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"El último paciente de Alzheimer": un documental que genera esperanza entre quienes padecen esa enfermedad

Ciertos cambios de hábitos como dietas basadas en vegetales, yoga, ejercicios físicos y una rutina de sueño alientan el optimismo entre pacientes y allegados.

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¿Se puede revertir el Mal de Alzheimer con cambios de vida?
Foto: Public Domain Pictures.

O Globo - GDA
Dos personas que sufren de Alzheimer afirman haber detenido o incluso revertido la progresión de la enfermedad a través de cambios en el estilo de vida.

Cici Zerbe, por ejemplo, relató haber experimentado una reversión de los síntomas después de participar en un ensayo clínico que implicaba cambiar a una dieta basada en vegetales, hacer ejercicio regularmente, apoyo en grupo, yoga y meditación.

Otro participante, Simon Nicholls, de 55 años, compartió algo similar. A pesar de tener dos copias del gen APOE4, que aumenta el riesgo de Alzheimer, Nicholls experimentó una notable mejoría tras realizar cambios en su estilo de vida.

“Estaba muy preocupado. Tengo un hijo de tres años y un hijo de ocho años. Es muy importante para mí, a medida que envejezco, tratar de estar a su lado en el futuro. Hay muchos [cambios] en el estilo de vida que puedes hacer para, con suerte, retrasar la enfermedad y tener más tiempo, que es todo lo que necesitamos hasta encontrar una cura”, dijo en una entrevista con el corresponsal médico jefe de CNN, Sanjay Gupta, en el documental "The Last Alzheimer's Patient" (El último paciente con Alzheimer) de la misma emisora.

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Foto: Difusión.

El estudio, que está previsto que se publique en junio de 2024 en la revista 'Alzheimer's Research & Therapy', explora los efectos de cambios intensivos en el estilo de vida en el deterioro cognitivo leve o en la demencia temprana debido a la enfermedad de Alzheimer.

Nicholls afirmó que toda su familia había tenido “ataques cardíacos interminables”, lo que resultó en la muerte de su abuelo materno alrededor de los 50 años; y su madre tuvo tres ataques cardíacos después de los 50 años antes de desarrollar demencia.

“Lamentablemente, mi madre falleció de lo que pensamos que era Alzheimer a los 70 años”, dijo Nicholls. “En los últimos 10 años de su vida, ella solo se sentaba en una silla, balanceándose, mientras tomaba alrededor de 14 medicamentos. Prefiero tener una vida más larga y luego irme rápido”, afirma.

Impacto

Avances

El impacto del estilo de vida en la cognición está ganando relevancia a medida que los científicos exploran los beneficios de una dieta basada en vegetales, la reducción del estrés, el ejercicio y el sueño de calidad. Los científicos también podrían estar un paso más cerca de la cura para la enfermedad de Alzheimer después de descubrir quién tiene mayor probabilidad de contraer la enfermedad.

El neurólogo preventivo Richard Isaacson, que supervisó el caso de Nicholls, se sorprendió con la desaparición de biomarcadores reveladores de Alzheimer en solo 14 meses.

La intervención inicial del paciente involucró la prescripción de tirzepatida, un ingrediente de medicamentos como Mounjaro y Zepbound. Este medicamento inyectable suprime el apetito, estimulando hormonas que regulan los niveles de azúcar en la sangre.

Al mismo tiempo, a Nicholls se le instó a intensificar su rutina de ejercicios físicos, incluyendo la incorporación del entrenamiento de fuerza tres veces por semana y la dedicación diaria de 45 a 60 minutos a los ejercicios.

“Me encanta caminar todas las mañanas al amanecer durante una hora y media con un podcast. Doy 10,000 pasos o más todos los días. Soy muy constante. También hago un entrenamiento de cuerpo entero con pesas tres veces por semana durante una hora”, explicó.

Mientras tanto, Nicholls implementó restricciones alimentarias, como la eliminación de azúcar, edulcorantes artificiales, alcohol y alimentos ultraprocesados, así como la adopción de un plan alimentario basado en vegetales similar a la dieta mediterránea. Los resultados fueron impresionantes.

“Cuando vi a Simon por primera vez, tenía un poco de barriga, como la mayoría de los hombres de unos 50 años. Cuando lo vi después de nueve semanas, me sorprendí. Estaba totalmente musculoso, en buena forma. En esas nueve semanas, perdió 9 kilos, aproximadamente el 80% de esa grasa, y ganó músculo, lo cual fue excelente”, afirmó el neurólogo.

Nicholls perdió 21 kilos durante ese período, con aproximadamente el 80% de la pérdida atribuida a la grasa. Esta transformación no solo resultó en cambios físicos, sino que también tuvo implicaciones profundas para la salud de Nicholls.

Nicholls también abordó el problema incorporando intervenciones adicionales en su régimen. “Tengo salas de vapor y sauna en mi casa, hago mucho de esto. Ya he probado los baños de agua fría y tengo listas de cosas para hacer que obtengo en podcasts, desde caminar hasta yoga y rutinas de sueño”, afirmó.

Otro desafío significativo a enfrentar fue el sueño de Nicholls, o la falta del mismo, que los estudios han asociado con el deterioro cognitivo acelerado y la enfermedad de Alzheimer. Dadas sus frecuentes viajes internacionales y su agenda exigente, Nicholls luchaba para dormir adecuadamente y sufría de patrones de sueño erráticos debido a los diferentes husos horarios.

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