Redacción El País
El corazón es el órgano que nunca descansa: late más de 100.000 veces al día y responde a cada aspecto de nuestra vida, desde el sueño y la alimentación, hasta el estrés, la risa o incluso el enamoramiento. Cuidar la salud del corazón es fundamental no solo desde lo clínico, sino también desde lo emocional y lo cotidiano.
El órgano que nunca se detiene
Entre los datos más curiosos del corazón se destacan:
- El corazón de las mujeres late más rápido que el de los hombres.
- El estrés intenso puede alterar el ritmo cardíaco en segundos.
- Existe el síndrome del corazón roto (miocardiopatía de Takotsubo), una condición médica real provocada por emociones fuertes como la tristeza o la pérdida.
Además, el corazón de los atletas suele ser más grande, fuerte y eficiente, con una frecuencia cardíaca en reposo más baja, lo que reduce el riesgo cardiovascular.
En cifras, este órgano bombea en promedio 7.500 litros de sangre al día, llevando oxígeno y nutrientes a todo el cuerpo.
Hábitos para cuidar la salud del corazón
El cuidado del corazón va más allá de los medicamentos o la consulta médica. Los especialistas recomiendan incorporar hábitos diarios que fortalecen el sistema cardiovascular:
- Reír: libera endorfinas, reduce el cortisol y ayuda a estabilizar la presión arterial.
- Dormir bien: favorece la autorregulación del sistema cardiovascular.
- Alimentación saludable: incluir chocolate oscuro, frutos rojos y alimentos ricos en antioxidantes, que protegen los vasos sanguíneos.
- Ejercicio moderado y constante: caminar, nadar o andar en bicicleta fortalece el corazón y reduce el riesgo de enfermedades asociadas al sedentarismo.
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