones de unidades en todo el mundo durante el 2004, según datos de la consultora norteamericana Lyra. Eso significó un incremento del 36 por ciento respecto de 2003. Además, para el año 2008 pronostican que las ventas sobrepasarán los 100 millones de equipos.

Definitivamente, las cámaras digitales se han convertido en aparatos cada vez más populares en los hogares. Muchas personas ya las utilizan constantemente para perpetuar momentos que no desean olvidar.

No obstante, para quienes aún no se han subido al carro de la tecnología, la fotografía digital podría parecer algo complicado, pese a que en algunos casos el uso es tan sencillo como el de una cámara tradicional, y los precios continúan disminuyendo.

Hay cámaras para todos los requerimientos y presupuestos. Es por eso que antes de optar por una en particular, es necesario detenerse a pensar qué se pretende hacer con ella. Por ejemplo, compartir las fotos a través de internet; guardarlas en el computador; almacenarlas en un CD para verlas en el televisor con el reproductor de DVD, o imprimirlas en casa o en un laboratorio profesional.

Una vez definido qué se pretende hacer con las imágenes, se puede determinar qué tipo de cámara es la que mejor se adapta a las necesidades. En ese sentido, se pueden encontrar cuatro tipos: compactas, estándar, para aficionados y profesionales.

Las compactas son aquellas de hasta 4 megapixeles (MP), con un nivel de prestaciones estándar, y almacenan las imágenes sólo en formato JPEG. Las estándar van desde 4 hasta 6 MP, poseen un alto nivel de prestaciones y permiten algunas configuraciones manuales. También almacenan las imágenes sólo en formato JPEG. Las cámaras para aficionados poseen resolución que varía entre 4 y 8 MP; es posible manejar diversas funciones fotográficas manuales, como obturador, diafragma, balance de blancos y configuraciones de captura. Estas permiten almacenamiento JPEG o TIFF. Y por último las profesionales comienzan en 6 hasta 14 MP; poseen cuerpos compatibles con óptica tradicional; todas las funciones fotográficas son manuales; el flash es externo, y el formato de almacenamiento es JPEG, TIFF y RAW.

NIVEL. Según el conocimiento del usuario es posible establecer otra clasificación. En primer lugar se encuentran los que buscan una cámara que sólo requiera enfocar y presionar un botón.

Luego están aquellos que conocen un poco más del tema y que probablemente han tenido otra cámara. Los de esta categoría buscan algo que les permita crear composiciones, pero usando una mayor cantidad de prestaciones y tener más control manual de las funciones. Finalmente se encuentran los profesionales (y otros extremadamente sofisticados) que buscan una cámara que satisfaga sus necesidades del mismo modo que lo hace una tradicional de alto nivel.

En conclusión, al usuario básico le basta con una cámara que tome fotografías con calidad de imagen aceptable. O sea, con una resolución de 2 MP sería más que suficiente. La idea es obtener imágenes que luego se verán en una pantalla. El avanzado necesita una cámara que permita realizar tomas en las que tengan cierto grado de influencia (es decir, algo no tan automático). Por ejemplo, manejar opciones como velocidad del obturador. Como es posible que también requieran imprimir las fotos, lo recomendable es que la máquina tenga 3 MP y más.

Y por último el usuario profesional, cuya máquina debe poseer todas las funciones de una tradicional. La resolución puede ser de 5 MP hacia arriba, aunque en algunos casos incluso puede ser menos, puesto que la óptica (lente) es la que marca la diferencia.

FUNCIONES. Es evidente que las funciones netamente fotográficas, tales como velocidad de obturación y control de diafragma, deben tener prioridad, especialmente al momento de elegir un modelo por sobre otro. Asimismo, entre las principales funciones que debe poseer cualquier cámara digital se encuentran: auto disparador; balance de blancos; control del flash, y sensibilidad ISO. A partir de esas se agregan otras, como las posibilidades de grabar video, enfoque manual, y disparos múltiples.

Para comprender mejor el concepto ISO, hay que recordar que los rollos normales tienen una sensibilidad entre 100 y 400 ISO. Eso significa que mientras mayor sea la sensibilidad menos luz se necesita y se puede fotografiar con mayor nitidez objetos en movimiento o en penumbra.

Siguiendo esa clasificación, algunas cámaras digitales también pueden cambiar su sensibilidad, normalmente entre 100 y 400 ISO, mientras que las más avanzadas van desde 50 hasta 1600 ISO.

Las diversas funciones para tomar una foto ayudan a obtener mejores resultados. A través de esas opciones, la cámara realizará obturaciones más rápidas o lentas, y usará una sensibilidad ISO adecuada, entre otros. Por supuesto, todo lo anterior está programado en el equipo y no requiere ningún control manual. Un claro ejemplo de esto es la función utilizada para fotografiar deportes. Con ella es posible capturar imágenes de personas (o vehículos) en movimiento, sin que se vean borrosas, ya que el obturador se abre y cierra más rápido que lo normal.

El macro es otra función muy atractiva para los fotógrafos detallistas, ya que permite realizar acercamientos a pocos centímetros del objetivo. También existen cámaras que poseen funciones para realizar fotos en la nieve y cuando hay exceso de sol, que son dos situaciones comunes de luminosidad extrema.

URUGUAY A LA VANGUARDIA

NIKON COOLPIX 2200. 2.0 Megapixeles efectivos. Modos de exposición automáticos, 15 en escena, asistente panorama. Zoom óptico 3x y zoom digital 4x. Modo captura: simple, continuo, multi disparo 16, opciones de color, modo película sin sonido. Memoria interna de aprox. 14.5 MB. Formato en JPEG. Flash incorporado: auto, reducción de ojos rojos, flash forzado, cancelado y sincronización lenta. Precio: U$S 245.

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NIKON COOLPIX 8800. 8.0 Megapixeles. Modos de exposición: automático, programa flexible, manual, 12 en escena, prioridad abertura, prioridad obturación. Zoom óptico 10x, zoom digital 4x. Modo captura: simple, continuo H, continuo L, multidisparo 16, modo película con sonido, continuo UHS, Buffer 5 disparos. Formato en NEF, TIFF, RGB, JPEG con 4 opciones de comprensión. Flash incorporado: auto, reducción de ojos rojos, flash forzado, cancleado, sincronización lenta y sincronización con la cortina trasera. U$S 1.230.

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