Montevideo será el escenario donde pasado y presente se fusionen en una aventura histórica interactiva: Cisplatina 1825, el nuevo videojuego de la productora uruguaya Tótem, fue recientemente declarado de interés por la Junta Departamental. El proyecto promete una experiencia inmersiva que incluye narrativa y realidad aumentada, con el objetivo de acercar la historia nacional a públicos de todas las edades.
Tótem Games es una productora con un enfoque particular: los videojuegos como herramientas de impacto social. Fundada por Gerson Da Silva, quien también forma parte de Ironhide Game Studio -creadores del exitoso Kingdom Rush-, la empresa ha desarrollado títulos que abordan temáticas como el uso responsable del agua o la accesibilidad para personas con discapacidad visual. Entre sus producciones se destacan Water 2050, actualmente en exhibición en la Expo Osaka 2025, y Libertaria, una aventura sonora inclusiva creada junto a la Asociación de Ciegos del Uruguay.
“La idea de Tótem fue siempre la de hacer juegos atractivos y divertidos, pero que además tuvieran un mensaje importante”, explica Da Silva a Domingo. Y agrega: “Queremos que todos tengan derecho a jugar, y que mientras lo hacen puedan aprender o reflexionar”.
La historia divertida
El videojuego se sitúa entre los años 1823 y 1825, cuando el territorio oriental pertenecía al Imperio del Brasil, que lo bautizó Provincia Cisplatina. Toma como eje los movimientos de resistencia, en particular la acción de los Caballeros Orientales y la Cruzada Libertadora, liderada por Juan Antonio Lavalleja.
La trama comienza en el presente, donde el protagonista investiga puntos históricos de Montevideo en busca de hojas de un antiguo diario familiar. Cada hallazgo lo transporta a una aventura en el pasado, donde revive sucesos clave de la resistencia. Así, el jugador alterna entre el presente y el pasado, enfrentando puzles, acertijos y misiones de sigilo en un relato dividido en capítulos.
“La idea es que el jugador no sea un espectador de la historia, sino su protagonista”, señala Susana Díaz, también parte del equipo creativo. “Cada capítulo es como un viaje en el tiempo que empieza en un sitio real de la ciudad y te lleva a los años de lucha por la independencia”, dice a Domingo.
Realidad aumentada
Uno de los aspectos más innovadores de Cisplatina 1825 es su integración con la ciudad real mediante la realidad aumentada. Utilizando la cámara del celular, los jugadores podrán escanear elementos de plazas, edificios patrimoniales y museos para desbloquear información, resolver acertijos o avanzar en la historia.
“Queremos que la experiencia se extienda al mundo real, que los jugadores visiten lugares como el Cabildo o la Puerta de la Ciudadela y vivan una especie de National Treasure criollo”, explica Da Silva. “La realidad aumentada les va a permitir encontrar símbolos o pistas invisibles a simple vista y avanzar en el juego”, agrega.
Para quienes no puedan recorrer físicamente estos espacios, el videojuego ofrecerá versiones simuladas dentro de la aplicación. Sin embargo, aquellos que sí participen presencialmente tendrán acceso a recompensas especiales y eventos comunitarios.
Además, Tótem planea realizar actividades públicas en espacios como la Plaza Independencia o el Parque Rodó. Durante estos eventos, se proyectarán cinemáticas del videojuego, habrá stands educativos, actuaciones ambientadas en 1825 y se podrá jugar en consolas o dispositivos móviles.
Investigación histórica
El proyecto se apoya en una investigación histórica. “Gerson viene investigando estos temas desde hace años. Ya había trabajado en 1811, un juego educativo para Plan Ceibal, y ese mismo enfoque lo estamos usando ahora: primero una investigación profunda para definir los hitos narrativos, y luego trabajar con historiadores y pedagogos que validen el contenido”, anota Díaz.
El videojuego apunta a un público amplio, desde jóvenes escolares hasta adultos interesados en la historia nacional, y cuenta con una jugabilidad accesible: diálogos con personajes históricos, resolución de acertijos, interacción con objetos y un ritmo que combina exploración y narración.
“Queremos que sorprenda, que muestre que nuestra historia es mucho más rica de lo que solemos imaginar. La mayoría conoce apenas titulares: que fuimos Provincia Cisplatina, que vinieron los 33, que se declaró la independencia. Pero hay muchas pequeñas historias, momentos casi cinematográficos, que vale la pena rescatar”, concluye Da Silva.
Un juego de descarga gratuita
El modelo económico del proyecto Cisplatina 1825 prioriza la difusión por encima del lucro directo. Por eso, el equipo de Tótem apuesta a un sistema de financiación mediante sponsors y alianzas estratégicas, lo que permitirá que el juego sea gratuito para descargar. Antes, obtuvo el apoyo de los Fondos de Incentivo Cultural.
La reciente declaración de interés por parte de la Junta Departamental de Montevideo fue un paso clave para comenzar la etapa de búsqueda de financiamiento, tanto público como privado. El equipo espera tener una versión final disponible entre cuatro y seis meses después de obtener los fondos necesarios.
“Tenemos todo el diseño, el guion y la propuesta jugable listos. Ahora falta el impulso final para ponerlo en marcha”, detalla Susana Díaz.